“La última semana se nos ha disparado, pasó la barrera de los mil casos por semana, mil 118, y la semana que va a cerrar con mil 371”, lamentó Víctor George Flores, secretario de Salud en el Estado. De saturarse los hospitales, podrían trasladar pacientes a La Paz
Baja California Sur ya superó las mil defunciones por COVID-19. La Paz y Los Cabos son los municipios con el mayor número de registros en lo que va de la pandemia, y en las últimas tres semanas, más de 100 personas perdieron la batalla contra este mal que aqueja a todo el mundo.
En los cinco municipios de BCS la situación empeoró a partir del 30 de diciembre de 2020, cuando los contagios aumentaron más del 100% a nivel estatal. La Paz pasó de tener 139 casos activos por cada 100 mil habitantes a 271, lo que refiere un incremento del 95% más casos.
“El pronóstico se está cumpliendo, el temor se está cumpliendo, de lo que estuvimos viendo y anunciando en semanas previas, con las fiestas decembrinas el número de casos ha incrementado, y en la última semana se nos ha disparado, pasó la barrera de los mil casos por semana, mil 118, y la semana que va a cerrar mil 371”, lamentó Víctor George Flores, secretario de Salud en el Estado.
Los Cabos es el de mayor crecimiento en lo que refiere al aumento de contagios. De 48 casos activos por cada 100 mil habitantes, hoy tiene 135 por cada 100 mil. El incremento superó el 181%, casi el doble de los casos que tuvo al cierre de diciembre. Y ahora, enero trajo los estragos de no disminuir la movilidad en fiestas decembrinas.
Lo peor es que son casi nulas las camas y ventiladores disponibles para atención médica en las clínicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), extraoficialmente los trabajadores reportan ocupación máxima y mínima disponibilidad de ventiladores de atención COVID.
“El día de hoy iniciamos la reunión de COVID y es muy desesperante, frustrante y por momentos triste saber que la ocupación hospitalaria incrementó, y escuchar las voces de las partes médicas, de que en gran parte tiene que ver con una reacción de parte de la sociedad, en las cuales está manifestando por un lado inconsciencia, porque no miden la consecuencia de sus actos, y egoísta porque pareciera que solamente piensan en sí mismos en momentos de diversión y no en que pueden ser ellos los que lleven la muerte a algún miembro de su familia”, lanzó Julio Castillo, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Los Cabos.
Apenas en la segunda semana de enero, se reportaron 58 camas de hospital ocupadas por pacientes COVID, solo en un fin de semana la ocupación se elevó 24%, poniendo en jaque a las instituciones de salud y en riesgo de retroceder aún más en el Semáforo de Alerta Sanitaria.
En la reunión del Comité de Seguridad en Salud del municipio de Los Cabos, se observó la preocupación de quienes están encargados de la salud municipal. Empresarios tacharon de preocupante la situación en que se encuentra el polo turístico de México.
“Desgraciadamente amanecemos con 14 personas más hospitalizadas el fin de semana, el viernes teníamos 58 personas hospitalizadas, amanecimos con 72 personas hospitalizadas, de las cuales 26 están intubadas y 45 delicados, una ocupación hospitalaria superior al 40%. No es posible que estemos en estos números, con tanta información a la mano y tantos llamados de atención”, recalcó Julio Castillo.
La ocupación general de pacientes hospitalizados en BCS se reporta como la más alta desde el inicio de la pandemia, incluso mayor que las semanas 30 y 31, cuando estuvo uno de los picos más altos en junio.
“Tenemos atención médica ahorita 188 pacientes, la semana pasada 203, se nos ha incrementado también el número de defunciones”, afirmó el secretario Víctor George Flores.
Sin duda el pronóstico no es nada alentador para la economía local, se deben tomar cartas en el asunto, el Consejo Coordinador Empresarial ya alzó la voz, falta que las autoridades tomen decisiones por el bien de los cabeños, más que por la economía turística.
“Estamos en riesgo de retroceder en el semáforo si no corregimos el rumbo. Estamos en un punto clave, que todavía es manejable la situación, no queremos llegar a momentos en que esto se salga de control, Los médicos del Sector Salud están cansados, queriendo que entendamos que están dando la batalla”, apuntó por su parte el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Los Cabos.
MÁS DEL DOBLE DE CASOS
Mientras se esperaba una reducción en el número de casos por el paso de las fiestas de Fin de Año y de la primera semana de enero, los contagios siguen creciendo, sobre todo en Los Cabos, donde la ciudadanía relajó las medidas.
Las primeras tres semanas de enero han sido terribles, los contagios aumentaron 119%, de 91.7 casos por cada 100 mil habitantes al 30 de diciembre, hay 200 casos apenas en la tercera semana de enero.
“Estamos cursando la Semana 3, ya hemos cerrado este sábado pasado la 53, que corresponde al 27 de diciembre de 2020 al 2 de enero de 2021. La Semana 3 tenemos un incremento muy importante del 43.9%, si visualizamos lo que está pasando para la Semana 1, la cerramos en próximos días, faltan algunos días, hemos tenido un incremento del 22.6%; para esta semana 1 tenemos el nivel máximo en incidencia, sumando ya mil 137 casos, la Semana 2 tenemos prácticamente diez días para cerrar y ya tenemos 951 casos”, confirmó Juan Luna Carballo, encargado de Epidemiología de la Secretaría de Salud (SSA).
Las defunciones por coronavirus también demuestran aumentos exagerados, al 30 de diciembre fueron 23 defunciones, y en las dos primeras semanas de enero, 50 y 49, respectivamente.
“La Semana 53 logramos cerrar con 23 defunciones, lo que hemos visualizado a nivel estatal y lo veremos en los municipios, un incremento notable para la Semana 1 y 2, que representan 50 y 49 defunciones; para esta Semana 3 van acumuladas 28”.
En la Capital del Estado se restringió la movilidad a Nivel 5, con aforos del 30% y limitaciones en el tránsito, horarios de negocios y venta de alcohol.
Aun así, continúan las denuncias por fiestas clandestinas, negocios que no respetan los horarios y la venta de alcohol en “aguajes” (tiendas clandestinas), pero la principal medida la aplican los ciudadanos, quienes han retomado el encierro parcial.
“La semana pasada teníamos cerca de 196 casos activos por cada 100 mil habitantes, y esta semana tenemos 200 casos activos por cada 100 mil habitantes a nivel estatal. En La Paz habíamos tenido un incremento muy importante, 139 casos por cada 100 mil habitantes, durante las últimas dos semanas incrementamos a 274 casos por cada 100 mil habitantes, para esta semana en La Paz hemos logrado una reducción de 270.9 casos por cada 100 mil habitantes”, explicó el epidemiólogo.
Los Cabos se encuentra en una mala posición, ya que de diciembre de 2020 a enero de 2021 los contagios subieron 181%, números indefendibles y suficientes para que se tomen medidas urgentes. De seguir ignorando la situación, aunado a la ocupación hospitalaria, podrían generar una crisis pandémica.
No hay hospital que pueda soportar, incluso se habla ya de traslado de pacientes a La Paz para reducir la ocupación, pero siguen llegando a diario.
“Si bien, a partir del día 30 de diciembre hemos tenido un incremento constante en el número de casos activos en Los Cabos, vemos que el porcentaje o proporción ha sido mucho menor que La Paz; tenemos en Los Cabos 135 casos activos por cada 100 mil habitantes. En Mulegé, a partir del 6 de enero ha tenido un incremento de 90.7 casos, tuvo un incremento de 166.84, y para esta semana tenemos un ligero incremento, afortunadamente no ha sido el paso tan grande. En Mulegé tenemos cerca de 195 casos activos por cada 100 mil habitantes”, comparó Juan Luna.
Comondú fue otro de los municipios que retrocedió a Nivel 5 de la Alerta Sanitaria, tuvo por fin una meseta, reducción mínima pero necesaria. Y Loreto, se encuentra igual que La Paz.
Los Cabos y Mulegé son los municipios que siguen aumentando los contagios y los únicos en los que se ha tenido mesura en las alertas sanitarias, lo cual podría ser incluso negligencia del propio Comité de Seguridad en Salud.
“Comondú había tenido una tendencia demasiado rápida y elevada de incrementar el número de casos activos, que del 30 de diciembre al 6 de enero, logró casi triplicar el número de casos, de tener 69.84 pasó a tener casi 188 casos activos por cada 100 mil habitantes. Esta semana logró una disminución importante de 181.82 casos por cada 100 mil habitantes. En Loreto habíamos tenido cerca de 466.37 casos positivos, afortunadamente para esta semana hemos logrado la disminución a 295.52”, expresó Juan Luna Carballo.
DE HOSPITALIZADOS A DEFUNCIONES
Lamentablemente, para más del 40% de los hospitalizados actualmente, el pronóstico no es nada favorable. El diagnóstico es que la mayoría de los pacientes intubados no libren la enfermedad, todo depende de su evolución.
“Tenemos 188 pacientes hospitalizados, de ellos, el 42.6% se encuentran intubados, los hospitales con mayor número de pacientes son el IMSS Número 1 en La Paz, la expansión del IMSS 26 en Cabo San Lucas y el IMSS 26 en Cabo San Lucas con 20 pacientes. De ahí tenemos el ISSSTE La Paz y el Hospital Salvatierra con 15 pacientes, al igual que el IMSS 5. En el medio privado tenemos seis pacientes hospitalizados con COVID”, informó el área de Epidemiología de la SSA.
Juan Luna Carballo reveló que la mayor parte de las defunciones (más del 80%) se da en personas mayores de 50 años, el virus actúa con letalidad, hay mayor riesgo de fallecer.
Sin embargo, más de tres pacientes de diez que se diagnostican con COVID tienden a perder la vida por el simple hecho de padecer la enfermedad, por ello es de vital importancia poner cuidado en estas personas.
“Cerca del 83% de las defunciones en BCS son para grupos de 50 años y más, y si analizamos específicamente la letalidad, que es la posibilidad de fallecer si tienes alguna enfermedad, en este caso COVID, hemos tenido casi siempre la tendencia: el grupo de 70 años y más, 33 de cada 100 personas que se diagnostican con COVID-19, tienen posibilidades de morir”, comentó el experto.
Aunque la mayoría de los pacientes que perdieron la batalla frente al coronavirus padecían alguna comorbilidad, es decir, una enfermedad crónica, para los especialistas en la materia, el número de fallecimientos en personas sanas aumentó. Actualmente más del 13% de los fallecidos eran personas sanas.
“Analizando los fallecimientos por casos con comorbilidades, que son acumuladas al día de hoy 947 defunciones, hipertensión, diabetes y obesidad, son las enfermedades en las que en orden de importancia o de mayor porcentaje han sido representados para las muertes o defunciones por o con COVID. En el grupo de sin comorbilidades han incrementado poco a poco, a este día, 13.2% de muertes por COVID en Baja California Sur, representan a las personas que no tienen ningún antecedente de enfermedades crónico degenerativas”, dijo el epidemiólogo Juan Luna Carballo.
VACUNACIÓN A MEDIAS
En la primera ronda de vacunas que llegaron a BCS, se estimaba vacunar a todo el personal de primera línea de combate contra el coronavirus, pero, por alguna extraña razón y estrategia, se protegió a algunos trabajadores administrativos, incluso personal de la Secretaría de Bienestar, mucho antes que médicos y enfermeros que atienden todos los días a enfermos COVID.
“Hemos recibido en la primera etapa 4 mil 875 dosis, y 4 mil 875 se aplicaron, sabemos que vamos contrarreloj, tienen 120 horas para aplicarlas a partir de que salen de su congelación, que vienen en contenedores especiales a -70 grados y a partir de ahí corre el tiempo. Se aplicaron de la siguiente manera: al IMSS, 2 mil 040; al ISSSTE, mil 415; a Sedena, 95; a la Secretaría de Salud, mil 325”, detalló el secretario estatal de Salud, Víctor George Flores.
“La segunda etapa que se planeaba, se recibieron 975 dosis; de lo que llegó para el IMSS, para el Hospital Número 1 de La Paz, 160 dosis; para el ISSSTE, 165 dosis aquí en La Paz; para Sedena, 240 dosis; para la Secretaría de Salud en San José del Cabo, 165 dosis; y para el Hospital Juan María de Salvatierra en La Paz,245 dosis”, informó el funcionario.
Las vacunas no venían etiquetadas como se dijo al inicio, la mala planeación y estrategia de la Federación falló, quienes debían ser los primeros, fueron los últimos de la primera fase.
Mientras médicos y enfermeros se debaten todos los días por su salud, personal administrativo y ajeno al sector se vacunaron.
“Debe venir etiquetado, así lo creímos nosotros, hicimos un censo y lo mandamos a México para que estuviera etiquetado; con base a esos censos, en una computadora la gente que administra esto, que son los Servidores de la Nación, en teoría era que llegue el candidato (el trabajador de salud), se reporta a ‘Juan Pérez’, se revisa para sacar la forma, llena esto y te van a vacunar, eso es en teoría. En la realidad no es así, en la realidad los sistemas están que se caen, no se puede consultar esa base de datos, no se está consultando, llega la persona y nada más llena los papeles, no se está aplicando como está etiquetado en esta primera fase”, denunció el secretario de Salud.
Supuestamente los censos eran para dar prioridad al personal de salud, pero no fue así, ya que, al momento de aplicar las vacunas, ni siquiera tomaron en cuenta el censo de trabajadores de la salud, todo fue en vano; hubo preferencias antes que proteger al personal.
“Se hicieron los censos, todas las instituciones en su personal lo hicieron, iban a estar cargadas en unas computadoras, iba a llegar el candidato a vacunar, se iban a reportar ahí, iban a checar ahí que estuviera inscrito y llenaba un registro en la computadora. Pasas a vacunarte y luego a observación, pero resulta que no está funcionando eso de los censos, llega la gente, se presentan con identificación, nada más les dicen que pasen, llenen unos papeles, dan de alta y te pasas a vacunar y de ahí a observación. Ese es el flujo real, no están consultando los censos que se hicieron, en el cual se dividieron los de primera línea, segunda línea y el resto de la población de trabajadores de la salud”, mencionó George Flores.
Aunque no quiso decirlo directamente, dio a entender que hubo personas que no debieron vacunarse, que debieron ceder el medicamento a quienes están combatiendo la enfermedad.
“De ahí de que posiblemente hayan salido con que en tal unidad se vacunaron tales personas que no están en la lista de la primera línea de Covitarios, eso es lo que ocasiona esta situación, no están consultando el censo. Solo tenemos el grueso de la población vacunada, no sabemos cuántos médicos, enfermeras, cuántos administrativos, porque en algunos lados se vacunaron administrativos, por lo que te digo”, señaló.
Innecesariamente participaron 56 servidores de la Secretaría de Bienestar, los incluyeron en la vacunación, gastaron en capacitaciones, aun cuando existe personal de vacunación con experiencia y listos para inmunizar a la población.
“Hicimos también un censo para el sector privado, ya lo enviamos para que llegue la vacuna. Se registraron más de 800 personas, nosotros cumplimos con lo que nos dice la Federación. Los Servidores de la Nación, entiendo que es su otra tarea que tienen, les dieron una capacitación no sé de cuántas horas y es lo que captan, es lo que se tiene, hay mucha información que no sabríamos decir en este momento. Queremos reconocer toda la buena disposición, pero hace falta experiencia para poder llegar a buen término”, el titular de la Secretaría de Salud del Estado.
INCERTIDUMBRE EN FECHAS DE VACUNACIÓN
Lo cierto es que está en duda la próxima vacunación, ni siquiera se sabe si será la misma que se aplique en una segunda dosis, el Gobierno de México está tratando ya una vacuna distinta a Pfizer/BioNTech, que es la que se aplicó en primera instancia.
De cambiar de marca, los más de cinco mil trabajadores de la salud vacunados, habrán sido en vano, ya que combinar dos vacunas distintas podría causar reacciones adversas, según expertos de la SSA.
“El resto de las personas pensamos que ya no va a ser por censo, porque ya se trabaja con base a los criterios, ya cambiaron, iba a ser por ciertos grupos en el primer grupo, es el personal sanitario que enfrenta COVID, que es en el que estamos; después vienen personas adultas mayores, de 60 años y más. Pensamos que ya no va a haber censo, pero la verdad es que no tenemos la certeza, no tenemos el cronograma, pensamos que se van a ir a formar, o quizá Bienestar esté haciendo el censo, no sabemos”, confirmó el secretario Víctor George Flores.
Una vez que concluya la segunda etapa de vacunación con los adultos mayores, seguirán con pacientes con enfermedades crónicas, en el cuarto criterio están los maestros, y, por último, la población en general.
Sin embargo, nadie sabe cuándo se llevará a cabo la vacunación, el propio Comité de Seguridad en Salud desconoce los procedimientos del Gobierno de México, ha sido muy cerrado el desglose de información y ni siquiera se cuenta con vacuna suficiente.
“Hay cosas que no puedo responder referente a vacunación, por ejemplo, ahorita la vacuna que nos llegó a San José del Cabo, llegan 165 dosis al Hospital Carrillo, de ahí se van a vacunar los que están pendientes de la Secretaría de Salud de la primera línea, y el resto para los de IMSS o al ISSSTE de primera línea que les hiciera falta. No lo decidimos nosotros, lo decidieron allá en México, y son instrucciones”, informó George Flores.
La estrategia de inmunización está en duda, hay protocolos que no se están tomando en cuenta, por ejemplo, la Secretaría de Bienestar está convocando a reuniones masivas a los adultos mayores, y lo más probable es que así sea la campaña de vacunación, derivado de que se ha ignorado el censo.
“Supuestamente se pretende, y así lo ha dicho la Federación, que sea primero la zona rural, pretenden que vayan los brigadistas a estar vacunando, nosotros ya informamos de las instituciones cuántos vacunadores contamos en nuestras plantillas, para que participen en esta tarea. No sabría decir si es en el campo, en una casa, pero lo ideal sería en un Centro de Salud o en una clínica, para que vayan a vacunarse, porque ahí hay cosas para auxiliarlos en caso de una reacción, es lo ideal, pero pues no lo decidimos nosotros”, lamentó.
Preocupa que se tome la determinación de vacunar en primera instancia a la zona rural, pues el problema de contagios está en las ciudades, y, de no parar la cadena de contagio, es posible que los casos se multipliquen en lo que concluyen con la dichosa campaña.
No hay fechas, disposiciones o estrategia, hay una terrible falla en el sistema de vacunación para la primera línea, que son pocas personas en comparación a la población en general.
“Después de la zona rural siguen las ciudades, y es algo que se ha cuestionado, porque el mayor número de casos los tenemos en las ciudades, no en la zona rural, en esas zonas hay menos casos, se puede mantener más la sana distancia, es diferente la mecánica en la zona rural, a ver si tienen cambio de parecer y se van primero donde están los mayores números de casos para cortar la cadena de contagio”, visualizó el funcionario de Salud.
Los beneficiados fueron los Siervos de la Nación, personal que no tiene noción de la salud, pero están experimentando con la salud de los sudcalifornianos, mientras hay personal médico y enfermeros, así como consultorios privados que cada día atienden a pacientes COVID que en muchos casos llegan por un simple resfriado y resulta que son positivos a coronavirus.
“Para esta etapa de la primera recepción de la vacuna, operamos 14 módulos en Baja California Sur, y en cada módulo de vacunación en todo el Estado, iba acompañado de esta brigada que se compone por cuatro Siervos de la Nación, cuatro representantes de las Fuerzas Armadas y el resto del personal de las diferentes instituciones de salud pública. Considerando los números, 14 módulos por 4 que nos acompañaron de la Secretaría de Bienestar, son 56 individuos que eran los Servidores de la Nación que se vacunaron en esta etapa”, puntualizó Heriberto Soto Haro, director de Servicios de Salud de la SSA.