Dos elementos de la Guardia Nacional en Comundú, un Tercer Maestre y un Cabo, fueron privados de su libertad por desconocidos, quienes los torturaron y dispararon a matarlos. Uno de ellos falleció, el otro se encuentra grave con una lesión en el cráneo. Fueron destacados en esa localidad ante el alza de incidencia delictiva en los últimos meses
Elementos de la Guardia Nacional están en la mira de criminales en Baja California Sur. El primer aviso se dio la madrugada del miércoles 2 de diciembre, cuando dos elementos fueron privados de la libertad durante la madrugada, ambos vestían de civil al momento del altercado.
Los elementos de las Fuerzas Armadas fueron levantados atrás de la tienda Coppel de Ciudad Constitución en el municipio de Comondú, horas más tarde fueron encontrados con claras huellas de tortura y lesiones por proyectil de arma de fuego.
“La saña con que fueron tratados es un mensaje muy claro, o de plano les debían algo, o fue una respuesta a la actividad policiaca que se ha desarrollado en Comondú, ya que las fuerzas estatales y federales son las que han estado ejecutando operativos de seguridad y resguardo en las comunidades apartadas de Comondú, sitio donde mayormente operan células criminales en Baja California Sur”, expuso a ZETA una fuente de la Fiscalía General de la República (FGR).
Los agentes federales fueron localizados en el bordo Los Cajoncitos, el Tercer Maestre Mario Alberto Mondragón Tirado fue encontrado ya sin vida, mientras el Cabo Obed Jiménez Toledo presentaba múltiples heridas y huella de tortura, así como un disparo en el cráneo.
Al cierre de esta edición, se encontraba gravemente lesionado en el Hospital del ISSSTE, donde le resguardan agentes de la Guardia Nacional.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) confirmó el atentado sin revelar la intervención de la Guardia Nacional:
“Agentes estatales de Investigación Criminal (AEIC) y peritos adscritos a la Dirección de Servicios Periciales se constituyeron al domicilio ubicado en las calles Rodolfo Montaño entre Márquez de León y Agustín Arreola. Localizaron el cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino con signos de violencia. A otra persona del sexo masculino, los servicios de emergencia lo trasladaron a un nosocomio del lugar para su atención médica”, informó la institución.
Las investigaciones están siendo llevadas por la FGR y la PGJE, ya que al tratarse de un atentado contra elementos federales, se ha instruido la ubicación de los responsables.
Los Fuerzas Armadas fueron colocados estratégicamente en Comondú para vigilar los movimientos ilegales que se han estado registrando en la zona marítima, y para apoyar en el operativo interinstitucional en Ciudad Constitución e Insurgentes, siendo un pilar importante para el 17 Regimiento de Caballería Motorizada de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El Servicio Médico Forense levantó el cuerpo del agente caído, así como los indicios de la escena del levantón, donde pudieron encontrar un bate de aluminio y dos casquillos percutidos calibre 9 milímetros al lado de una mancha de sangre.
EL LEVANTÓN
Durante la madrugada del miércoles, los agentes Mario Alberto Mondragón Tirado, el Cabo Obed Jiménez Toledo y un tercero, caminaban por la vía pública tras salir de una taquería cercana, por la parte trasera de una tienda Coppel, cuando un vehículo frenó de golpe a un costado de los elementos.
Inmediatamente salieron hombres armados y los amagaron, el tercer agente logró huir del atentado y meterse a uno de los domicilios. Logrando privar de la libertad solo a los dos primeros, los presuntos sicarios portaban armas de fuego y bates de beisbol, suficiente para llevarse al Tercer Maestre y al Cabo de la Guardia Nacional.
“Inmediatamente cuando nos comentan del atentado contra los compañeros, nos movilizamos para la búsqueda de los compañeros, recorrimos los alrededores, los sitios donde nos dijeron que se había ido los atracadores, avisamos al resto de las unidades del operativo especial y recorrimos toda la madrugada, hasta que fueron localizados, lamentable por el compañero caído y uno más lesionado de gravedad”, afirmó un agente de las Fuerzas Armadas.
Los elementos fueron localizados uno a uno, el primero, el Cabo Obed Jiménez encontrado en el Bordo de Los Cajoncitos, tras recibir el reporte de una persona al parecer lesionada; su compañero fue localizado sin vida en la calle Rodolfo Montaño de la colonia Chato Covarrubias, ambos presentaron signos de violencia.
“De primera instancia se recolectó toda la información, hay datos relevantes sobre los atacantes, parecen estar identificado medianamente, ya que uno de los agentes que los acompañaba alcanzó a ver a los agresores, aunque salió huyendo y se refugió en un domicilio, pero es el testigo principal y que también está siendo resguardado por sus compañeros de la Guardia Nacional.
Walter Valenzuela Acosta, alcalde de Comondú, no se ha pronunciado al respecto sobre el ataque a la corporación federal, ni siquiera ha respondido los cuestionamientos de agentes de Seguridad Pública Municipal, quienes denuncian a los propios policías y directivos de sostener tratos con miembros de la delincuencia organizada que ha provocado la violencia en 2020.
LA SOSPECHA DEL ATAQUE
Autoridades de seguridad estatal y federal han puesto especial cuidado en las zonas de Puerto San Carlos, Puerto Adolfo López Mateos y alrededores, sitio donde han recibido innumerables denuncias y quejas de los mismos pescadores. Refieren que hay cobro de piso para quienes ejercen dicha actividad en la zona, lo que les ha preocupado por mucho tiempo.
Los mismos pescadores y algunos elementos de Ciudad Constitución difundieron a través de redes sociales y denuncias hechas a las corporaciones de la AEIC y la Guardia Nacional, la presencia del presunto líder de plaza, a quien apodan “El Tiburón”.
“Es muy probable que esté involucrada alguna célula criminal en el manejo de droga y cobro de piso, ya que la Guardia Nacional ha estado dando golpes en aseguramientos y recorridos en distintos escenarios, no ha dado rienda suelta a operadores de la zona”, informó un agente de Investigación Criminal adscrito a la Comandancia de Ciudad Constitución.
Aunque la información no ha sido confirmada por parte de la AEIC, entre las denuncias realizadas por agentes de seguridad y pescadores, agentes estatales y municipales estarían involucrados con la célula criminal, quienes reciben el pago para dejarlos operar.
De la misma manera, personal de Comisión Nacional de Pesca han solapado el tráfico ilegal de productos como el pepino de mar, abulón y langosta, especies que cuentan con veda y no está siendo respetada.
Los elementos de la Guardia Nacional pudieron ser víctimas del atentado para “escarmentar” al resto de los elementos, al ser quienes apoyan con las labores de vigilancia en la zona.
Esto quedó evidenciado en diversos operativos y persecuciones, una de estas registrada el martes 8 de septiembre, cuando elementos de la Guardia Nacional persiguieron a una camioneta tipo pick-up de color guinda, la cual remolcaba una lancha.
“Los agentes estaban resguardados y a la espera de la llegada de la embarcación, ya les habían informado que sería en Punta Palapas en Puerto San Carlos, a media cuadra del Hotel Chabetila les dieron alcance y chocaron la camioneta, la cual se volcó de inmediato, pero fue auxiliado el maleante por vecinos del barrio Fondeport y negaron el acceso a los elementos, en el lugar quedó resguardada la embarcación”, expuso un miembro de la AEIC en Ciudad Constitución.
Los operativos se han intensificado derivado de las denuncias de los habitantes y pescadores, causando molestia de los grupos que operan en la zona, quizá ese sea uno de los factores que llevaron al atentado contra los elementos de la Guardia Nacional y ya está dentro de las investigaciones.
Elías Camargo, titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, condenó los hechos por “las violaciones a los derechos a la integridad, seguridad personal, seguridad jurídica, y al trato digno al emplear arbitrariamente la fuerza pública”.
Denuncian abusos de estatales preventivos
El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Elías Camargo, recibió una queja de abuso policiaco por parte de elementos de la Policía Estatal Preventiva o de la Procuraduría General de Justicia del Estado, hechos suscitados el 28 de noviembre en Puerto San Carlos, municipio de Comondú.
La queja de oficio quedó registrada bajo el expediente CEDH-LAP-107/2020, por el supuesto abuso policiaco al introducirse de manera ilegal a un domicilio de Puerto San Carlos, llevándose a un pescador.
Según los testimonios de los denunciantes, los presuntos elementos de seguridad privaron de la libertad al pescador por varias horas, fue golpeado y abandonado en pleno monte.
“El conocido pescador, del que se omite su nombre por razones obvias, teme por su vida, ya que los abusivos agentes de seguridad pública lo amenazaron de muerte si daba parte a las autoridades de los hechos ocurridos. La CEDH ya contactó con las víctimas e iniciará con las investigaciones, para identificar a las autoridades responsables y derechos humanos violados”, manifestó la Comisión Estatal, a la par de emprender las indagatorias para poder emitir una recomendación en contra de los servidores públicos que hayan participado.
Si bien la CEDH ya atrajo la investigación, se sabe que la Comisión solo emite recomendaciones, por lo que los afectados deben acudir a la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por Servidores Públicos.
“Los elementos han estado en la búsqueda desde meses de los principales cabecillas encargados de la operación ilegal de la pesca y trasiego de droga, así como el narcomenudeo en la zona de San Carlos, ya los traen de cerca, quizá sea una maniobra para dilatar la acción de la justicia, siguen los operativos y hoy más que nunca, tras el atentado, van a implementar más operativos”, confirmó un agente de Investigación Criminal.
De probarse el acto abusivo de los agentes de seguridad, estarían violentando el Artículo 5 de la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza, que refiere, este “se hará en todo momento con pleno respeto a los derechos humanos”.
Además, del Artículo 2 fracción segunda de la Ley del Sistema Estatal de Seguridad Pública de Baja California Sur, dicta que ante todo se debe “preservar la libertad, el orden y la paz pública, con estricto apego a la protección de los derechos humanos”.