En el marco de la celebración de la decimoctava edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, a realizarse del 28 de octubre al 1 de noviembre del 2020, Andrea Santiago, exhibirá el cortometraje animado “A la cabeza”, parte de la “sección corto animación” del evento fílmico, y en el que enfatiza el tema del sentido de pertenencia.
“Quise abordar un poco sobre esta búsqueda del lugar de uno, de buscar nuestro lugar en el mundo, en ese sentido, encontrar a dónde perteneces y querer encajar a toda costa en un sitio donde vas a tener que renunciar a muchas cosas, en este caso, el personaje principal sufre un cambio no solo de personalidad, sino físico”, puntualizó la cineasta a ZETA.
En charla telefónica, Andrea platicó el reto de producir un corto en stop-motion, así como su participación en la 18⁰ edición del FICM.
“Fue un reto muy grande debido a que es mi primer corto animado, fue un constante aprendizaje, hicimos muchas pruebas y fue sobre todo un trabajo de guion junto a mi maestro, quien me apoyó para narrar la historia de una forma más sencilla. También, ver de qué manera contar la narrativa con los personajes, debido a que son poppets, y había que traducir eso a un lenguaje que fuera factible utilizar con marionetas”, comentó la también directora de fotografía.
“He tenido la oportunidad de estar presente en una pasada edición del festival, y ahora me llena de gusto que el corto se esté exhibiendo, pese a las limitantes de la pandemia y que resultó en mover toda nuestra ruta, pero Morelia siempre estuvo presente. Creo que el formato y la calidez que tiene el festival es algo muy valioso, se trata con mucho respeto y amor a las películas”, subrayó la realizadora.
Con su debut como directora, la joven cineasta destacó los lenguajes fílmicos que se están abordando en el país, y el fututo que le depara al tema de la animación en México.
“Hay muchas cosas con las que no podemos competir con otras industrias, pero creo que algo muy interesante de lo que hay en México, es la cantidad de temas a abordar, eso nos abre los ojos a contar nuevas historias y ahorita es una gran momento, se esta diversificando el cine, se escuchan las voces de la comunidad LGBT+, indígenas y feministas, eso me parece mucho más valioso que tener una industria millonaria, y sobre todo que México no entra en este marco capitalista de producción cinematográfica”.
“Es difícil hablar de una industria de animación en México, son contadas las ciudades que en verdad cuentan con un estudio profesional dedicado a este arte, entre ellos Ciudad de México y Guadalajara, los cuales están haciendo las cosas bien, con nuevas producciones. Hay muy pocos lugares donde puedas estudiar animación al nivel que se exige actualmente, pero algo muy curioso es que se ha generado mucho talento y nuevas escuelas”, concluyó Andrea Santiago.