La ola de calor en las recientes semanas, la temporada alta y un relajamiento de las medidas preventivas sanitarias, representaron una leve recuperación del sector restaurantero en el puerto, sin embargo, nuevamente se avizoran meses complicados para este sector que genera 7 de cada 10 empleos en Ensenada. Canirac propone 100% de deducibilidad en el consumo
En medio de la pandemia por COVID-19, la temporada alta, principalmente agosto, representó un leve repunte en las ventas del sector restaurantero ensenadense, sin embargo, después del 16 de septiembre tradicionalmente se presenta una nueva caída que plantea un futuro incierto para esta actividad que genera 7 de cada 10 empleos en el sector servicios.
Si bien dicho repunte representó un “respiro” para el sector gastronómico, lo que ayudó a cubrir algunos rezagos, nada asegura que la mejoría se mantenga, sobre todo cuando han tenido que asumir el incremento de costos en la operatividad y la falta de apoyos por parte del sector gubernamental.
Iván Nolasco Cruz, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), informó que un 12% de establecimientos ya no pudo abrir después de iniciada la pandemia, cifra menor al 35% calculado en un inicio, pero con posibilidades de aumentar en los siguientes dos meses.
Sin flujo de visitantes como en otros años, los restaurantes se quedaron con los consumidores locales, haciendo un gran esfuerzo por mantener la plantilla laboral, cumplir con sus proveedores y compromisos con el gobierno, redujeron la capacidad de atención, invirtieron en protocolos sanitarios y buscaron nuevas maneras de llegar a los comensales.
Con todo ello, a decir de Nolasco Cruz, la mayoría de los restaurantes ha optado por no trasladar a las cartas el aumento de costos operativos, pese a que el cálculo de precio de un platillo se hace tomando en cuenta los insumos, gastos fijos promedios, y ahora, menos comensales, protocolos sanitarios y trámites.
En general, dijo, hay un gran compromiso de los restauranteros de operar acorde con las reglas marcadas por las autoridades económicas y sanitarias, así como seguir haciendo un esfuerzo por mantener las plazas de trabajo, participando en los operativos de verificación conjuntos.
Con miras al cierre del año, los restauranteros esperan un nuevo repunte en diciembre, aunque mucho dependerá del color de semáforo epidemiológico que dicte la autoridad, consideró el representante del sector restaurantero en el puerto, donde de manera directa hay alrededor de 10 mil empleados, además de lo que genera en el sector primario, servicios y proveeduría.
VENTAS MÁS BAJAS QUE EN EL PRIMER TRIMESTRE
Tradicionalmente los primeros tres meses del año son bajos en ventas para los restauranteros, la recuperación comienza con la semana santa, pero este año la pandemia llegó a finales de marzo; a lo largo de los seis meses de contingencia sanitaria las ventas han sido más bajas que el primer trimestre del año, agravando la situación económica.
Los más afectados fueron restauranteros y hoteleros, con una caída en ventas hasta del 70%; la mitad de los negocios de este giro cerró totalmente y el resto se mantuvo con servicio para llevar, representado apenas ventas de entre 10 y 15% comparadas con las habituales, afirmó Iván Nolasco Cruz, de la Canirac.
Fue hasta junio que pudieron consensuar con las autoridades de los tres órdenes de gobierno para establecer el protocolo Mesa Segura y reforzarlo con medidas sanitarias preventivas, lo que les permitió abrir al 30% de su capacidad, con restricciones de horarios y de venta de bebidas alcohólicas.
Ante ese panorama, reclamó la falta de apoyos por parte del gobierno, ya que desde su perspectiva, “no alcanza para seguir manteniendo la maquinaria viva”.
Una de las propuestas que en este momento enarbola la Canirac a nivel nacional, es la deducibilidad al 100% en el consumo en restaurantes.
Según datos de la Cámara, más del 75% de la materia prima consumida por el gremio no causa IVA, pero al transformarlo en un platillo y brindar el servicio, se convierten en generadores del impuesto y, por lo tanto, contribuyen al 100%, con muy poca recuperación de impuestos, distinto a similares giros, cuya producción y transformación de la materia está contemplada a tasa 0.
Al consumirse en un restaurante por cuestión laboral, si una empresa y/o contribuyente desea deducir en su localidad, a efectos del fisco, del 16% solo es considerado el 1.36%, a menos que rebase una faja de 50 kilómetros y compruebe bajo un argumento de ámbito laboral y se acompañe de otros gastos considerados como viáticos. Esto contrasta con lo que ocurre en Estados Unidos y Canadá, naciones que permiten la deducibilidad en los restaurantes en un 100%.
De concretarse la propuesta, la Canirac estima que se fortalecería el mercado interno, disminuirían los niveles de inseguridad al existir más personas empleadas en la formalidad, incrementarían los empleos y su incorporación a prestaciones sociales, se transparentarían los ingresos al crecer la facturación de la operación al pagar con tarjetas u otra modalidad electrónica fiscal, además de facilitar la fiscalización y crecimiento de la recaudación.
AUMENTO DE VISITANTES NO SE REFLEJA EN VENTAS: CANACO
El presidente local de la Cámara Nacional de Comercio, Rafael Chávez, declaró que el aumento de visitantes registrado en fines de semana recientes no reflejó un incremento en las ventas del sector comercial.
Ensenada es una ciudad que vive del turismo, es uno de los puntos de desarrollo de la localidad, pero la actividad está totalmente muerta. Solo en la calle Primera, el 80% de los negocios está cerrado porque no tiene caso abrir al no haber turismo, lamentó.
La industria restaurantera en números
* Sustenta a 2 millones 170 mil 171 familias.
* Es la principal fuente de autoempleo y la primera opción de trabajo.
* 58% de la ocupación laboral restaurantera está conformada por mujeres y el 55% es el único sostén de su hogar.
* 96.4% de las 612 mil 259 mil unidades económicas de preparación de alimentos que existen son microempresas, es decir, cuentan con menos de 10 trabajadores y en su mayoría son negocios familiares y fuente de autoempleo.
* 54% del personal que labora en la industria tiene nivel escolar básico.
* Es pilar fundamental del sector turístico.
La industria restaurantera es parte de una larga cadena de valor, por lo que genera 3.5 millones de empleos indirectos, al impactar en el 83% de las 303 ramas de la economía que necesita para su funcionamiento. Sin embargo, dentro de sus virtudes recae también su vulnerabilidad: en México, 7 de cada 10 establecimientos de alimentos son informales, siendo su contribución casi 8 veces menor que un establecimiento formal, y ante la pérdida de miles de empleos de otros rubros a causa de la contingencia sanitaria, se estima que pudiera llegar hasta 8.5, al ser el sector de alimentos un salvavidas para que cientos de familias sobrevivan y se conviertan en emprendedores que radican en la informalidad, sin conllevar una regulación (ante la sobre regulación que existe) ni medidas sanitarias que sustenten su inocuidad, convirtiéndose en un problema de salud, que por hoy es primordial atender.
El golpe de la pandemia, la pérdida en ventas en más del 75% y los nulos apoyos directos al empleo del sector, han ocasionado el cierre definitivo de más de 90 mil restaurantes formales en el país, lo cual representa más de 300 mil empleos y podrían llegar a más de 500 mil.
El turismo que llega vía carretera de Mexicali o Tijuana “no da ni para pagar la renta de los locales en dólares, ya veremos en abril de 2021 que regresen los cruceros si es que queda algo”, recalcó.
Desde el inicio de la pandemia, a finales de marzo, 84 locales comerciales de la calle Primera han cerrado sus puertas, varios están siendo ocupados por farmacias.
Al hacer un balance de la situación, Chávez afirmó que las cosas no están mal, sino peor, y recriminó la inacción de los gobiernos y la falta de apoyos en el paquete económico 2021.
IVA AL 8% CONCLUYE EN DICIEMBRE
Acorde con Chávez Montaño, el sector comercial está luchando contra varios fantasmas, uno de estos, que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) al 8% concluye en diciembre del presente año. El programa implementado por el Gobierno de México no ha podido ser evaluado “porque llevamos seis meses de pandemia”, agregó.
El lunes 21 de septiembre, la senadora panista Gina Cruz Blackledge expuso ante el Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada (CCEE) que junto con un grupo de legisladoras del Partido Acción Nacional presentaron una iniciativa de Ley para disminuir el IVA al 8% en las fronteras norte y sur y Baja California Sur, para que el comercio en esas regiones tenga certidumbre respecto al pago de ese impuesto.
Aunque fue una propuesta de campaña del Presidente Andrés Manuel López Obrador bajar el IVA en la frontera, el programa que existe concluye el 31 de diciembre. Sin embargo, la medida ha resultado de muy poco beneficio, ya que además de no ser permanente, pocas empresas pueden cumplir con los requisitos, por lo que se busca que el gravamen quede establecido como estaba antes de la reforma de 2014.