En el sexto aniversario de la trágica desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, colectivos que reúnen a familiares y amigos de víctimas de secuestros y privaciones de la libertad en Tijuana, se concentraron este 26 de septiembre en el monumento al Libro de texto, para hacer una marcha y visibilizar su problema.
En señal de protesta ante la impunidad que persiste en esta ciudad fronteriza decidieron también bloquear el boulevard Salinas “No es la primera, no es la última, yo diría que es una continuidad, porque cada 26 de septiembre protestamos por la desaparición de los normalistas, pero ahora lo estamos haciendo porque no sabemos si el próximo puede ser uno de nosotros”, comentó Enrique Ochoa, de la agrupación Resistencia en búsqueda de personas desaparecidas en Baja California.
Por más de dos horas, los protestantes tomaron el carril que va de la delegación la Mesa a la zona Centro de Tijuana del el Boulevard Salinas. Prácticamente marcharon más de cuatro kilómetros bloqueando los cuatro carriles del sentido norte de la vialidad. “Se llama resistencia y no los vamos a dejar pasar”, fue lo que algunos gritaron ante el sonido desesperado de las bocinas de los automovilistas y transportistas que fueron bloqueados y sorprendidos por la manifestación.
En el contingente había algunos niños. Un par llamó la atención por el ruido que hacían al arrastrar un pico y una pala con la que sus familiares han participado en el rescate de cadáveres de personas desaparecidas en las afueras de la ciudad de Tijuana. Ambos niños acompañaban a Angélica Ramírez, integrante de uno de los colectivos de búsqueda que portada un alta-voz para exigir justicia.
“Estoy cargando al hijo de una compañera, como muchos deberían solidarizarse porque la injusticia nos puede afectar a cualquiera”, comentó Angélica Ramírez, quien cargaba un cartel con el rostro de Hiram Ibarra Avilés, uno de los desaparecidos en Baja California.
La decisión del bloqueo de toda la vialidad tomó por sorpresa a la organización Resistencia Civil Pacífica, RCP, quienes decidieron hacerse a un lado luego de marchar menos de 200 metros. “Les dije que dejáramos un carril, pero no quisieron. Otra persona gritó que no y por más que insistí, no me hicieron caso. Hasta la policía trató de apoyarme, pero el contingente prefirió bloquear y yo me tuve que apartar. Nosotros no estamos de acuerdo con el bloqueo al libre tránsito y preferimos sumarnos a la protesta, pero tomar distancia. No es separarnos, es hacerlo a nuestra manera”, comentó la activista social de RCP Rosa María Salcido.