El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó este sábado a la jueza Amy Coney Barret como su nominada a ocupar la vacante en la Corte Suprema de aquel país.
La vacante que se disputará Coney es la que dejó la magistrada Ruth Bader Ginsburg, quien falleció a los 87 años el fin de semana pasado.
La presentación de la nominación se realizó en la misma Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos describió a Coney como una de las mentes más brillantes de su país, en materia de derecho.
Para ocupar este puesto, la candidata debe reunir la mayor cantidad de votos en el Senado, por su parte el Partido Republicano anunció que ya tiene los 51 votos necesarios para lograr colocar a Coney como magistrada de la Suprema Corte.
Coney Barret al aceptar la nominación, afirmó que su labor en la Corte estará basada en la ley y no en “decisiones personales”, dejando de lado cualquier ideología política que se tenga.
Sobre Coney se sabe que tiene 48 años, se identifica como devota católica, de ideología pro vida. También ha estado a favor de las iniciativas migratorias presentadas por el presidente Trump.
El candidato demócrata, Joe Biden, mandó un comunicado esta tarde y se posicionó en contra de que el Senado vote para que se ocupe esta vacante antes de las elecciones presidenciales, de noviembre próximo.
En el comunicado destacó que debe ser el próximo presidente y el nuevo Congreso quienes tomen esa decisión.
De llegar a la Suprema Corte, Coney se convertiría en la tercera candidata propuesta por Trump. Primero fue Neil Gorsuch en 2017, y luego Brett Kavanaugh en 2018.