Después de tres meses de búsqueda, la noche del lunes 17 de agosto, fueron localizados los cuerpos de Kevin Alejandro Rodríguez Leyva y Rubén Chávez Pérez, los jóvenes aficionados al fútbol americano que fueron “privados de la libertad con violencia” el 17 de mayo del 2020, en una casa ubicada en la colonia Obrera de Tijuana.
Cristina Leyva y Bertha Karina Pérez, madres de las víctimas, informaron a ZETA que la Fiscalía General del Estado (FGE) les confirmó el hallazgo de los cadáveres, y les informó que fue en un predio de la misma colonia.
Señalaron que al observar los cuerpos reconocieron su ropa, tatuajes, incluso un collar que les había regalado una de las madres, como recuerdo de un viaje.
“Ya los encontramos, no como queríamos, pero ya los vamos a tener con nosotros. Ahora queremos que se haga justicia”, dijo Cristina Chávez.
Ambas mujeres aseguraron, que fue gracias a la información que ellas recibieron y aportaron a las autoridades, que la investigación avanzó. Incluso mencionaron que ya existe un sospechoso del crimen cometido en contra de sus hijos.
“Me parece que ya tienen en la mira a una persona, no vamos a descansar hasta que se haga justicia”, dijo Bertha Karina Pérez.
También recordaron, que las autoridades no actuaron de manera inmediata, ni a tiempo, porque la familia llevó testigos de que había sido una sustracción violenta, pero tardaron en actuar porque según los representantes de la autoridad “…seguramente los jóvenes se fueron de fiesta”.