Hoy ha sido un día con demasiada lluvia, truenos y relámpagos;
te mueves de un lado a otro; tus pétalos vuelan; sólo cuentas con dos.
Florecita, flor brillante y reluciente, estos días pasarán y la lluvia se irá;
no te disculpes por tener dos pétalos, eres bella como una estrella.
Cuando salga el sol, resaltará tu esplendor; no se te quitó, sólo descanso;
descansó para volver y ser mejor que aquella lluvia te quitó.
Volverás y renacerás para lucir mejor; no sólo por tu exterior, sino por tu interior;
volverás para sobresalir en la naturaleza, aquella naturaleza que te vio crecer.
Te mando la lluvia para crecer, no desaparecer.
La lluvia te movió, más no te desprendió.
Te quedaste fuerte y la raíz te sostuvo,
ahora un jardín lleno con raíces como tú, esperan por ti.
Flor brillante y reluciente, vendrán más lluvias;
nunca es tarde para renacer ni para caer.
A las que están por nacer, enséñales a florecer.
Clarice Olmos Estrada.
Tijuana, B.C.
(Preparatoria Educare, grupo 401)