— Estoy en shock, amiga.
“¿Por qué?”.
— Por las ocurrencias de la gente.
“¿Pues qué pasó?”.
— Resulta que mi hermana, la pediatra, atedió a una niña que se llama Iloveny.
“Ah, qué nombre tan raro”.
— Es lo mismo que dijo mi hermana, entonces le preguntó a la mamá por qué le había puesto ese nombre a su hija, ¿y qué crees que te contestó?
“Ni idea, ¡cuenta, cuenta…!”.
— Pues que lo vio en una t-shirt y le gustó. O sea, no manches, ¡la pobre chiquilla se llama “I love NY”.
Autor: Anónimo del Registro Civil.
Aviso
Hoy reabren los gimnasios y solo les permitirán tener una parte de su capacidad. No soy un tipo fit ni un galanazo de magazine, me gustaría ir, pero prefiero darle mi lugar a alguien que sí tenga disciplina y años en esto, ya que (llamémosle de alguna manera) es su hábitat natural y son fisicoculturistas de corazón. Peeeero… cuando abran los bares no quiero ver a ningún fortachón por ahí que solo vaya a tomarse dos Tecate Light en cuatro horas ocupando mi lugar, también respeten ese lugar a los borrachos y botaneros que sí somos dedicados de corazón, si no, va a haber fregadazos. ¡Avisados!
Autor: Vago confinado.
El cocinero
— Papá, ¿en esta casa hay fantasmas?
“No, hijo, ¿quién te ha dicho eso?”.
— El cocinero.
“Recoge todas tus cosas y prepara tu maleta, ¡nos vamos de esta casa!”.
— ¿Por qué, papá?
“¡Porque no tenemos cocinero!”.
Autor: Futuro estudiante de cine.
Padre político
Un burro muere frente a una iglesia. Un par de días después el cadáver sigue allí y el Padre decide llamar al jefe de Policía, quien es su gran adversario:
— Señor policía, tengo un burro muerto hace dos días frente a la iglesia.
“Pero Padre, ¿no es el Señor quien tiene la obligación de cuidar de los muertos?”.
— Así es, ¡pero también es mi obligación avisar a los parientes!
Autor: Anónimo de ya saben qué partido.
Niño fantasioso
“Cuaderno de bitácora. Fecha estelar 2335. Alienígena parece vulnerable al fuego”.
— Paco, ¡apaga ya la maldita calefacción que le va a dar algo a tu madre!
“Habló el único cavernícola sobreviviente”.
Autor: Anónimo de la NASA.
Especialista
— ¿Hay algún doctor aquí?
“Sí, yo”.
— ¿Cuál es su especialidad?
“Soy doctor en matemáticas”.
— ¡Mi amigo se muere!
“¡Uno menos!”.
Autor: Anónimo de la Secretaría de Salud federal.
La ida al pan
— Paco, ¿por qué tardaste tanto en ir por el pan?
“¿Yo?”.
— Paco, a ver, te conozco bien. ¿No te habrás atorado con tus amigotes?
“No, mi amor, no inventes”.
— Está bien. ¿Y la barra?
“¡Llenita de gente!”.
Autor: El buen Pacorro.
Entrevista de trabajo
— En su currículum usted puso que no le importa trabajar los fines de semana.
“En mi currículum puse muchas tonterías”.
Autor: Eterno desempleado.
La mejor respuesta
— ¿Eres bilingüe y romántico?
“Of cursi”.
Autor: Mejor así lo dejamos.
Modestia
— Papá, ¿qué es modestia?
“No alardear de los méritos propios”.
— Qué listo eres, papá.
“¡Soy el maldito amo del Universo!”.
Autor: Candidato sin partido.
911
— 911, ¿cuál es su emergencia?
“Mi mujer dice que no le pasa nada”.
— ¡Le mando dos patrullas!
Autor: Hombre a salvo.
En el psiquiatra
— Hemos terminado.
“Gracias, doctor”.
— La semana que entra trataremos con el inconsciente.
“Imposible, ¡mi marido no quiere venir!”.
Autora: Recuperada.