Desde las siete de la mañana del sábado decenas de personas comenzaron a llegar a la playa municipal de Ensenada, con fines recreativos y deportivos, luego de tres semanas de que el ayuntamiento de Ensenada cerrara los espacios públicos debido a la contingencia por coronavirus.
Turismos nacional y regional abarrotaron este fin de semana las zonas turísticas públicas como playas, Ventana al Mar, Plaza Cívica, y negocios como vinícolas en el Valle de Guadalupe.
Las filas de registraron en la entrada a Ensenada y a pesar de los filtros sanitarios para controlar el acceso de visitantes, a que solo ingresen a la ciudad quienes tienen una actividad esencial, y evitar la propagación del virus.
Las cifras de contagios se dispararon en el municipio desde hace tres semanas, casos confirmados llegaron a mil 994 en la ciudad y 264 en San Quintin; fallecimientos 143 en la ciudad y 10 en San Quintin. En este momento el puerto es el destino con mayor incremento en la gráfica de contagios en Baja California.
Los músicos abandonaron los cruceros y se desplazaron hasta la zona turística donde interpretaron canciones para los visitantes.
En recorrido se pudo constatar que personas no siguieron los protocolos e incluso hubcubrebocaso quienes no usaron cubre boca.
También Semanario Zeta cuestionó a policías municipales sobre el trabajo operativo en zonas de alta concentración de personas, ya que de manera simulada removían cada cierto periodo de tiempo a los visitantes que consumían bebidas alcohólicas y no guardaban la distancia, pero éstos regresaban al lugar para continuar con el festejo vacacional.
Las calandrias que a inicios de la administración del alcalde Armando Ayala Robles fueron prohibidas volvieron a circular por el bulevar Costero.