Residentes de Cañadas del Florido segunda sección, protestaron en las instalaciones de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), exigiendo al gobernador Jaime Bonilla Valdez, les responda por qué no les ha resuelto el problema de desabasto de agua que enfrentan desde hace dos meses.
Con pancartas y a grito abierto, los usuarios demandaron a Bonilla bajar del balcón de las instalaciones de CESPT desde donde despacha los asuntos de gobierno, y en el que se encontraba en ese momento platicando con varias personas, entre ellas el diputado Fausto Gallardo.
Afuera, las vecinas encabezadas por la señora María Roselvi, cuestionaban al mandatario de Baja California por qué se les había duplicado el cobro del servicio de agua potable, cuando el suministro se encuentra suspendido desde principios de abril.
“Nos llegan recibos de hasta 600 pesos, sin que tengamos agua y en plena contingencia de coronavirus”, manifestaron.
Minutos más tarde, personal de la paraestatal atendió a los vecinos.