Derivado de la emergencia sanitaria de coronavirus, 12 millones de personas salieron del mercado laboral en México, luego de que la Población Económicamente Activa (PEA) pasara de 57.4 millones de personas en marzo pasado a 45.4 millones en abril de 2020.
“El cambio en el mercado laboral no se está presentando en la desocupación, no pasaron por la transición de ocupados-desocupados y después población que ya no buscaba empleo, sino que dan un salto de manera directa de la ocupación a ser Población No Económicamente Activa”, explicó el director general de Estadística Sociodemográfica, del INEGI, Edgar Vielma.
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Con la incorporación de 12 millones de personas a la Población No Económicamente Activa (PNEA) en el país hay 50.2 millones en esa condición, de los cuales 20 millones se encuentran disponibles para regresar al mercado de trabajo; cantidad muy superior a la que había en marzo pasado, de 5.9 millones.
“De las 20 millones de personas disponibles que dejaron de trabajar en abril de 2020, 11.3 millones dejaron de trabajar debido a la suspensión temporal de su trabajo sin recibir pago”, destacó el funcionario.
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Además del número de personas que pasaron directamente de estar ocupados a la PNEA, 2.1 millones de personas se encuentran desocupadas (aquellas que se encuentran sin trabajar y que estuvieron buscando empleo), con lo que la tasa de desocupación pasó de 2.9% de la PEA en marzo a 4.7% en abril pasado.
Al presentar los resultados de la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (ETOE) con el presidente de la Junta de Gobierno del INEGI, Julio Santaella, Vielma detalló que en relación con la desocupación el mayor impacto se dio en la población, 25 a 44 años, al pasar de 780 mil a un millón 044 mil personas bajo este estatus, es decir, un incremento de 44 por ciento.
El segundo grupo etario más afectado fue el de 45 a 64 años, que pasó de 300 mil a 458 personas desocupadas.
Los datos de la ETOE también indican un incremento de 5.9 millones de personas en condición de subocupación (personas que están ocupadas, pero tienen la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual les demanda), para sumar 11 millones.
Con ello, la tasa de subocupación pasó de 9.1 por ciento en marzo pasado a 25.4 por ciento en abril pasado. En su comparación anual, la tasa de subocupación tuvo un incremento de 17.6%, al pasar de 7.8% en abril de 2019 a 25.4 en el mismo mes de 2020.
Expuso que “mientras la población ocupada formal pasó de 24.7 millones en marzo de 2020 a 22.6 millones, en el caso de los informales hubo una disminución de 31 millones a 20.7 millones de personas, es decir 10.4 millones de personas informales salieron del mercado laboral”.
En tanto, la tasa de informalidad en marzo pasado era de 55.7 por ciento para pasar a 47.7 por ciento en abril, lo que representa un cambio de 8 puntos porcentuales.
Por otro lado, dijo, se observó una disminución en las horas trabajadas durante abril, la mayor reducción se dio en personas que trabajan de 35 a 48 horas a la semana, ya que el porcentaje de la población que tenía esta jornada laboral pasó de 46.3 por ciento a 30.5 por ciento.
En cuanto a ingresos, el funcionario destacó que la población que ganaba hasta un salario mínimo prácticamente se duplicó al pasar de 22 por ciento en marzo pasado a 41.3 por ciento en abril.
Mientras que se registró una disminución del número de personas que perciben más de un salario mínimo, siendo el segmento de personas que perciben hasta tres salarios el más afectado, ya que pasó de 16 a 8.3 por ciento.
Los que perciben hasta dos salarios mínimos pasaron de 36.2 a 31.4 por ciento, y quienes reciben más de tres salarios pasaron de 10.3 a 4.8 por ciento, agregó.
En conferencia de prensa Santaella indicó que la información es a nivel nacional y por el momento que no se cuenta con los datos desagregados por estado. No obstante, esta información podría darse a conocer en las próximas semanas.
