Luego de sostener una reunión con el director general del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP), encargado de administrar el aeropuerto de Tijuana, el alcalde Arturo González Cruz comentó que ya obtuvieron un compromiso por parte de los empresarios que buscaran la manera de contribuir al gasto de la ciudad, debido a que siguen negándose a pagar el impuesto predial como tal.
La semana pasada el gobierno del estado reveló que el aeropuerto debía más de 20 millones en consumo de agua, también se aplicó un operativo conjunto con la autoridad municipal para revisar los permisos de los comercios que se encuentran al interior. Ese día se anunció que también existía una deuda por no cubrir el impuesto predial.
“Ellos se dicen exentos del pago del predial, porque es una concesión federal. Eso está en litigio, sin embargo, ellos se prestaron al diálogo para establecer una contribución”, declaró González Cruz.
Detalló que la reunió se llevó a cabo el pasado 19 de junio, apenas unos días después de que surgiera el conflicto que provocó la suspensión de las operaciones de aeropuerto por cerca de media hora. La deuda por el impuesto predial se estima en 700 millones de pesos, que surgió desde 1998 cuando el GAP tomó la administración del aeropuerto que ya existía desde la década de los años 60.
El alcalde reiteró que era necesario que el GAP contribuyera de alguna manera al gasto de la ciudad, pues a pesar de que se trata de una concesión federal, es el municipio es el que se hace cargo de mantener el buen estado las vialidades y otra infraestructura pública que se encuentra en las inmediaciones del sitio.
Al respecto de los establecimientos que fueron clausurados por no contar con los permisos en regla, añadió nueve ya se acercaron para arreglar su documentación y el resto se encuentran todavía en revisión. También comentó que el mismo director del GAP aceptó que la autoridad municipal revise la situación de los más de 100 negocios que operan dentro del aeropuerto.