Con más de 2 mil 300 casos positivos de Covid 19 y en semáforo rojo, Tijuana entró a la segunda semana de la “nueva normalidad” en la ciudad de Tijuana, con largas filas de personas y poco distanciamiento social, un mayor tráfico en las principales vialidades y más personas transitando por las calles, incluso personas de la tercera edad que salieron a realizar sus actividades. Los puntos con mayor concentración de personas fueron principalmente el transporte público, los bancos, los hospitales y algunas calles de la ciudad.
El recorrido hecho por este semanario inició en el Parque Industrial El Florido. Poco antes de las 6 de la mañana llegaron los camiones de transporte de personal a varias fábricas que ahí se ubican. En la mayoría de autobuses se han implementado medidas de protección al personal, trasladando a la mitad de la capacidad de usuarios, con una persona por banca y en algunos casos con protecciones de plástico entre un asiento y otro.
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Los empleados ingresan a sus trabajos con cubrebocas, en algunas empresas les dan caretas de plástico y les toman la temperatura antes de entrar a las instalaciones. En este Parque Industrial como en el de Los Pinos e Insurgentes, también se observó a hombres y mujeres solicitando empleo. Algunos acudieron a las carpas instaladas en la vía pública, en las que se vio a varias personas en busca de una oportunidad laboral, pero olvidando los tres metros de distancia en espacios públicos.
Otros decidieron acudir directamente a la empresa para dejar su solicitud de trabajo, por lo que algunas maquiladoras tenían largas filas de personas esperando entrar a dejar sus documentos o ser entrevistados.
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Fotos: Ramón Blanco
Las filas se repitieron en las instituciones bancarias. A lo largo del bulevar Insurgentes y del bulevar Díaz Ordaz se repetía la imagen, pero fue en Macroplaza donde la situación se acentuó. Ahí algunos ciudadanos informaron que llegan desde las 5 de la mañana, tres horas antes de que abran la sucursal para alcanzar una de las 250 fichas que se entregan en Banamex. Pero la misma espera se vio afuera de Banorte, Bancomer y Santander en distintas sucursales.
Quienes viven en Tijuana no solo padecen largas filas con poca distancia a la hora de buscar trabajo o hacer algún trámite bancario, también lo viven cuando se trata de su salud.
Lo anterior quedó confirmado con las filas que hay para entrar a consulta en la Clínica 27 del IMSS ubicada sobre el bulevar Díaz Ordaz, ahí las personas esperan por horas antes de ingresar a ser atendidos, sin que haya distancia suficiente entre los derechohabientes. Así también ocurre en las oficinas de la clínica 7 del IMSS, donde acuden empleados y patrones a realizar algún trámite laboral.
La misma situación se vive a las afueras de laboratorios particulares, al menos ocurrió en dos de la ciudad, ambos en la delegación de la Mesa. En uno de ellos no hubo distancia alguna entre quienes esperaban a ser atendidos; sentados unos al lado de otros, mientras familiares estaban de pie a su alrededor. En el segundo sí se vio una fila con una ligera distancia entre los pacientes que esperaban iban a practicarse exámenes clínicos.
Otro de los puntos de mayor concentración fue el transporte público; tanto en la 5 y 10 como en la Zona Centro, principales lugares donde la ciudadanía toma el transporte que los lleva a sus casas o trabajos, se atestiguó que no se siguen las medidas sanitarias para evitar contagios por COVID. Unidades de transporte público, entre ellas camiones, calafias y taxis, llevaban más pasajeros de los permitidos por la contingencia, sin que se les exigiera el uso de cubrebocas durante el trayecto.
