Los trabajadores del Hospital General de Mexicali atienden el mayor número de paciente de coronavirus, porque la capital está convertida en el epicentro del contagio en Baja California. Y este 28 de mayo lo están haciendo en medio de la incomodidad y los riesgos generados por el calor, porque se descompuso el sistema de aire acondicionado de los primeros dos pisos del hospital, y las temperaturas alcanzarán hasta los 39 grados centígrados.
El área afectada en el hospital alberga a 100 pacientes de COVID-19, de los cuales 37 se encuentran intubados o con respirador artificial, además de los trabajadores de la salud que laboran en dicha área.
Ante esta situación, todo el personal informó que estaban trabajando bajo protesta, debido a las condiciones que podrían considerarse inhumanas.
Horas después la Secretaría de Salud emitió un comunicado al respecto señalando que el problema en el Hospital General se había solucionado.
Aquí el comunicado:
“El área de urgencias del Hospital General de Mexicali, que se había quedado sin aire acondicionado a causa de una falla en uno de los dos grandes equipos de refrigeración, ya está en proceso de enfriamiento y en vías de llegar a los estándares de normalidad.
El director del nosocomio, Diego Fernando Ovalle Marroquín, señaló que el hospital dispone de dos unidades principales que suman 50 toneladas de capacidad para enfriar las distintas áreas de trabajo. Una de esas unidades fue la que tuvo la falla, la cual comprometió la capacidad de enfriamiento de la segunda.
Explicó que el equipo de mantenimiento de la unidad hospitalaria inició trabajos de reparación de forma inmediata, luego de haber recibido el aviso de la falla por parte de personal del turno matutino.
Mencionó que como medida adicional se rehidrató al personal que tiene que portar trajes de protección y que a falta de una temperatura adecuada sufrieron estrés y pérdida de líquido por sudoración. Todos se encuentran en buen estado de salud y de vuelta a su trabajo.
En cuanto a los trabajos de reparación, lo primero fue respaldar técnicamente el equipo que quedó en funciones para evitar que colapsara, lo que se logró para poder recuperar la temperatura en la zona de urgencias, lo que ya está en marcha.
El equipo dañado está siendo reparado y debe quedar listo lo antes posible para que las condiciones de trabajo queden aseguradas cien por ciento.
Ovalle Marroquín concluyó que los equipos son sometidos a revisiones y mantenimiento constante, pero no faltan imprevistos durante el verano en que se someten a un trabajo continuo”.