“En los cuatro reclusorios cuentan con jabón y agua potable para lavado de manos y todo lo que se requiera, las áreas de salud que tenemos ya cuentan con el equipo necesario, en caso de aislar a personas contagiadas”, explicó Germán Wong, secretario de Seguridad Pública estatal, respecto a las medidas para evitar el contagio del novel coronavirus en la población carcelaria de BCS
Más de 300 casos de coronavirus, entre pacientes activos, defunciones y recuperados, reflejan la crítica situación que vive Baja California Sur, siendo uno de los estados con el mayor índice de contagio por cada mil 200 mil habitantes.
No obstante, hasta el momento no hay contagios que pongan en riesgo la convivencia en los Centros de Reinserción Social (Cereso), al mantener el cerco sanitario con restricciones del exterior, es decir, cero visitas en lo que pasa la pandemia en los cuatro penales del Estado.
“Si bien las actividades escolares y de visita familiar se encuentran suspendidas temporalmente con motivo de esta pandemia, es importante que los privados de su libertad mantengan su rutina deportiva, ya que además de cuidar su estado físico y su salud, la activación física es primordial para la disciplina, fomentar buenos hábitos y mantener su mente ocupada, factor importante para el confinamiento y el aislamiento social”, expuso el subsecretario de Seguridad Pública, Marco Antonio Montoya Gómez.
El encierro y las medidas de prevención del personal administrativo y operativo ha sido benéfico, pero no se descarta que pueda registrarse un incidente de alto contagio en el penal de La Paz o el de Los Cabos, al ser los de mayor población.
La Capital alberga la mayor parte de internos, incluidas las mujeres que purgan condena.
“Los cuatro penales del Estado se encuentran tranquilos y sin novedad, tenemos una población aproximada de mil 250 internos, alrededor de 40 son femeninos, se encuentran ya en el penal de La Paz, donde hay un área específica para ellas, se ha modificado y adaptado para darles el mejor confort posible. Cuentan con áreas especiales para trabajar con ellas”, detalló Germán Wong López, secretario de Seguridad Pública estatal.
La emergencia sanitaria obligó a las instancias a limitar el flujo del exterior a penales, ya que, de darse algún contagio, estarían vinculados directamente los guardias penitenciarios.
Una parte determinante es la limpieza al ingresar, por ello también se toman medidas sanitarias en el personal.
“Hemos establecido medidas con las aduanas, que ya tenemos instaladas en estos dos penales de San José del Cabo y de La Paz, de tal manera que toda persona que ingrese al penal, por motivos de trabajo, como puede ser el área administrativa del penal o los policías penitenciarios, tengan un chequeo médico antes de su ingreso, efectuamos ciertos procedimientos que se han emitido para establecer un cerco sanitario. Hasta este momento no hemos detectado ningún caso de coronavirus en ninguno de los cuatro penales”, reiteró el funcionario.
Para revisar al personal, se contrató a médicos y enfermeros capacitados y equipados para atender cualquier contingencia que se pudiese presentar. Cuentan con equipo de protección, más que por su salud, por la de los internos.
En los cuatro penales de BCS hay una población de mil 250 internos, algunos ya están a punto de llegar a su límite de población, pero la SSPE confirmó que hay capacidad
“Tanto los custodios como el personal administrativo utilizan guantes, cubre bocas; la instrucción del Sector Salud es que solo las personas que tengan ciertos síntomas utilicen cubre bocas, como son áreas ahorita blancas, los penales. Al interior nada más hacemos que los custodios tengan cubre bocas para evitar un posible contagio, ya que son los que tienen contacto con el exterior, los internos no tienen cubre bocas porque no se ha detectado ningún caso, ellos se encuentran en total aislamiento”, aclaró el secretario de Seguridad Pública Estatal.
Respecto a insumos básicos como agua y jabón, primordiales en estos meses de pandemia, hay suficiencia para atender a la población penitenciaria”, los cuatro penales cuentan con jabón y con agua potable para lavado de manos y todo lo que se requiera, las áreas de salud que tenemos ya cuentan con el equipo necesario, en caso de aislar a personas contagiadas”.
COMUNICACIÓN REDUCIDA AL EXTERIOR
ZETA ha recibido algunas quejas de familiares de los internos, quienes no han podido establecer comunicación, al no haber acceso al penal.
Germán Wong López afirmó que de momento el acceso se mantendrá restringido, pues el ingreso de más personas de las necesarias podría exponer la salud del centro penitenciario.
“Puedo destacar que tenemos medidas de sanidad, apegándose a los reportes que ha dado la Comisión Estatal de Salud. Hemos cancelado de forma temporal las visitas a los cuatro penales, estamos sin duda estableciendo enlaces con los familiares de los internos para que puedan estar teniendo contacto, en este caso cuando requieran llevarles algo, material básico que los internos requieran”, indicó.
Si bien los familiares dicen que hay riesgo de un contagio epidémico, debido a que más internos de la cuenta habitan por celda, pero este supuesto fue desmentido por la autoridad, manifestando que la población está por debajo de su máximo.
El más holgado es el de San José del Cabo, seguido de La Paz, y casi a su límite permisible están el de Ciudad Constitución, Comondú y Santa Rosalía.
“No existe ninguna sobrepoblación, hasta este momento tanto el penal de La Paz, como en Los Cabos, se encuentra en un porcentaje sustentable población. En el de La Paz tenemos una ocupación del 88.97%; San José tiene ocupación de 53.69%; y el penal de Santa Rosalía y de Ciudad Constitución están en su cupo de casi 99%. ¿Por qué esa distribución? Porque los penales del norte son de menor peligrosidad”, acotó el funcionario estatal.
Para evitar que la falta de comunicación lleve a un problema, se buscan alternativas como videollamadas.
“Estamos buscando una mejor comunicación de los internos con sus familiares. En eso estamos, buscando innovar, con herramientas que en otros penales del país están desarrollando, para tener comunicación con los propios familiares y los internos, para que no vayamos a tener un brote de inconformidad”, dijo.
El plante de intercomunicación ya está sobre la mesa, se habla de un promedio de cinco minutos en los que cada interno podrá sostener una conversación con sus familiares. La calendarización está por definirse, pero será accesible para todos.
Ya hubo comunicación virtual con los Juzgados, donde no se pudo aplazar una audiencia, y, según abogados, la comunicación fue deficiente, pero ya es un inicio.
“Es un plan piloto que estamos buscando, infraestructura tecnológica para que podamos tener un mecanismo de videoconferencias, los internos con sus familiares utilizando herramientas como WhatsApp, Telegram o algunas otras herramientas de videoconferencias que nos permiten que los internos pueden tener comunicación al exterior. Hay que entender que tenemos una población extensa, así que no se podrá dar tiempo indeterminado, se tendrá que dar un tiempo para que pueda comunicarse con sus familiares”, reiteró Wong.
“Estamos en implementación, se está buscando tecnología, estamos comprando el equipo que se requiere para que haya ese tipo de videoconferencias”.
Precisamente hace algunas semanas, los centros penitenciarios recibieron una donación importante de productos de limpieza y material de sanitización para proteger a los internos.
RIESGO DE CONTAGIO
Desde la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris) se instruyó, por ser uno de los grupos de riesgo, que los Cereso establezcan medidas de sanidad para mantener a los presos sin coronavirus.
Las labores de limpieza son esenciales dentro del CERESO, además dar actividades a los reos, mantiene entretenidos y genera disciplina
El primer paso inmediato fue la capacitación del personal de asistencia médica, para que ellos bajen al personal administrativo las estrategias y se siga con el de custodia. Se ha emprendido una campaña de concientización interna, pues sería de gravedad un contagio, pues el confinamiento y la convivencia de los internos, de inmediato propagaría el virus.
“Se solicitó la participación del área médica y de trabajo social, a efecto de emprender una amplia campaña de prevención al interior de la población de los centros con la plantilla de custodios y las autoridades que se encuentran laborando, para que promuevan las medidas de prevención de higiene y continuar con la suspensión de visitas a los Cereso, principalmente para hacer una contención y cortar cadena de transmisión de COVID-19”, explicó Blanca Pulido Medrano, titular de la Coepris.
Otras de las recomendaciones emitidas por la Comisión, son el cero contacto con el exterior, o por lo menos reducirlo, restringiendo la visita a internos, con lo que se pretende reducir el riesgo de contagio en 90%; usar guantes, cofias y cubre bocas si se manejan los alimentos, lo cual ya se aplicaba, pero sirvió para vigilar que la Secretaría de Seguridad Pública cuente con suministros de higiene.
“Dentro de los penales se está utilizando un sistema de videollamada del reo a la familia y eso está permitiendo continuar con ese acercamiento y contacto con la familia, tenemos una estrecha vigilancia sanitaria con estas áreas, derivado de un trabajo que se ha llevado a cabo por parte de Secretaría de Gobierno y Secretaría de Salud. Estructuramos un plan ya calendarizado de los Cereso, se ha dado asesoría médica para hacer sus trámites administrativos, así como la capacitación de la Norma 251 para los manejadores de alimentos, de panadería y de cocina. Son medidas de contención para disminuir riesgos en esta población”, celebró la comisionada.
De momento hay personal destinado específicamente a estar pendiente de cualquier llamado que se pueda generar desde los centros de reclusión, ya que en esos puntos particularmente se tiene que actuar de inmediato para no presentar problemas como ya ha ocurrido en otros centros de reclusión del país.
Un primer filtro importante seguirá siendo la aduana del Cereso, ya que ahí se detecta si hay sospechas de enfermos, después actúa el personal médico y de custodia, para que finalmente se active el protocolo y se pueda aislar aquel reo que presente síntomas.
“Estamos haciendo una vigilancia estrecha sobre el saneamiento básico, así como la infraestructura sanitaria con que cuentan los Cereso. Hay un trabajo que consideramos muy bueno que se ha llevado a cabo durante esta administración, ya que se transformó en su totalidad el acceso al Cereso de La Paz, estas actividades ayudan en este problema, en esta pandemia, y estamos estrechando la vigilancia sanitaria para hacer la detección inmediata de cualquier caso de enfermedad respiratoria o con sintomatología de coronavirus”, amplió Blanca Pulido.
Lo que no se ha explicado es, si en caso de algún contagio en Cereso, se tenga que evacuar al infectado y por consiguiente a los internos para llevar a cabo un proceso de sanitización a fondo.
Aunque extraoficialmente se informó que el protocolo contempla el traslado del reo a un sitio de aislamiento y de requerir hasta un hospital, de incrementar los casos de COVID-19, cabría la posibilidad de evacuar momentáneamente para una limpieza profunda y eliminar riesgos al interior.
“Hasta ahora no tenemos ni una sola llamada de algún Cereso, de que se cuente con algún sospechoso o algún interno con síntomas de coronavirus, tenemos estrecha comunicación con el área médica de estos centros”, finalizó la titular de la Coepris.
La Comisión mantiene coordinación con la Secretaría de Salud en internos bajo vigilancia médica por algunos padecimientos, comorbilidades, tratamiento o con especial seguimiento.
