Enrique Beltrán Flores, de 56 años de edad, y jefe del Distrito Mariano Matamoros de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), falleció por la mañana de este viernes 17 de abril en el Hospital General de Tijuana, luego de haber sido internado como sospechoso de COVID-19 el domingo 12 de abril.
A cinco días de haber ingresado al nosocomio, hasta el momento no se tienen los resultados de COVID-19 practicados a Beltrán Flores, por lo que su fallecimiento se estableció como “neumonía atípica”.
“Este fallecimiento muy probablemente se pudo haber evitado si los jefes y el director -Rigoberto Laborín- hubieran equipado al personal y cerrado las oficinas, tal y como se hizo en ciudades más grandes del país, como en la Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, donde las comisiones de agua están cerradas, tristemente por querer seguir cobrando el agua se está sacrificando la vida de los compañeros”, expusieron públicamente trabajadores de la Comisión.
Reportaron que un promedio de 15 trabajadores de la paraestatal son sospechosos de haberse contagiado de coronavirus “y tristemente los jefes están ocultando la información, los compañeros tenemos mucho temor por nuestras vidas y la de nuestras familias”.
Respecto a ese señalamiento, Rodrigo Bustamante, director de Comunicación Social de CESPT, reconoció que “no hay la protección al 100% por que en muchos casos los empleados no tienen contacto directo con el público en general, sobre todo la gente de los distritos”, quienes salen a revisar tubería o realizan labores en las plantas.
Anotó que los equipos de protección a los trabajadores en los distritos se entregan a los jefes de distrito, para que se distribuya conforme al riesgo de contagio que tienen, respecto a la actividad que realizan, lo cual queda registrado en una bitácora.
En el caso del distrito, explicó que el personal que revisa sistemas de drenaje y tuberías se les dota de un traje, botas, guantes y cubrebocas, aún cuando no tienen contacto con la gente, mientras que los que están en oficina, como era el caso del Ingeniero Beltrán Flores, se les entrega guantes y cubrebocas.
Sostuvo que el caso de Enrique Beltrán es el único caso de contagio registrado en CESPT, de una plantilla de trabajadores de 1 mil 700 empleados, de los cuales 700 están en resguardo en sus casas, “trabajando a distancia”, 200 de confianza y 500 sindicalizados, precisó.
De los 45 trabajadores que laboran en el distrito Mariano Matamoros, por haber tenido contacto con Beltrán Flores cinco se enviaron a resguardo a sus hogares desde el lunes 13 de abril y se está monitoreando su estado de salud.
Respecto a los trabajadores que tuvieron contacto con el Oficial Mayor del estado, Salomón Faz Apodaca, quien estuvo en las instalaciones de la Comisión y días después dio positivo a coronavirus, Rodrigo Bustamante dijo que también fueron enviados a resguardo.
Los trabajadores también manifestaron su preocupación por la presencia en CESPT de Mario Escobedo Carignan, secretario de Economía Sustentable y Turismo, quien se mantuvo como sospechoso a COVID-19 por haber tenido contacto con quien fuera presidente de CANACO Mexicali, José Manuel Hurtado Montaño, quien falleció por coronavirus. Sin embargo, el secretario de Saludo, Alonso Pérez Rico dijo que Escobedo Carignan salió negativo en el examen que le fue practicado.
Rigoberto Laborín, director de CESPT, también dio negativo en una prueba que le fue practicada.