La agencia Fitch Ratings recortó la calificación crediticia de Petróleos Mexicanos (Pemex), de “´BB+´ a ´BB´, con perspectiva negativa. Con ello, la paraestatal mantiene su grado de inversión como “especulativo”.
La revisión a la baja de este 3 de abril se debe a la demora e incertidumbre de un apoyo “excepcional” por parte del gobierno “a la luz de las dificultades financieras que Pemex enfrentará”, ante la disminución de los precios del petróleo a nivel global.
Mientras que “la perspectiva negativa refleja la vulnerabilidad financiera de Pemex al entorno actual de precios del petróleo deprimido y la necesidad de la compañía de un apoyo gubernamental extraordinario y proactivo”, indicó la agencia calificadora.
Expuso que continúa el deterioro del perfil de crédito independiente de Pemex, en un entorno donde la industria petrolera enfrenta diferentes dificultades. “La baja se da en medio de la recesión en la industria mundial del petróleo y el gas, los supuestos más bajos del precio del petróleo de Fitch y el debilitamiento del vínculo crediticio entre México y Pemex”.
En el análisis de Fitchs Ratings Pemex tiene una “flexibilidad limitada para navegar la recesión” en la industria del petróleo y el gas dada su elevada carga fiscal, alto apalancamiento, aumento de los costos de elevación por barril y altas necesidades de inversión para mantener la producción y reponer las reservas.
“Las calificaciones de Pemex esperan que el gobierno ejecute acciones de apoyo más significativas cuando sea necesario, aunque si el gobierno retrasa las medidas de apoyo extraordinarias, la calificación continuará deteriorándose”, advirtió la agencia, cuya nota crediticia aplica a títulos por un monto total de 80 mil millones de dólares. (Con información de La Jornada y El Economista)