La extradición de Emilio Ricardo Lozoya Austin, ex director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), va a proceder y no habrá impunidad en el caso del ex funcionario federal quien se encuentra detenido en España, según lo aseguró este miércoles 25 de marzo, el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Va a proceder como los otros procesos que se están siguiendo, no hay impunidad, va a proceder, estoy seguro, esa extradición y otras que están ahí y no hay influyentismo”, afirmó el mandatario nacional durante su conferencia de prensa matutina.
El Gobierno de México solicitó ayer 26 de marzo a España -en el vencimiento del plazo-, la extradición de Lozoya Austin. La Fiscalía General de la República (FGR) remitió a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) el expediente del ex funcionario de la Administración de Enrique Peña Nieto, y a su vez la Cancillería envió la documentación al Gobierno español.
El ex director general de Pemex ingresó el pasado 2 de marzo, en la cárcel de Madrid IV, en Navalcarnero, tras ser trasladado en las últimas horas desde el centro penitenciario de Alhaurín de la Torre, en Málaga.
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias de España, organismo dependiente del Ministerio del Interior, decidió trasladar al ex funcionario federal mexicano por cuestiones administrativas, debido a la cercanía a la Audiencia Nacional, el órgano judicial con sede en la capital española, y que es el competente para decidir sobre la orden de detención y extradición emitida por las autoridades mexicanas.
La de Navalcarnero es una cárcel al sur de Madrid que fue construida en 1992 y dispone de 750 celdas y otras 113 complementarias, según datos de la propia Secretaría General de Instituciones Penitenciarias de España.
El pasado 12 de febrero, Lozoya fue detenido en Málaga, España, con base en una orden de detención provisional con fines de extradición solicitada por el Gobierno de México, con el propósito de llevarlo a proceso por dos causas penales.
En una le atribuyen cohecho, por supuestamente recibir sobornos por al menos 10.5 millones de dólares por parte de la constructora brasileña Odebrecht y Altos Hornos de México (AHMSA), así como de la compra que hizo su esposa Marielle Helen Eckes de una casa en Ixtapa, por una suma de 1.9 millones de dólares.
En la segunda le imputan operaciones con recursos de procedencia ilícita, al haber transferido ilegalmente recursos para adquirir en 38 millones de pesos una casa de Lomas de Bezares, en la Ciudad de México, de sobornos recibidos tanto por la constructora brasileña y por AHMSA, tras la compra venta de la empresa Agro Nitrogenados en 2015.