El reconocido arqueólogo cumple 80 años en 2020 y El Colegio Nacional lo celebra con la publicación de “Al pie del Templo Mayor de Tenochtitlan. Estudios en honor de Eduardo Matos Moctezuma”. “Considerar que la Cultura es una cosa sin una importancia mayor, puede ser un grave error”, expresó a ZETA
Los homenajes en torno a la figura del arqueólogo más importante de México, Eduardo Matos Moctezuma, presidente en turno de El Colegio Nacional, abundan en el preámbulo de su 80 onomástico que celebra este año.
Solo en 2019, el Seminario de Cultura Mexicana lo distinguió como Miembro Emérito y El Colegio Nacional lo celebró publicando “Al pie del Templo Mayor de Tenochtitlan. Estudios en honor de Eduardo Matos Moctezuma”, en dos tomos, bajo la coordinación de Leonardo López Luján y Ximena Chávez Balderas.
“‘Al pie del Templo Mayor’, que publica El Colegio Nacional, son las colaboraciones de más de 50 investigadores que están en el Templo Mayor. Han tenido la delicadeza de dedicar a mí estos dos tomos; yo creo que tienen razón que el Proyecto Templo Mayor fue un parteaguas en la arqueología mexicana para conocer y profundizar en los interiores de este pueblo”, expresó a ZETA el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, quién también compartió por qué se interesó en la arqueología, en especial en la investigación de los aztecas, sobre el Proyecto Templo Mayor que fundó en 1978, así como algunos mitos en torno a los también conocidos como mexicas y a la Conquista; además de las limitaciones presupuestarias en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
UNA VOCACIÓN
Eduardo Matos Moctezuma nació el 11 de diciembre de 1940 en Ciudad de México. Concluyó la educación secundaria en el Colegio Alonso de la Veracruz y en 1957 ingresó a la Preparatoria en el Colegio Cristóbal Colón. Es Maestro en Ciencias Antropológicas con especialidad en Arqueología por la Escuela Nacional de Antropología e Historia y la Universidad Nacional Autónoma de México.
Ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes en el campo de Historia en 2007 y distinguido por la Universidad de Harvard con la Medalla Henry B. Nicholson en 2002 y con la cátedra que lleva su nombre desde 2016, Eduardo Matos Moctezuma contó a ZETA cómo descubrió la arqueología. De entrada se le inquirió:
— ¿Qué fue determinante para que Usted se interesara y especializara en el estudio de los mexicas?
“En primer lugar, debo comentar que yo no tenía muy claro en la Preparatoria lo que iba a estudiar, y precisamente la lectura de un libro, ‘Dioses, tumbas y sabios’, de C. W. Ceram, definió mi rumbo hacia la arqueología. Entonces, eso motivó que inmediatamente, saliendo de la Preparatoria, me fuera yo a inscribir en la Escuela Nacional de Antropología e Historia en 1959, para empezar mis estudios, y después ya las prácticas de campo, el trabajo en diversos sitios arqueológicos.
“Finalmente me dediqué y me dedico actualmente al estudio principalmente de los mexicas, porque el Proyecto Templo Mayor que establecimos desde 1978 pues marcó esa pauta; ya había yo hecho algunos trabajos sobre los mexicas, sobre los aztecas, pero con el Proyecto Templo Mayor que cumple 42 años, fue donde ya pude marcar mis enfoques sobre lo que queda, ese principal edificio de los aztecas, y poder empezar un trabajo que se ha prologando durante más de cuatro décadas”.
LOS MEXICAS
Como un legado fundamental no solo para México, sino para el mundo, la fundación del Proyecto Templo Mayor es la gran aportación que ha hecho Eduardo Matos Moctezuma.
Su conocimiento de la cultura azteca, mexica o tenochca, se concentra en obras fundamentales como “Vida y muerte en el Templo Mayor” (1986), “El Templo Mayor de los aztecas” (1988), “Muerte a filo de obsidiana” (1996), “Los aztecas: del nacimiento a la muerte” (2005), “Estudios mexicas” (1999-2005) y “La muerte entre los mexicas” (2010), por citar solo algunos.
— ¿Cuál fue el hallazgo que marcó un antes y un después en su estudio de los mexicas?
“Pienso que no es un hallazgo en particular, sino todo un proyecto de investigación, el cual comienzo en 1978 y ha dado frutos enormes. Hay un pasante de arqueología que está haciendo la recopilación de todo lo que ha publicado el Proyecto Templo Mayor, son más de 250 fichas bibliográficas de todo tipo, tesis de doctorado, de maestría, de licenciatura, catálogos, guías, artículos en gran cantidad.
“Claro, en 1978 hicimos todo un proyecto multidisciplinario, desde el principio nos apoyaban, por ejemplo, especialistas del Departamento de Prehistoria del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), al cual pertenezco, y allí contábamos con el apoyo de químicos, biólogos, geólogos, para diferentes análisis; ahí quedó de esta manera definido mi interés en el centro de México, y actualmente de manera particular de los mexicas”.
— De manera especial en toda su trayectoria dedicada al estudio de los mexicas, ¿qué le ha sorprendido más de la civilización azteca?
“La cultura mexica, al igual que otras culturas mesoamericanas, tuvo creaciones sorprendentes; por ejemplo, la misma ciudad de Tenochtitlan, su planificación en un medio lacustre es toda una epopeya para ese momento; pero además tenemos todas sus expresiones, claro, era un pueblo guerrero, un pueblo que también se expandía a otras áreas de Mesoamérica en plan de conquista. Conquistaba e imponía tributos muy severos a los pueblos enemigos conquistados, entonces, también nos dejó, por otro lado, todas esas expresiones, su canto, su poesía, su literatura; o sea que tenemos toda una serie de parámetros para conocer mejor a este pueblo”.
— ¿Por qué es importante el conocimiento sobre el pueblo mexica en el Siglo XXI?
“El conocimiento de este pueblo y de otros más de la antigüedad mesoamericana nos ilustra mucho de lo que fueron estos pueblos, su proceso de desarrollo, sus condiciones económicas, su presencia a través del comer, de sus producciones, de cerámica, de lítica, arquitectónicas; en fin, nos da un panorama de lo que eran estas culturas. ¿Cuánto falta? Mucho, no lo podemos medir, puesto que se continúa excavando, nos seguimos sorprendiendo de algunas cosas que van apareciendo y se sigue enriqueciendo más el conocimiento de este pueblo.
“El Proyecto Templo Mayor y el Programa de Arqueología Urbana, han aportado o han dado un nuevo rostro del mexica, tenemos allí muchísima información que se puede leer en las diferentes publicaciones que se han hecho por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, El Colegio Nacional.
“Este pueblo fue el que tuvo la primera resistencia contra la Conquista española, y pues combatió en contra de quienes querían oprimirlo después de que ellos tenían oprimidos a pueblos mesoamericanos que se unen al conquistador, se unen a Cortés para atacar a Tenochtitlan, para liberarse de ese yugo que los tenía sometidos los mexicas. Entonces y en estas fechas, a 500 años, sí es muy importante conocer, conmemorar estos acontecimientos históricos, profundizar en ellos y desmitificar muchas cosas, porque en la Historia también se han dado muchos aspectos que no son ciertos”.
LOS MITOS
En la entrevista con ZETA, Eduardo Matos Moctezuma compartió algunos mitos en torno a la cultura azteca y la Conquista de Tenochtitlan, a propósito de los 500 años de la llegada de Hernán Cortés a Mesoamérica en 1521:
— ¿Cuáles son los principales mitos que se dicen de los aztecas?
“Se nos ha dicho que Hernán Cortés quemó las naves, nunca las quemó, las encalló para poder aprovechar los materiales que las naves traían. Se dice que la Malinche era traidora, no lo era; si hubiera sido mexica, pues sí, porque estaría traicionando a su pueblo, pero no era mexica. Ella era de un pueblo que estaba más bien sujeto o en vías de ser sujeto por los mexicas; entonces, ella no es una traidora, al contrario, es fiel a su pueblo y por eso se une, como muchos pueblos lo hicieron, a Cortés, para combatir al mexica.
“El águila parada sobre el nopal que encuentran los aztecas, pues nunca la encontraron, eso es simbólico nada más; entonces, el conocimiento va avanzando, el estudio de la historia va permitiendo que se vayan aportando mayores datos, es así como se van despejando ciertas dudas de este tipo que ahora esperamos que empiecen a ser enseñadas a los niños con esa nueva visión”.
— ¿Qué es lo más importante a 500 años de la llegada de Hernán Cortés a Mesoamérica, que se cumplirán en 2021?
“Hablar precisamente lo que fue eso, lo que produjo y cómo fue ese encuentro entre dos civilizaciones muy diferentes entre sí, en la que una sale triunfante, la otra sale derrotada, y bien sabemos que las guerras de conquista, como lo fue esta evidentemente, traen consecuencias: matanzas, destrucción. En fin, toda una serie de aspectos de imposición. Desde esa perspectiva hay que entender bien cómo se dio este proceso para poder ir consolidando el conocimiento de nuestra historia. Considero que estas conmemoraciones permiten hacer una reflexión, poner las cosas en su lugar”.
“NOS HAN LIMITADO MUCHO EN ESTE SEXENIO”
El Investigador Emérito del INAH analizó el papel que juega el gobierno de la llamada Cuarta Transformación en la Cultura:
— En el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, ¿qué es lo más urgente para continuar el estudio de la cultura mexica?, se le cuestionó en diciembre de 2019.
“Bueno, que se apoyen precisamente los estudios, las investigaciones, los centros de investigación, tanto en aspecto de cultura como de ciencia, porque nos han limitado mucho en este sexenio y creo que ése es un enorme error, ¿verdad? Porque precisamente en cierta forma puede frenar la investigación en todos los campos, en todos los ámbitos. Entonces, es importante que se reflexione en ese aspecto, porque sí se está sintiendo ese retiro de medios económicos para poder llevar a cabo toda una serie de actividades que requieren la ciencia y la cultura”.
— ¿En qué rubros ha disminuido el sexenio de López Obrador, el apoyo para el estudio arqueológico de los aztecas?
“Bueno, tanto solo pongo de ejemplo el Proyecto Templo Mayor, que en un momento dado iba ya casi a cerrar sus puertas porque tenemos gente ahí, personal, que ha estado trabajando por años y que no puede basificarse, y hace unos meses apenas, se estuvo a punto de que pudiera -y lo declaró el actual director, mi sucesor, Leonardo López Luján-, de que ya iba a bajar la cortina porque no era posible que no se contara con fondos para eso”.
Eduardo Matos Moctezuma hizo un llamado a la administración de AMLO para el apoyo a la Cultura en general:
“Se debe apoyar no nada más el estudio de los mexicas, toda la Cultura, la ciencia y demás, porque eso le da fuerza a un país; considerar que la Cultura es una cosa sin una importancia mayor, puede ser un grave error”.
Así llegó la sentencia final del arqueólogo: “Yo siempre he dicho que el petróleo se nos va a acabar un día; la Cultura, no”.