Mucha gente dice que las jornadas por la paz es un tema político y de asistencialismo social, pero no es así; el tema principal es “pacificar las regiones” asegura el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de México en Baja California, Isaías Bertín. De diciembre a la fecha se han realizado 47 Jornadas por las Paz, 18 con presencia del gobernador y han recibido 10 mil 352 peticiones. En marzo informarán respecto al porcentaje de atención de las mismas
En promedio la asistencia atestiguada por reporteros de esta casa editora a las jornadas de fin de semana del gobierno de Jaime Bonilla Valdez, ha sido de 400 a 600 personas; el reporte oficial dado por la autoridad refiere la presencia de mil a mil 200 ciudadanos por acto.
Han recibido 10 mil 352 peticiones a nivel estatal, 6 mil solo en Tijuana, y será hasta marzo cuando ofrezcan el primer informe respecto a la cantidad y tipo de respuesta dada a los ciudadanos, proceso que repetirán cada tres meses.
Mujeres representan la mayoría de los asistentes, seguidos por personas de la tercera edad y niños, hombres son minoría. Llegan porque la semana previa, personal de gobierno se presenta en la comunidad a preguntarles por sus necesidades e invitarlos. Acuden a recibir lo que les dan, sean vacunas, despensas o asesorías. Durante la ceremonia aplauden las promesas recibidas y en algunos casos hacen peticiones a gritos.
Las Jornadas por la Paz son el proyecto del gobierno de Jaime Bonilla Valdez que se desprende de las Mesas de Coordinación Territorial para la Construcción de la Paz y la Seguridad. El objetivo oficial de estas visitas periódicas en las colonias menos favorecidas del Estado, con alta incidencia delictiva, es pacificar Baja California a través de la comunicación directa de los funcionarios de primer nivel del gobierno estatal con ciudadanía.
Se trata de generar confianza entre la sociedad y las instituciones para que denuncien los actos ilícitos. Y también permiten al mandatario tener presencia permanente en las calles de BC recibiendo y atendiendo peticiones, como si estuviera en campaña,
En entrevista con el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno de México en Baja California, Juan Isaías Bertín Sandoval, este aseguró que la finalidad es conocer las necesidades en temas de desarrollo e inclusión que tienen los habitantes de los fraccionamientos y colonias que se visitan, para así poder cubrir esas necesidades que a la par, ayudarán a disminuir los factores de riesgo en materia de seguridad.
“Si no tenemos en una colonia alumbrado, pavimento, apoyos a las personas, a los pequeños empresarios, estamos fomentando la delincuencia, la gente crece con coraje porque se le está apartando, por lo que tienen que tomar otro camino. Mucha gente dice que las jornadas por la paz es un tema político y de asistencialismo social, pero, no es así; el tema principal el pacificar las regiones, a partir del bienestar”, indicó Bertín Sandoval.
La primera jornada se realizó en Tijuana por ser el municipio que representa el 80% de problemas de seguridad en todo Baja California.
RITUAL SIMILAR: DISCURSOS INFORMATIVOS, RECEPCIÓN DE PETICIONES Y RECORRIDOS
Como cada fin de semana desde el 7 de diciembre de 2019, en alguna de las comunidades en la Zona Este de Tijuana y desde enero en otras colonias ubicadas en zonas periféricas de los municipios bajacalifornianos, es común ver a centenares de personas reunidas en parques, escuelas o canchas deportivas para recibir apoyos inmediatos como despensas y hacer peticiones al gobernador.
Usualmente citan a los residentes a las nueve de la mañana para empezar a recibir peticiones en los módulos de atención que previamente instalan las diferentes secretarias. Pero consideran la hora de inicio de las jornadas cuando llega el mandatario estatal.
La Jornada por la Paz más reciente en Tijuana, se organizó el 15 de febrero en la explanada de la Escuela Primaria “13 de Septiembre de 1847” en la colonia Urbi Villas del Prado. Agendaron al inicio las 10:30 pm, pero Jaime Bonilla Valdez arribó media hora antes y empezaron.
Como de costumbre, frente a la puerta principal de acceso al lugar, quedó estacionada la Suburban blanca de la cual descendió el Ejecutivo estatal para reunirse con poco más de 600 personas, aunque las cifras oficiales mencionan que fueron cerca de mil asistentes. Junto a él se reunieron miembros de su gabinete, y momentos después, le alcanzó el alcalde de Tijuana, Arturo González Cruz, quien llegó al terminar su Jornada del Bienestar.
El ritual suele ser el mismo en cada jornada. Tras la llegada del gobernador, colonos y medios de comunicación, se amontonan a su alrededor para empezar a hacer peticiones, en el tiempo que dura el camino hacia el templete donde él y sus secretarios hablan las promesas cumplidas en el Estado y particularmente en la zona que visitan.
Las solicitudes que recibe y turna a las secretarías son variadas, desde reuniones, seguridad, pavimentación, temas de salud, mejoras en escuelas y vivienda. Terminado el acto protocolario de los discursos de los titulares de todas las secretarías, cerrados por los del mandatario, se da una nueva jornada de peticiones durante los recorridos que suele realizar en las colonias.
Esta vez, en su discurso, el ingeniero Bonilla Valdez repitió que las colonias donde realizan estas jornadas son a partir de la incidencia de inseguridad y áreas marginadas, porque son prioridad para su gobierno.
“Llegamos a la comunidad visitada durante la semana y se revisa toda la comunidad, las escuelas, las comandancias, el Ministerio Público; la condición en que están los centros educativos, y así llegamos con propuestas más genuinas. No se desesperen, que a todas partes vamos a llegar eventualmente, y vamos a llegar con buenas noticias”, prometió.
Lo anterior, después que un grupo de vecinas de la colonia 3 de Octubre elevaran la voz para solicitar que también les visitaran muy pronto.
Agregó que reciben un promedio entre 350 y 400 peticiones por jornada, las cuales son analizadas para su posterior atención.
Aunque en un principio se manejó que al final de la jornada no habría recorrido, después de atender a quienes se le acercaron en la etapa da salida, para pedir sillas de ruedas o entrega de escrituras de propiedad, el mandatario, decidido como de costumbre, junto con su comitiva y algunos vecinos del fraccionamiento, caminaron entre los puestos de un mercado sobre ruedas que estaba instalado en el área, para conocer las necesidades que aquejan a la comunidad.