La caída en inversión pública, menor dinamismo en la industria manufacturera, así como el desplome de la construcción y el empleo, afectan negativamente a la economía del Estado. Ante ello, empresarios piden impulsar el crecimiento
En el tercer trimestre de 2019, Baja California lideró los cinco estados que reportaron la mayor reducción en su actividad económica, situándose por encima de Morelos, Quintana Roo, Nayarit y Aguascalientes, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
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Si bien, en términos anuales la economía bajacaliforniana creció 2.5%, sumó dos trimestres consecutivos con retroceso, lo que acentuó la desaceleración en la que ha estado inmersa durante los últimos años.
Foto: Ramón T. Blanco Villalón
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Para el economista Roberto Valero, el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal refleja que la economía se encuentra en “recesión técnica”, toda vez que en el segundo trimestre de 2019 decreció -1.05%, y en el tercer trimestre, la contracción fue de -0.05%.
Cuestionado sobre ello, Mario Escobedo Carignan, secretario de Economía Sustentable y Turismo, dijo que la autoridad “no está viendo” ese panorama. “Nosotros vemos que 2020 debe ser un buen año para Baja California”, confió.
No obstante, previó que continuará “la parte estresante de la economía que tiene que ver con el hecho de que habrá elecciones en Estados Unidos en noviembre próximo, y que al Presidente Donald Trump le genera rentabilidad electoral estar teniendo una relación a contrapelo contra México”.
En su opinión, la relación comercial ríspida que han tenido la Unión Americana y China hace que Baja California sea un Estado atractivo para cualquier inversionista que pretenda atacar el mercado estadounidense, por lo que a la autoridad le “corresponde -y es en lo que estamos trabajando- generar las condiciones” para que llegue más inversión.
Sin embargo, empresarios consultados por ZETA coincidieron en señalar que la reciente alza y creación de impuestos “no ayuda a generar confianza hacia el gobierno local”.
Salvador Díaz González, presidente de la Asociación de Industriales de la Mesa de Otay (AIMO), expuso que la autoridad también “debe evitar chascos como el sucedido en días pasados con el caso de Hyundai”.
Suceso en que el gobernador Jaime Bonilla Valdez y el secretario Escobedo Carignan informaron a los medios de comunicación que se había clausurado una planta de la compañía surcoreana en el Ejido Maclovio Rojas, en el Este de Tijuana, por incumplir normas ambientales, cuando en realidad se trató de una mentira, ya que la autoridad únicamente aplicó etiquetas de suspensión de actividades a dos contenedores de manejo especial.
“La autoridad debe dedicarse a incentivar la inversión y a generar confianza; debe evitar chascos de ese tipo porque eso genera nerviosismo y desconfianza”, sostuvo el líder empresarial, quien resaltó la importancia de “cuidar” la Inversión Extranjera Directa que llega a BC.
BAJA INVERSIÓN PÚBLICA INCIDE EN MENOR CRECIMIENTO
Aunque Roberto Fuentes Contreras, profesor investigador de la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), difirió respecto a que la economía estatal se encuentra en “recesión técnica” al considerar que no se pueden comparar los trimestres, puesto que en esos periodos de tiempo puede haber diferentes componentes, durante el tercer trimestre habría más días festivos o abarcaría más días de vacaciones que en el segundo, de modo que “el comparativo no es justo” y, por ende, se toma el crecimiento anualizado.
No obstante, coincidió con Valero en que BC no está en plenitud económica, pues hay indicadores negativos como la inversión pública, la construcción, la manufactura y el empleo; siendo el primero “el componente que más ha repercutido (a la baja) en el crecimiento económico”.
En ese sentido, aseguró que aun cuando el Estado recibió, particularmente en el sexenio pasado, las mayores participaciones federales de la historia, ese dinero nunca se inyectó a la economía para que ésta creciera.
“Llevamos dos sexenios en los que no se invierte en infraestructura. No hay una promoción adecuada en el Estado y las empresas están compitiendo en un contexto más complejo en el que ocupan más infraestructura, más mano de obra calificada, más centros de investigación y desarrollo y una mayor participación de las universidades, que se involucren más en el proceso productivo, y en esto Baja California perdió la brújula hace más de una década”, declaró.
SE DESPLOMA CONSTRUCCIÓN
Acorde con Roberto Valero, presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California, al cierre del tercer trimestre de 2019, la industria de la construcción en el Estado sumó cinco trimestres consecutivos con cifras a la baja.
Esto es preocupante, ya que el sector tiene un gran efecto multiplicador en la economía. En su perspectiva, una de las razones del bajo crecimiento es el que “el gobierno no está invirtiendo en obra pública”.
De hecho, “la producción de la construcción pública tuvo el menor crecimiento en los últimos 14 años”, ya que fue 3 mil 353 millones de pesos en 2019.Foto: Alejandro Gutiérrez MoraRoberto Fuentes, Investigador de la Universidad Autónoma de Baja California
Foto: Julieta Aragón.- Mario Escobedo Carignan, secretario de Economía Sustentable y Turismo / Foto: Alejandro Gutiérrez Mora.- Roberto Fuentes, Investigador de la Universidad Autónoma de Baja California / Dr. Roberto Valero, presidente del CEEBC.
En ese sentido, Fuentes Conteras refirió que al cierre de noviembre, la construcción del sector público cayó 12%, mientras que la construcción privada aumentó 7%.
“El balance general es negativo, porque hay un decrecimiento de cerca de 2%”, y abundó que en los tres últimos meses de los que se tienen registros, “ya empieza a haber tasas negativas para los indicadores de la construcción tanto pública como privada”.
INDUSTRIA CRECE A MENOR RITMO
Ambos economistas explicaron que otro componente importante para el bajo crecimiento de Baja California es el desempeño que ha tenido el sector industrial, el cual cerró octubre de 2019 con una baja de 0.1%, “el menor crecimiento en cinco trimestres”, afirmó Valero.
“Si nos asomamos al mensual, tenemos seis meses de diez con cifras negativas. Entonces, entre la falta de promoción, y problemas internacionales, ese es el resultado”, evaluó.
Al respecto, Fuentes Contreras explicó que el sector manufacturero del país, particularmente el de BC, “está fuertemente vinculado” al sector industrial de Estados Unidos, el cual ha tenido un proceso de desaceleración que ha generado que los pedidos a las empresas que se encuentran en México empiecen a decrecer en su ritmo.
Esto pudiera cambiar al haber un mayor optimismo como consecuencia de la aprobación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Al interior de la industria se tendrían que analizar diferentes sectores, por ejemplo el desempeño de las empresas IMMEX, dedicadas a la exportación, las cuales tuvieron un incremento de 9.8% en los ingresos que obtuvieron como resultado de la venta de sus productos en el extranjero.
“Eso es positivo, sin embargo, en el mismo periodo de 2018, los ingresos de estas empresas habían crecido 22%. Siguen creciendo, pero a menor ritmo”, indicó el especialista, a la vez de destacar que Baja California concentra la mayor cantidad de empresas bajo este esquema a nivel nacional.
EMPLEO SE DESACELERA
Un menor crecimiento también se observa en cuanto a la generación de empleo, pese a que la tasa de desocupación se mantiene baja con respecto a otros estados del país, sin embargo, para Roberto Valero tal indicador está influido “por el avance en la informalidad y el cierre de empresas”.
Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) refieren que BC pasó del lugar 3 al 19 a nivel nacional al cierre del año pasado, ya que en diciembre de 2018 tuvo un crecimiento de 5.6% y en diciembre de 2019 solo de 1.4%.
A decir de Valero, el informe del IMSS también revela que en diciembre pasado se dieron de baja más de 27 mil trabajadores ante esa dependencia. “No todos perdieron su empleo en diciembre, porque normalmente diciembre es un mes estacional donde siempre es negativo, pero esta cifra fue la más alta en diez años”, aclaró.
A ello hay que sumar el cierre de empresas, que en el último mes de 2019 ascendió a 817, “la cifra más alta desde 2002”, en tanto que “en el acumulado de 2019, más de 9 mil empresas cerraron. Algo está pasando con la promoción del gobierno y las políticas económicas que tenemos” observó el economista.
Adicionalmente, la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) recientemente publicada por el Inegi, señala que la población ocupada en términos anualizados creció nada más 1.45% y la desocupada 0.9%.
“Otro dato muy alarmante es una variable que llama el Inegi Población No Económicamente Activa Disponible. Es decir, los trabajadores que salieron del mercado de empleo porque no encontraron condiciones para contratarse, ya sea por salarios, prestaciones, etcétera. Esta cifra de trabajadores disponibles fue la más alta desde 2016, puesto que 143 mil 879 trabajadores salieron del mercado en el cuarto trimestre de 2019 nada más en Baja California”, precisó.
En enero de 2020 hubo una leve mejoría en generación de puestos de trabajo en el Estado, con un incremento de 2.4%, sin embargo, BC se ubicó en la décima posición a nivel nacional en esa materia, pese a las declaraciones de Mario Escobedo Carignan, quien en entrevista con ZETA informó que en enero de 2020, “Baja California es primer lugar en generación de empleo a nivel nacional. Generamos 16 mil 500 empleos, no se generaba esa cantidad desde 1998”.
LLEGA MENOS IED NUEVA
Roberto Valero comentó que datos de la Secretaría de Economía federal apuntan que “la Inversión Extranjera Directa (IED) nueva para un periodo de cinco años y tres trimestres, fue de mil 736 millones de dólares, la menor cifra que hemos recibido desde el gobierno de Héctor Terán Terán”.
Respecto a la captación de IED, el secretario Mario Escobedo Carignan reconoció “grandes áreas de oportunidad y retos en la promoción de la inversión”. No obstante, “hoy por hoy estamos recibiendo todos los días inversionistas asiáticos, europeos”. Destacó un proyecto de biomedicina que podría arrancar en Rosarito, con una inversión cercana a 200 millones de dólares que generaría “miles de empleos”
En opinión del presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California, entre los factores que inciden para que cada vez llegue menos inversión nueva al Estado se encuentran: falta de energía, suministro de agua, comunicaciones, impuestos, transparencia en el manejo de recursos públicos y de la relación con el gobierno.
“Lamentablemente Baja California está enfrentando todos esos aspectos en este momento”, ya que “hemos tenido y tenemos actualmente en áreas económicas a gente que está viendo más por sus intereses que por los del Estado”.
En cuanto a la inflación, Fuentes Contreras dijo que el índice general incrementó 3.7% de diciembre de 2019 a enero de 2020, aunque el componente de bebidas, alimentos y tabaco aumentó 8.7%.
REMESAS, EL RESPIRO DE LA ECONOMÍA
De acuerdo con Valero, lo que ha estado haciendo más lenta la caída de la economía estatal es el ingreso de las remesas y el número de los ocupados en el vecino país del norte.
“Para las remesas tuvimos un crecimiento histórico al cierre del año. Entraron 939 millones de dólares a Baja California, cifra equivalente a más de 18 mil millones de pesos, y comparada con la registrada en 2014, cuando inició la administración del ex gobernador Francisco Vega de Lamadrid, el monto por remesas en 2019 tuvo un crecimiento de 119%, como un efecto de la depreciación del peso frente al dólar. La gente que recibe remesas recibe más dinero y pueden seguir gastándolo, pero de alguna manera la economía está siendo parasitaria, porque estamos dependiendo del dinero que está entrando de afuera”, advirtió.
De igual manera, el número de ocupados legales en EU creció 12% de 2018 a 2019. Son 76 mil 277 con un salario promedio de 400 dólares por semana.
NECESARIA MÁYOR INFRAESTRUCTURA PARA DETONAR CRECIMIENTO
ZETA hizo un sondeo entre algunos presidentes de organismos empresariales. Para Salvador Díaz González, presidente de AIMO, el “exceso de regularización y centralización de trámites” hacen que la economía crezca menos que antes, y pidió que el gobierno “ponga más atención a los agentes económicos”, propiciando confianza para los inversionistas.
En opinión de Francisco Rubio, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación Tijuana, el gobierno debe dar “un poco más de seguridad en torno a la forma de hacer gobierno y no estar creando impuestos sin argumento, ni fundamento”. Además, debe mejorar la comunicación con el Gobierno Federal para lograr una infraestructura carretera, de transporte, de gas natural y energías óptimas para el crecimiento económico de la entidad.
Finalmente, se pronunció por que la actual administración incremente las condiciones de seguridad pública, ya que la violencia es un inhibidor para atraer capitales. Perspectiva que también compartió Roberto Rosas Jiménez, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana en Tijuana.
