A casi dos meses de las acusaciones de cobro de sobornos en su contra, la ex Secretaria del Bienestar, Cynthia Gissel García Soberanes, negó haber participado en estas prácticas y señaló que todo se trata de un golpeteo político al interior del gobierno.
Al salir de su comparecencia ante el Ministerio Público -la cual ella solicitó-, aseguró que había personas interesadas en el cargo que desempeñaba, y por ello se dieron a conocer estas conversaciones por su ex colaborador Rosendo Colorado, que consideró que actuó por consigna.
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Comentó que se trata de un golpeteo interno, a diferencia de lo que señaló el ex Oficial Mayor, Jesús Nuñez Camacho, que se trató de factores externos al gobierno, los que terminaron por costarle sus cargos.
García Soberanes dijo que lo único que obra en la carpeta de investigación en su contra son recortes de periódicos y conversaciones de whatsapp, algunas que ni siquiera reconoce.
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Referente a la intervención de la Secretaría de Honestidad, acusó a la titular, Vicenta Espinoza, de ser ella quien filtró las conversaciones a los medios de comunicación, y aseguró que a la fecha no ha sido llamada a comparecer para esclarecer los hechos, por lo que decidió renunciar formalmente a su cargo el 20 de diciembre.
García Soberanes aseveró que mantiene conversaciones con el gobernador Jaime Bonilla Valdez, al que calificó de ser un hombre inteligente que seguramente sabe quiénes fueron los responsables de filtrar esta información y sus intenciones.
Tanto Cynthia Gissel García, como Jesús Nuñez, fueron los dos funcionarios involucrados en los señalamientos de la presunta exigencia de “moches” a cambio de contratos para empresarios mexicalenses.
