El presidente Donald Trump celebró este jueves 19 de diciembre, la aprobación del Tratado Comercial entre México, EU y Canadá (T-MEC), en la Cámara de Representantes de EE.UU., sin embargo, arremetió contra la presidenta de dicho órgano legislativo, Nancy Pelosi.
“El gran acuerdo comercial de T-MEC ha estado esperando en el escritorio de Nancy Pelosi durante ocho meses, ella ni siquiera sabe lo que dice, y hoy, después de pasar por un amplio margen en la Cámara, Pelosi intentó tomar crédito por eso“, expresó el mandatario a través de su cuenta de la red social Twitter.
“Los laboristas votarán por Trump. ¡El acuerdo comercial es excelente para EE. UU.!”, agregó el presidente estadounidense en otro tuit
Por si parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo estar “bien y de buenas” luego de que la Cámara de Representantes de Estados Unidos ratificó el T-MEC.
“Es benéfico este acuerdo por el pueblo de Estados Unidos, Canadá y para nosotros los mexicanos. Estamos bien y de buenas”, afirmó el mandatario nacional en un video publicado en su cuenta de Twitter.
“Es una muy buena noticia. Es benéfico este acuerdo por el pueblo de Estados Unidos, Canadá y para nosotros los mexicanos. Estamos bien y de buenas”, indicó el político tabasqueño.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este jueves 19 de diciembre, en una votación 338 votos a favor, 41 en contra y 5 abstenciones, la Ley de Implementación del nuevo Tratado Comercial entre México, EU y Canadá (T-MEC), esto después de casi 2 años y medio de negociaciones.
Dicha Ley pasará ahora al Senado estadounidense para su ratificación final, un proceso que según los líderes republicanos deberá esperar a enero próximo.
Firmado en noviembre de 2018 y modificado este mes, el T-MEC reemplazaría el aún vigente Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El nuevo pacto crea por primera vez un mecanismo de respuesta rápida para vigilar elecciones de líderes sindicales y contratos colectivos en México.
“Hemos logrado progreso en este acuerdo y es un buen marco hacia otros acuerdos comerciales hacia adelante”, dijo Rosa DeLauro, una congresista demócrata por Connecticut, que en 1993 votó en contra del original TLCAN, pero que ahora voto favor gracias al mecanismo de vigilancia laboral.
El T-MEC contó con el apoyo de ambos partidos (Democráta y Republicano), así como de sindicatos, como la principal central de trabajadores de EE.UU., la AFL-CIO, además del sector privado como la Cámara de Comercio estadounidense.
La Ley de Implementación también provee más de 840 millones de dólares para instrumentar las diversas disposiciones del T-MEC: desde asistencia para la implementación de la nueva reforma laboral en México, hasta plantas de tratamiento de agua en la frontera común.
El pasado lunes 16 de diciembre, el representante comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthiezer, aseguró que panelistas y no agregados laborales serán quienes harán las inspecciones para verificar el cumplimiento en materia laboral del T-MEC).
En una carta dirigida al subsecretario de América del Norte, Jesús Seade Kuri, el funcionario estadounidense indicó que los agregados laborales no harán inspecciones en México y que únicamente tienen el objetivo de brindar asistencia al nuevo comité laboral interagencial del gobierno de EE.UU.
Lighthiezer aseguró que las denuncias laborales que se integren en el marco del T-MEC se solucionarán mediante un mecanismo especial (panel laboral de respuesta rápida) que se establece en el adendum firmado el 10 de diciembre pasado.
“Se incluyó en la legislación de implementación del Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) que se autoriza a hasta cinco agregados del Departamento de Trabajo para colaborar con sus contrapartes, trabajadores y grupos de la sociedad civil mexicanos en la implementación de la reforma laboral mexicana”, abundó el funcionario estadounidense.
“Incluso mediante la prestación de asistencia técnica y el desembolso de fondos para el desarrollo de capacidades y brindar asistencia al nuevo comité laboral interagencial del gobierno de EE.UU.”, añadió
El documento detalla que actualmente la Embajada estadounidense en México mantiene agregados a una docena de agencias federales, quienes contribuyen su conocimiento técnico en apoyo a la misión diplomática.
“El T-MEC incluye un mecanismo de respuesta rápida para asuntos de centros laborales específicos que es el primero en su tipo, cuyos paneles independientes, de tres personas elegidas por ambas partes, pueden solicitar verificaciones in situ en cualquiera de los tres países cuando haya cuestiones fundadas de buena fe sobre si los trabajadores en una planta o centro de trabajo particular están viendo sus derechos laborales fundamentales violados”, agregó Lighthiezer.
“Pero esas verificaciones serán conducidas por panelistas independientes y no por los agregados laborales”, acotó el negociador comercial estadounidense.
Esta versión que es consistente con en los anexos 31-A y 31-B del Adendum en que México acordó, de forma separada, con Estados Unidos y Canadá, que los gobiernos (o las partes) nombrarán a tres individuos para una lista cada uno, y, por consenso, tres individuos para una lista conjunta, que “no serán nacionales de México o de Estados Unidos”, para el llamado panel rápido.
Desde el mismo modo, el panel laboral de respuesta rápida entre México y Canadá, en que ambas partes elegirán, por consenso, a tres individuos para una lista conjunta, que “no sean nacionales de México y Canadá”.
Antes ese mismo lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que los inspectores laborales que proponen los legisladores de estadounidenses, no se aprobaron en el T-MEC, y que eso salió “de manera clandestina”.
“Ya en el caso de México se ratificó prácticamente por unanimidad, sólo un voto en contra, 107 votos a favor y esto fue un gran avance, es un paso hacia la cooperación entre los tres países y esto va a ayudar mucho, mucho, mucho a la economía de México”, indicó el presidente.
“En un proceso que sí está relacionado, pero que depende más de la decisión de los Estados Unidos. Se envió una ley, de que habla de que cada mes pueden venir cinco inspectores, lo cual no se aprobó en el Tratado y esto sale ahora de manera clandestina”, abundó el mandatario nacional.
“Pero tienen desde luego derecho, porque tienen derecho de presentar sus iniciativas, como cualquier congreso de cada país […] No tiene que ver con el tratado, que repito, es un avance”, señaló el titular del Poder Ejecutivo Federal durante su conferencia de prensa matutina.
“Lo que hará el Gobierno de México será cooperar para solucionar la controversia sobre inspectores en el T-MEC […] Trataremos el asunto con el mismo método del diálogo y la cooperación para el desarrollo”, aseguró el político tabasqueño desde el Palacio Nacional.
Las declaraciones de López Obrador se dieron luego de que se conocieron los mecanismos adicionales que contiene la iniciativa presentada por la Cámara de Representantes de EE.UU., correspondiente a la implementación del T-MEC, tales como hasta cinco agregados laborales en la Embajada de aquel país en México, para monitorear la reforma laboral.
El viernes 13 de diciembre, Jesús Seade Kuri, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), envió una carta al representante comercial de EE.UU., Robert Lighthizer, en la que expuso su extrañamiento a los mecanismos adicionales que contiene la iniciativa presentada por la Cámara de Representantes estadounidense sobre el T-MEC.
“La legislación presentada en Estados Unidos […] adiciona la designación de hasta cinco agregados laborales estadounidenses en México con la responsabilidad de monitorear la implementación de la reforma laboral que está en curso en el país”, indicó el funcionario federal.
El subsecretario aclaró que dicha disposición únicamente está en la iniciativa de ley de implementación del T-MEC de Estados Unidos y, por lo tanto, no formó parte de la negociación entre autoridades mexicanas y estadounidenses, por tratarse de una “legislación auxiliar del ámbito interno”.
El funcionario federal aseguró el domingo 15 de diciembre, a través de su cuenta de la red social Twitter, que, en materia laboral, el Tratado comercial entre México, EU y Canadá establece un mecanismo de monitoreo que es inofensivo y en el que no se admitirán ‘inspectores disfrazados’.
Seade Kuri explicó que se contempla nombrar a cinco agregados diplomáticos laborales en México, cuya función no está clara “[…] pero que México JAMAS aceptará si se trata en medida alguna de inspectores disfrazados, por una sencilla razón: la ley mexicana lo prohíbe”, indicó.
“Lo firmado entre MX, EU y CAN es un Tratado trinacional. NO tiene ‘letras chiquitas’, es 100 por ciento público. Es un muy bueno acuerdo (sic) para México: se obtuvo mucho en trilateral. Por eso EU necesita “extras” para venta interna que NO SON PARTE DEL PAQUETE”, señaló en un primer tuit.
El subsecretario para América del Norte de la SRE argumentó que la figura del agregado laboral es “innecesaria y redundante” en el T-MEC, además, agregó que México estudiará “el establecimiento de mecanismos recíprocos” debido a dicha situación.
“Este mecanismo interno de monitoreo que propone Estados Unidos es 90 por ciento interno e inofensivo, pero debió haberse advertido [ya que] expresa desconfianza”, apuntó Seade Kuri en un tuit. El negociador mexicano abundó: “ni inspectores laborales, ni bloqueos de mercancía [por panel]”, tema que EE.UU. buscó constantemente durante las negociaciones. En vez de eso, se procedería a utilizar paneles binacionales.
“Crucial: NI INSPECTORES LABORALES NI BLOQUEO DE MERCANCIA (por panel) q EU quería. En vez; páneles binacionales: 1 panelista d EU elegido x MX, 1 d MX elegido x EU, y un 3ro d fuera x mutuo acuerdo; 85 días postdenuncia y prepanel para q asunto se resuelva según ley interna”, detalló en otro tuit.
“En el caso de aluminio EEUU pedía que éste cumpliera la regla anterior, lo cual era mortal p/nuestra industria así le diéramos 30 años para ajustarse, porque NO tenemos bauxita. Esto quedó eliminado del recién acuerdo dando un plus a la inversión en México en esta industria”, señaló.
Seade Kuri destacó que el acuerdo libera a cada país a proteger los medicamentos biológicos por el tiempo que consideren adecuado y no 10 años, como se había impuesto. “Esto golpearía fuerte a genéricos biomédicos: los de punta para enfermedades mayores como el cáncer, etc. LA POBLACIÓN GANA”, dijo.
El funcionario federal añadió que otras exigencias rechazadas fueron los aranceles estacionales, la certificación laboral en la frontera, y que no se eliminan las palabras “sostenida y recurrente”, lo que derivaría en castigos comerciales tras un problema aislado.
“Toda exigencia inaceptable fue rechazada al grado de rompimiento de negociación, como ocurrió el jueves 6 de diciembre cuando México en su conjunto -gobierno y sectores productivos apoyaron- decidimos que no me presentaría hasta que las quitaran de la mesa. Enseguida se destrabó”, indicó el negociador mexicano.
Respecto a toda la polémica que generó el tema, Seade Kuri acusó que diversas personas estaban desinformando y actuando con malicia al hablar de “letras chiquitas” en el T-MEC, por lo que dejó en claro: “esto ni es del Tratado ni nos compromete”, argumentó.
El funcionario mexicano describió que la obsesión demócrata con el tema del “enforcement” (obligar a cumplir a México con la reforma laboral), “costó sangre”, pero que el tema se atendió con el establecimiento de paneles entre ambos países.
“En esto, como concesión a los duros del Congreso, su proyecto de ley incluye un mecanismo interno de monitoreo de nuestra reforma laboral, redundante a lo que dispone el tratado, 90% interno e inofensivo (información), pero que debió haberse advertido y expresa desconfianza”, detalló.
“México adoptó una reforma laboral mucho más avanzada que la vigente en Estados Unidos. Enfrentamos confiados lo laboral en [el] T-MEC porque vamos a cumplir. Y en toda la negociación consultamos con expertos de Estados Unidos y México para cuidar su plena aplicación a la defensa laboral de los nuestros allá”, resaltó.
“Espero haber disipado la confusión que algunos han sembrado, y puesto la atención en lo importante: las decisiones unilaterales de EU pero, aún así, la importancia de desarrollar estas mejores reglas T-MEC con ellos, precisamente porque siempre gravitarán hacia ser unilaterales”, concluyó Seade Kuri.
Por su parte, el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, Ricardo Monreal Ávila, señaló a través de un comunicado, que la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, en su artículo 7, establece que el Estado receptor podrá, en cualquier momento y sin tener que exponer los motivos de su decisión, comunicar al Estado acreditante que cualquier miembro del personal de la misión no es aceptable.
Asimismo, Robert Lighthizer, dijo en entrevista para la cadena CBS, que lo que está buscando el presidente Donald Trump es que México cumpla con sus leyes laborales. “Él no quiere que los trabajadores estadounidenses tengan que competir con personas que están operando en condiciones muy difíciles”, indicó el negociador de EE.UU.
El representante comercial de los EE.UU. agregó que el tratado “era más aplicable y mejor para los trabajadores estadounidenses y los fabricantes y trabajadores agrícolas estadounidenses que antes”. Se espera que tanto Seade Kuri como Lighthizer, se reúnan este lunes en Washington para tratar el tema.
Los negociadores de alto nivel de Canadá, Estados Unidos y México firmaron el martes 10 de diciembre, en la capital mexicana, una serie de modificaciones al pacto comercial regional TMEC, y solo quedó pendiente la aprobación en los congresos de cada país. El Senado mexicano avaló el pasado jueves 12 de este mes, los cambios del Tratado.