En la primera planta de las oficinas del Instituto Municipal de la Juventud (IMJUV), en la colonia Tomás Aquino, se inauguró este lunes 9 de diciembre la Casa del Estudiante, un espacio para que los jóvenes puedan realizar sus tareas escolares de manera gratuita.
Javier Maldonado Preciado, director del IMJUV, comentó que este espacio estaba abandonado, aunque la misma institución si ofrecía facilidades para que los estudiantes de bajos recursos obtuvieran copias e impresiones sin costo.
“Esta es la primera etapa del proyecto, se plantea desarrollar una segunda etapa a partir de enero del siguiente año que contempla una sala de reuniones para estudiantes y una sala audiovisual”, comentó el funcionario.
La ubicación estratégica del lugar, cerca de las dos universidades públicas con mayor afluencia y varios planteles de los distintos niveles educativos, hizo que las autoridades de la nueva administración tomaran esta área de oportunidad para ampliar los servicios enfocados en apoyar a los estudiantes. Un área equipada con 15 computadoras e impresora, un auditorio, un aula para talleres y un comedor son los que estarán disponibles en un horario de 8 de la mañana a 5 de la tarde.
Añadió que se contempla dar atención a cerca de 25 mil jóvenes por mes, en su etapa piloto previo a la inauguración oficial del espacio estuvieron recibiendo a un promedio de 200 estudiantes que acudieron para hacer uso del equipo de cómputo.
El abandono en el que recibió al Instituto no solo se debió por la falta de equipo, nulo mantenimiento de las instalaciones y la ausencia de los programas para apoyar al que se considera su público meta, sino también al fallo en la creación de políticas públicas para darles herramientas a los jóvenes tijuanenses.
”Recibimos IMJUV en condiciones muy comprometidas, no existía el equipo con que se cuenta hoy y los jóvenes que venían para aprovechar los servicios gratuitos se encontraron con el Instituto vacío. Por eso comenté en mi toma de protesta que nada más no se llevaron el equipo porque estaba muy pesado”, declaró.
Señaló que el programa RAITE fue uno de los mayores fracasos de la administración anterior del IMJUV, pero este fue recuperado, se le cambió el nombre a programa PRISA y actualmente se ha invertido cerca de 2 millones de pesos para el apoyo de transporte en jóvenes estudiantes de escasos recursos.