Tras su participación en la reunión con vecinos de Lomas del Rubí, el gobernador del Estado, Jaime Bonilla Valdez se limitó a hablar sobre los presuntos “moches” que se cobraron por alrededor de 24 millones de pesos, e involucran a varios a funcionarios de su gobierno entre ellos a Cynthia Gissel García Soberanes, ex secretaria de Bienestar, y el ex Oficial Mayor Jesús Demián Núñez Camacho, quienes solicitaron licencia a sus cargos tras revelarse una investigación en su contra.
“(El tema) ya se está investigando”, dijo de manera escueta.
Ante la petición de la prensa que manifestará su postura en el caso específico de García Soberanes manifestó: “qué más se puede expresar si ya se había leído todo”.
Pese a la insistencia de los comunicadores, el Gobernador expresó que “es un asunto que se está investigando todavía”, por lo tanto no podía hablar mucho del tema.
Sin decir más, el mandatario se retiró y abordó su camioneta, en donde cruzó algunas palabras con el alcalde Arturo González Cruz, y posteriormente se retiró del lugar.
Este lunes, Bonilla Valdez declaró en su conferencia matutina que en su gobierno “el que se equivoca, se va”.
Y abundó: “Este gobierno no es lo mismo que el gobierno pasado, aquí el que se equivoca, se va. Y si tenemos señalamientos de algunos funcionarios, se los dije durante el proceso de la campaña, no hay vacas sagradas, no va a haber favoritismos para nadie”.