El pleno de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó, con 385 votos a favor, 41 en contra y cinco abstenciones, la Ley de implementación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
El aval, concedido el 19 de diciembre, sucedió luego de más de un año de haberse firmado en Argentina el acuerdo que sustituye al Tratado de Libre Comercio de América del Norte, vigente desde hace 25 años; y a dos días de que la Ley fuera avalada por la Comisión de Medios y Arbitrios de dicho organismo legislativo.
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Si bien, en la sesión del pleno de la Cámara de Representantes legisladores demócratas y republicanos se mostraron a favor del acuerdo que finca compromisos para México en materia de derechos laborales, todavía debe ser ratificado por el Senado, lo cual se prevé será hasta enero, para luego ser publicado por la Casa Blanca.
En el Parlamento canadiense, el T-MEC podría aprobarse a más tardar en abril, luego que el 12 de diciembre iniciara un periodo de discusión de 21 días.
Horas antes de la aprobación en el pleno de la Cámara de Representantes, la agencia Standard & Poor´s mantuvo la calificación soberana de México en ´BBB+´, con perspectiva negativa y dejó abierta la posibilidad de bajar la calificación si no hay un resultado positivo en el T-MEC y en el Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura.
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“Si no existen indicios de una mejora sólida es probable que el desempeño de la tendencia de crecimiento de México se compare desafortunadamente con el de sus pares, lo que debilitaría el perfil económico del soberano y se traduciría en una baja de calificación”, apuntó.
En tanto, el Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador manifestó su alegría por el avance en la ratificación en el Congreso norteamericano. “Es una muy buena noticia, es benéfico este acuerdo para el pueblo de Canadá, Estados Unidos y para nosotros los mexicanos. Estamos bien y de buenas”, aseguró en un video difundido en redes sociales.
Aunque la implementación del T-MEC es vista como algo positivo que ayudará a incentivar la actividad económica en México (que durante el último año ha permanecido estancada), recientemente se generó una controversia respecto a los acuerdos que suscribió México en el adendum del T-MEC el 10 de diciembre, los cuales posibilitan el establecimiento de panales laborales de respuesta rápida entre México y EU, y entre México y Canadá, en los que panelistas extranjeros podrán hacer verificaciones in situ en nuestro país.
Además, los panelistas mexicanos quedaron excluidos de dirimir controversias que presenten EU y Canadá por alguna violación al derecho de libre asociación y negociación colectiva por parte de alguna empresa en nuestro país.
Puesto que en el dictamen aprobado por el Senado mexicano, en los anexos 31-A y 31-B se indica que los gobiernos (o las partes) nombrarán a tres individuos para una lista cada uno, y por consenso designarán a tres individuos para una lista conjunta, quienes “no serán nacionales de México o de Estados Unidos”, tratándose del panel rápido entre nuestro país y la Unión Americana.
Igualmente, en el panel laboral de respuesta rápida entre México y Canadá, los tres panelistas que se elijan por consenso no serán nacionales de ambas naciones.
La Ley de Implementación también otorgará más de 840 millones de dólares para instrumentar diversas disposiciones del T-MEC, desde la asistencia para la implementación de la nueva reforma laboral en México, hasta plantas de tratamiento de agua en la frontera común mediante un mayor financiamiento del Banco de Desarrollo de América del Norte.
