Construye Leonel García puente entre el jazz y la música mexicana en “Amores pasados”, álbum que completará su trilogía con una revisión al cancionero ranchero; al mismo tiempo que traerá “Amor presente” a BC, disco que compartió con Audri Nix, Vicente García, Gaby Moreno y Benny Ibarra
Mil días después de girar en su reencuentro con Sin Bandera en un tour (“4 Latidos”) que recorre el continente entero al lado de Camila, el cantautor mexicano Leonel García Núñez de Cáceres, de 44 años de edad, retornará a Baja California para presentar “Amor presente” y los avances del álbum “Amor pasado”, para el cual citó a la comunidad fronteriza el 29 de noviembre en El Foro Jai Alai, para después continuar por Monterrey, Guadalajara, Mérida, Puebla, Pachuca, Guatemala, El Salvador, Ecuador, Perú y Estados Unidos.
“Sentí un dolor profundo en el corazón ponerle tanta pausa a mi carrera en solitario, que tanto amo y me llena de satisfacción por el detalle, arreglos, género y música. Quiero seguir alimentando el alma”, señaló quien suma más 30 años de experiencia en la industria de la música y actualmente promociona su versión de “Cielo rojo”.
“Estoy terminando un disco de música mexicana que completará la trilogía de los ‘Amores’: ‘Amor futuro’, ‘Amor presente’ y ‘Amor pasado’. Siempre he tenido un amor muy profundo por la música mexicana, pero tengo que confesar que prefiero las formas íntimas de interpretarla. Me parece que los compositores muchas veces las crearon con una guitarra y voz, en la bohemia como José Alfredo (Jiménez). Ya después incorporaron el mariachi en la cantina o a la hora de grabar el disco”, expuso.
“La interpretación era íntima, sufrida como cuando Chavela Vargas cantaba con José Alfredo en las parrandas en Garibaldi, digo, el compositor no pensaba la canción con mariachi, eso pasa después; él simplemente la canta así, por eso me quiero acercar a ese mundo de la interpretación íntima, de la bohemia, de lo que pasaba cuando el compositor la cantaba”, agregó García, quien para “Amor pasado” creó un disco mexicano, estructurado con trompeta, violín, guitarra y contrabajo, en una atmósfera íntima, parecida al bossa nova y jazz, con lo que brindará dimensión minimalista y sutil a temas como “Cielo rojo”, “Ella”, “Paloma negra”, “Libro abierto”, “Fallaste corazón” o “En el último trago”.
“Armamos una linda borrachera en el estudio de grabación para honrar el motivo de las canciones, y de pronto recreamos ese ambiente bohemio entre ron, mezcal, vino y tequila para adaptarlos a la modernidad. No será arrabal, pero sigue con esas penas de amores entre tequila y amigos. Es interesante cambiarle el sentido incluso a las letras, hacerlas introspectivas, desde un lugar más reflexivo, generando un espíritu festivo”.
Leonel incluyó un tema inédito de José Alfredo Jiménez, el cual tuvo que musicalizar junto a Pavel Cal, quien produjo el disco, trabajó con Juan Gabriel y conoce bien tanto el jazz como la música mexicana.
“Acercarte a estas canciones que has oído toda tu vida requiere mucho respeto, además de atender el llamado de la edad, y como artista, detener tu carrera para homenajear algo que te gusta. Es muy bonito detenerte y mirar de dónde vienes y a dónde vas. Cuando eres joven miras hacia adelante, hoy es mi tiempo de cuestionarme: ¿Qué oían mis papás, qué oía yo de niño?, y generar una cosa distinta basada en mi estilo, honrando la tradición con toda la pasión y emoción que solo tenemos en México y que nuevas generaciones puedan darle otra intención”, subrayó el intérprete de canciones como “Que lloro”, “Ella es” y “Para empezar”.
Referente al contexto de esa próxima producción, indicó que gracias a sus padres conoció las bohemias y lo que estas implicaban: el sentido del humor, los chistes, gritos y risas, pues considera que la música mexicana tiene que ver con cómo somos los mexicanos y la intensidad para expresar lo que sentimos.
En cuanto a sus proyectos alternos, sobre León Polar, comentó que es un producto dark y personal que tiene tatuado en sus brazos, que entiende que no es comercial y que sus temas no serán sencillos en sus conciertos, pero representa un canal para expresarse y, pese a no tener expectativas con esos discos, termina llamando la atención de ciertos públicos, pero no se vuelve importante para ellos.
Y en lo concerniente a Sin Bandera, Leonel García adelantó que se está trabajando “cómo y por dónde” para un siguiente disco que tenga una evolución natural.
“Estamos en la etapa de componer, de ver cómo se deben producir los temas, con quién. Sin Bandera gusta por la combinación de las dos personalidades, que somos muy distintos y que tuvimos la fortuna enorme de nacer como banda en una época donde eras internacional. Sin Bandera es un artista internacional, a diferencia de Leonel García, que está buscando salir de México y empezamos esta gira en solitario en Tijuana”, concluyó el siete veces ganador del Grammy Latino.
