Números rojos y un desorden en las finanzas públicas de Tijuana dejó la administración de Juan Manuel Gastélum Buenrostro, señaló el alcalde Arturo González Cruz, quien advirtió la posibilidad de recurrir a un crédito de 200 millones de pesos, a pagar a corto plazo.
En su primer día en la administración solo encontró 40 millones de pesos disponibles, y una deuda con proveedores a corto plazo, por de 230 millones de pesos.
El presidente municipal del XXIII Ayuntamiento de Tijuana dijo no extrañarle “este duro golpe a las finanzas”, asestado por el “Patas”.
“Nos quisieron dejar todo lo más complicado posible para que no pudiéramos cumplir con los compromisos con Tijuana”, agregó.
Respecto al empréstito que contempla adquirir para sufragar los compromisos financieros inmediatos, González Cruz anotó que podría ser liquidado con las participaciones federales próximas a recibir.
Acompañado del Tesorero Municipal, Víctor Cerda Romero, y del Consejero Jurídico, Salvador Gómez Ávila, el nuevo alcalde aseguró que pese a las condiciones en que recibió el gobierno, “los servicios públicos no se paralizarán”, mientras que el cobro y la realización de trámites ya fueron normalizados.
El tesorero, Víctor Cerda informó que de los 40 millones de pesos encontrados en caja, esta mañana se dispuso de 6.5 millones de pesos para el pago de un crédito cuyo plazo de pago vencía este 1 de octubre.
Los 33.5 millones de pesos restantes serán utilizados para pagos menores y la operatividad del Ayuntamiento, pero para mediados de octubre deberán de contar con al menos 35 millones de pesos para el pago de la nómina de los empleados, de ahí la necesidad de recurrir a un financiamiento que, a decir de Arturo González, su contratación “se va a licitar”.
