Al menos ocho presuntos miembros de la llamada “Tropa del Infierno”, perteneciente al Cártel del Noreste (CDN) -quienes portaban armas del uso exclusivo del Ejército y uniformes que suplantan la identidad de las Fuerzas Armadas-, murieron este jueves 5 de septiembre tras enfrentarse con elementos del Grupo de Operaciones Especiales del Centro de Análisis, Información y Estudios de Tamaulipas (CAIET).
Según lo informaron diversos medios locales, el enfrentamiento entre los presuntos delincuentes y elementos de la Policía Estatal de Tamaulipas ocurrió en la calle 7, de la colonia Valles de Anáhuac, en Nuevo Laredo, en un domicilio particular en el que intentaron resguardarse los cinco hombres y tres mujeres que minutos antes dispararon contra las autoridades.
En una camioneta tipo pick up, blindada, en la que se trasladaban los presuntos sicarios, quedó muerto uno de los agresores, mientras que cinco más fallecieron dentro de la casa y dos más afuera del domicilio particular. El equipo táctico y los 15 armas de alto calibre que usaban los supuestos miembros de la llamada “Tropa del Infierno”, fue asegurados por las autoridades estatales.
El pasado martes 27 de agosto, un menor de 16 años de edad falleció decapitado por una ráfaga de balas, en uno de los dos enfrentamientos que elementos de la Policía Estatal de Tamaulipas sostuvieron con supuestos integrantes de la llamada “Tropa del Infierno”, luego de que los civiles armados atacaron a las autoridades.
El primero de los enfrentamientos entre los hipotéticos sicarios y los policías estatales ocurrió cerca del cuartel militar de Nuevo Laredo, ataque donde fallecieron cuatro supuestos criminales. Otros siete supuestos miembros del mismo grupo delictivo murieron en otra refriega con las autoridades locales, con lo que sumaron once presuntos criminales fallecidos.
El cadáver decapitado del menor se pudo observar en una fotografía que circuló en las diversas redes sociales, donde aparece sentado, sosteniendo un arma larga, en la parte trasera de la cabina de una camioneta tipo pick up, en la cual se transportaban los siete supuestos sicarios que murieron en el segundo enfrentamiento con los elementos del CAIET.
Según lo informó la agencia estatal Notimex, el menor ingresó desde los 13 años de edad como miembro del crimen organizado, e incluso fue detenido por la Fuerza Tamaulipas en el año de 2015. Sin embrago, debido a ser menor, las autoridades judiciales lo pusieron en libertad.
El joven supuesto sicario tenía una melodía en el género musical rap, titulado ‘Comandante Chikitín’, en la que se narra sobre su ingreso a la delincuencia organizada. “No importa la edad para andar aquí jalando, yo soy un chavalo pero aquí ando laborando. ‘Juanito Pistolas’, así me han apodado”, se escucha en la canción.
El CDN es una fracción disidente de Los Zetas, que se disputa el territorio tamaulipeco con otras bandas criminales como Los Zetas Vieja Escuela y el Cártel del Golfo (CDG). El líder de “La Tropa del Infierno” está identificado únicamente como “El Werko”, quien estaría casado con una sobrina de Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, alias “El Z-40” y “El Z-42”, respectivamente, ambos en prisión.