Al anteponer la renta a la compra de equipamiento vehicular para áreas estratégicas de servicios públicos, obras e infraestructura urbana, Juan Manuel Gastélum Buenrostro entregará una administración sin equipo suficiente para la recolección de basura, vigilancia policiaca, supervisión de obras o desarrollo de infraestructura urbana. Junto con su periodo de gobierno, el 30 de septiembre de 2019 también vencen los millonarios contratos de arrendamiento de automóviles, maquinaria pesada, patrullas, camiones recolectores y de transferencia de basura
Además de los millonarios contratos adjudicados sin licitar para la renta de camiones recolectores de basura y patrullas -por los que pagó a Grupo Turbofin una contraprestación total de 239 millones 459 mil pesos- el gobierno de Juan Manuel Gastélum Buenrostro también asignó onerosos arrendamientos de maquinaria pesada y de inspección de obras.
Al igual que los convenios con Turbofin, la vigencia de la renta del resto del equipamiento vehicular vence el 30 de septiembre, día en que “El Patas” entregará a Arturo González Cruz la administración del Ayuntamiento de Tijuana.
En ese contexto, el XXIII Ayuntamiento que presidirá González Cruz arrancará con un marcado déficit de unidades para recolectar basura, realizar labores de vigilancia o para el desarrollo de obras e infraestructura urbana, el cual se observa principalmente en los departamentos de obras públicas y servicios públicos de la ciudad, y en las nueve delegaciones municipales.
Decidido a arrendar, Gastélum tampoco dispuso de presupuesto para dar el mantenimiento suficiente al equipamiento vehicular que recibió de la administración que le antecedió, el cual observa un marcado deterioro.
Respecto al equipamiento vehicular, el tesorero Ricardo Chavarría Morales advirtió que, en su arranque, la próxima administración municipal va a enfrentar “un déficit por la falta de unidades, el cual es enorme para el requerimiento que se tiene”.
Mientras que el Secretario de Desarrollo Urbano y Ecología (SDUyE), Everardo Lona, observó: “Hay delegaciones que no tienen nada; principalmente la Zona Este, que ni el personal suficiente tiene para poder manejarlo”.
SIN EQUIPO DE LIMPIA
“Con barredoras no contamos; en el primer año solo había una barredora funcionando, duraba dos semanas operando y tres meses descompuesta”, indicó el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología.
Para justificar el por qué la actual administración no renovó ese equipo, el funcionario expuso, “el problema es que comprar barredoras es muy costoso, aparte no hay gente que localmente haga los mantenimientos, y las partes para repararlas se tienen que importar de Estados Unidos”.
Además, “tampoco hay en la localidad renta de barredoras”.
El equipo que sí se ha logrado conservar para la operación de la Dirección de Servicios Públicos Municipales consta de 13 grúas para forestación, área para la que -en noviembre de 2017- se adquirió una máquina astilladora de ramas a un costo de un millón 205 mil pesos.
A ese equipamiento, el XXII Ayuntamiento añadió 85 mini camiones para el servicio de recolección de desechos domésticos, adquiridos con una inversión de 178 millones de pesos.
A las unidades compradas con recurso propio, se suman 130 camiones adquiridos por anteriores administraciones: modelos que van de 1998 al 2009, de los cuales 60 están activos y 70 descompuestos; los que están sin operar, el gobierno del “Patas” optó por no gastar en su reparación, al considerarlo algo “incosteable”.
Con ese equipamiento municipal, sumado a la renta de 42 camiones, el municipio puede proveer una cobertura en la recolección de basura del 86 por ciento, al lograr atender 847 colonias de la ciudad.
El secretario de SDUyE consideró que es en el equipo de transferencia de basura en el que se registra el principal déficit, al contar el Ayuntamiento con solo tres tractocamiones y tres cajas de su propiedad, mientras que 12 unidades más son también rentadas. Este equipo es necesario para la recepción de los desechos en los centros de transferencia y para su traslado al relleno sanitario, por lo que -de inicio- el próximo gobierno estará obligado a rentarlo para continuar con el servicio.
No obstante, el tesorero municipal, Ricardo Chavarría Morales, indicó que “la siguiente administración va a encontrar un Ayuntamiento mucho mejor que el que nosotros encontramos; no se van a preocupar por el tema de camiones, aunque mi teoría es que deben seguir comprando camiones”.
NI MAQUINARIA PARA OBRAS
La falta de equipo vehicular se observa en todas las dependencias municipales, anotó el tesorero municipal.
El déficit lo ubicó principalmente en las delegaciones municipales, las cuales, dijo, carecen de motoconformadoras, plumas, excavadoras, grúas, entre otro equipamiento vehicular, como es el del área de inspección.
El funcionario consideró que, para abatir este rezago, se requiere el compromiso de varias administraciones municipales, toda vez que “la siguiente tampoco va a tener la capacidad económica para superarlo al 100 por ciento”.
No obstante este marcado rezago, el gobierno de Juan Manuel Gastélum solo logró adquirir 45 vehículos tipo Nissan March, unidades que fueron asignadas para las áreas operativas, (compra en la que invirtió seis millones 584 mil 130 pesos).
En cuanto a maquinaria pesada para el desarrollo de obra pública, Everardo Lona López asentó que se lograron adquirir cinco maquinas Jetpacher para la Dirección de Obras e Infraestructura Urbana Municipal, aunque en los archivos municipales solamente existe registro de la compra de dos máquinas de ese tipo (a un costo conjunto de 559 mil 409 dólares).
Lona López subrayó que son las nueve delegaciones, principalmente las ubicadas al este de la Ciudad, las que carecen de equipamiento de maquinaria pesada para realizar las labores de mantenimiento de alumbrado y de obra pública.
“El problema es en las delegaciones municipales, que no cuentan con grúas, y las que cuentan con alguna hay que hacerle un mantenimiento mayor, reparación que es mucho más costosa que adquirir una; pero tampoco se tiene el recurso para ello.
Para alumbrado, hay delegaciones que tienen una grúa, pero no tienen el personal para operarla; otras tienen el personal pero no tienen la grúa”.
Y admitió, “lo que hicimos el año pasado y este fueron contratos de renta de equipo de grúa, con todo y personal -eléctrico y chofer-, para que no haya tanto problema de rezago de unidades”.
A nivel general, se arrendaron reencarpetadoras, retroexcavadora, camiones de volteo, motoconformadoras y grúas, entre otro tipo de maquinaria.
LOS CONTRATOS DE RENTA
De acuerdo a los contratos de arrendamiento entregados a Grupo Turbofin, S.A.P.I. de C.V. en 2017, durante este mes de septiembre de 2019 el gobierno de Juan Manuel Gastélum Buenrostro habrá terminado de pagar los 212 millones 551 mil pesos, por la renta de 40 camiones para la recolección de basura y 12 de transferencia.
La vigencia del convenio se determinó a partir de abril de 2017, hasta el 30 de septiembre de 2019, mismo periodo por el que se arrendaron 27 patrullas -12 van para el traslado de pasajeros y 15 pick up doble cabina- a un costo total de 26.9 millones de pesos.
Si bien el arrendamiento pagado a Turbofin ha sido el más costoso, no fue el único que realizó la administración del “Patas”.
Durante 2018 y 2019, su gobierno entregó -por adjudicación directa- otros contratos de arrendamiento, como los adjudicados a Renta Tur, S.A. de C.V., empresa denominada comercialmente Sixt Rent A Car y representada por Héctor Raúl Cota Rascón, a la que en 2018 se le pago un millón 467 mil 759 pesos por cinco meses de renta de 18 vehículos tipo sedán Aveo Chevrolet con los que se realizaría la “verificación y seguimiento de las obras del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social”.
En 2019, para el mismo objetivo, el XXII Ayuntamiento de Tijuana volvió a asignar un contrato de adjudicación directa a Renta Tur; también 18 automóviles tipo Sedán por un arrendamiento de cinco meses, pero esta vez a un costo de un millón 280 mil 707 pesos
Para poder atender el servicio de limpieza en los trabajos de levantamiento de basura que se acumula en las diferentes estaciones de transferencia, así como para la limpieza de vialidades, la administración del “Patas” adjudicó Construpaygo, S.A. de C.V. un contrato para la renta de dos mil horas de operación de retroexcavadora a un costo de un millón 40 mil pesos.
El pago de renta por hora de retroexcavadoras y camiones de volteo a Grupo Japa, S.A. de C.V. a un costo de 876 mil pesos, o el arrendamiento de maquinaria pesada para el desazolve de pluviales -a costo promedio por delegación de 876 mil pesos- son parte de otros contratos adjudicados de manera directa por el gobierno municipal en turno.
PRESUPUESTO DE MAQUINARIA PARA GASTO CORRIENTE
En 2018, la Dirección de Obras e Infraestructura Urbana Municipal (DOIUM), contaba con un presupuesto aprobado de 30 millones de pesos destinados a la compra de maquinaria y equipo de construcción, así como de adquisición de vehículos para el Departamento de Rehabilitación y Mantenimiento de Vialidades.
Argumentando falta de presupuesto suficiente para sufragar el gasto corriente, la administración de Gastélum optó por recortarle 20.9 millones de pesos.
A los departamentos de Señalamiento Vial y de Forestación y Panteones les fue eliminada el total de la partida que tenían asignada para la compra de maquinaria, equipo de construcción y equipo terrestre (la cual, en conjunto, sumaban dos millones de pesos).
A las nueve delegaciones municipales, el gobierno de Gastélum les recortó 11 millones de pesos, recurso que tenían asignado para compra de maquinaria y equipo de construcción.
En 2019, los montos asignados a estas dependencias fueron utilizados -en su mayoría- para el arrendamiento de maquinaria.