La artista visual e investigadora Mayra Huerta Jiménez impartió este jueves 15 de agosto la conferencia titulada “La fotografía en Tijuana”, en la sala Rubén Vizcaíno Valencia del Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC), como parte de las actividades del Archivo Histórico de la ciudad de Tijuana.
Doctora en Artes Visuales e Intermedia de la Facultad de San Carlos en la Universidad Politécnica de Valencia, Mayra Huerta (Orizaba, Veracruz, 1976) presentó un compendio de algunas de las actividades y colaboraciones más relevantes que ha concretado con otros artistas e instituciones de Tijuana, desde que llegó a vivir a Tijuana, en el 2008.
Catedrática de la Facultad de Artes en la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) Campus Tijuana, Huerta organizó su charla en cuatro ejes: creación y desarrollo de series y exhibiciones individuales o colectivas; colaboración en proyectos culturales; sensibilización hacia la producción de las imágenes; y, finalmente, proyectos de vinculación con artistas nacionales e internacionales.
Para empezar, la conferenciante compartió: “La fotografía yo la puedo dividir en tres conceptos: la imagen, el documento y la memoria. La fotografía, como todo mundo la conoce o la percibe, es una referencia de un aspecto de la realidad. Yo estoy trabajando la imagen a partir de pensar en la fotografía como un medio, y no como un fin”.
“¿Qué sucede con esto? Que la mayoría del trabajo que realizo lo pienso a partir de un discurso y no de un objeto; no solamente de tener una fotografía sino de entablar un discurso a partir de ideas, reflexiones que derivan en una imagen. Y ésta se puede modificar y no necesariamente tiene que estar trabajada en papel fotográfico o en impresión analógica, sino que puede ir más allá de esta derivación”.
Por otro lado, Huerta Jiménez señaló la capacidad que tiene la fotografía de convertirse en documento “objetivo” y artefacto de memoria, ya que registra la vida cotidiana de los sujetos y comunidades:
“En la idea de documento, pues la fotografía, como bien saben, siempre está documentando todo lo que hacemos cotidianamente, lo que estamos trabajando. Además, la fotografía y la documentación van muy de la mano, porque en algún momento, cuando surge a inicios del siglo XIX, pues precisamente empieza a documentar todo lo que sucede en ese contexto y además obtiene el carácter de objetividad que se ha estado cuestionando desde que surgió esa idea. Por otro lado, la memoria: del sujeto, de lo cotidiano, de lo que está haciendo, de cómo se crea como individuo y cómo se percibe en la identidad. Mucha gente que se dedica a la fotografía en muchos aspectos va armando todos estos discursos”.
“LO QUE LA CIUDAD ME DA ES LA IDEA DE MOVILIDAD”
Ganadora de la VII Muestra Fotográfica del Paisaje Natural de Baja California 2018 con el proyecto “Ancestral”, Mayra Huerta también compartió algunas de sus colaboraciones en exhibiciones y paneles con otros artistas de la región:
“En marzo de 2008 me invitan a una charla; hicimos un panel entre Ingrid Hernández, ‘Jofras’, Yuri Manrique y yo. Ángel de Alba me invita también a trabajar en la licenciatura de Diseño Gráfico en la Ibero. En aquel momento hice un escrito que hablaba de la presentación de los cuatro portafolios y de cómo éramos diversos. Yo había conocido a ‘Jofras’ porque él trabajaba en Foto Guanajuato, que fue otro de los festivales en los cuales yo estuve muy implicada en Guanajuato, en el Centro de la Imagen, y ahí fui conociendo también parte del trabajo de la gente de Baja California”.
“Hugo Lugo y Aldo Guerra, que son dos artistas que trabajan aquí en la ciudad, tuvieron la iniciativa de crear una galería que se llamaba ‘Name’ (Nuevo Arte Mexicano), y yo estaba fungiendo entre curadora pero también como artista; y tuve una exposición individual que se llamaba ‘Espacio C’ y una colectiva. Esta galería se ubicaba en bulevar Las Américas”.
La artista plástico también habló de algunos proyectos de vinculación como parte de su labor docente en la UABC: “Dando clases en la Universidad organizo esta exposición en la Universidad de Guanajuato, que es donde estudié mi licenciatura, y con una amiga y colega, Arely Vargas, hacemos este trabajo. Ella daba una clase de fotografía y yo daba una clase de fotografía entonces conjuntamos ambos grupos y exhibimos al mismo tiempo en Tijuana y en Guanajuato”.
Además, señaló la importancia de fomentar que los alumnos de artes participen de los procesos paralelos a la creación artística, como la curaduría o el montaje de exhibiciones:
“La idea de este trabajo fue que Daril Fortis, que fue mi alumno, y María José Crespo, entre otros, fungieran entre la curaduría, hicieran revisión y se hiciera el montaje. Más adelante Arely Vargas lo envió a la Bienal Internacional de Arte en Bolivia y quedaron seleccionados los alumnos y esas imágenes que vieron se fueron a exhibir hasta Bolivia”.
Finalmente, señaló la movilidad de Tijuana, su ambiente propicio para la creación y la atención que esta región acapara internacionalmente:
“Lo que a mí la ciudad me da es la idea de movilidad, puedo revisar mi trayectoria antes de llegar aquí y no había tenido tanta movilidad como desde que estoy en Tijuana. Es una ciudad a la que siempre están volteando la mayoría de las personas en todas partes del mundo. Aquí se construyen cosas porque son necesarias, porque no están. Y para mí ha sido muy significativo crear cosas que no están”, concluyó. (Laura Elvira Díaz/ZETA).