Felipe Calderón Hinojosa, presidente de México para el período del 2006 al 2012, afirmó ayer jueves 15 de agosto, que el incremento de la violencia durante su sexenio y en los años posteriores, tuvo como origen la estabilidad económica en México que permitió que el narcotráfico diversificara su “modelo de negocio” al vender la droga al “menudeo”.
“Es un fenómeno económico muy básico, México, a partir del Tratado de Libre Comercio [de América del Norte, TLCAN], empezó a tener un mayor poder adquisitivo. Al término de 30 años de inflación empieza a comprar más bienes y también más droga, aunque de una base muy pequeña”, aseguró el ex militante y presidente del Partido Acción Nacional (PAN).
El exmandatario nacional ofreció en Guadalajara, Jalisco, la conferencia ‘Los retos que enfrentamos’, a seguidores de México Libre, organización que busca constituirse en un nuevo partido político, con el apoyo de la esposa de Calderón Hinojosa, y excandidata presidencial, Margarita Zavala Gómez del Campo.
El ex presidente aseguró que durante su sexenio los grupos del crimen organizado pasaron de vender droga a Estados Unidos, como había sido “desde el siglo pasado”, a distribuirla en el territorio mexicano en bares, tiendas, taxis y en las calles.
Ese cambio en el “modelo de negocios” al vender la droga al “menudeo”, llevó al narcotráfico a buscar el control territorial, lo que derivó en “consecuencias letales para la seguridad”, ya que generó un incremento en los enfrentamientos con grupos rivales para ganar ese espacio, añadió.
“La clave del menudista es el control del punto de venta lo cual lo lleva a una necesidad estratégica que no tenía antes que es controlar el territorio, el pueblo o la ciudad y esta variable es el germen que detona la violencia tal como la conocemos hoy”, aseguró Calderón Hinojosa.
Todo ello se agravó con “la debilidad institucional crónica del Estado Mexicano” para tener una fuerza pública legítima “que ponga orden”, acotó el ex mandatario nacional, quien abundó que el problema de la violencia en México no comenzó con su decisión de “atacar frontalmente” a los criminales, sino “no haberlos enfrentado a tiempo, cuando era posible controlar más fácilmente” el problema.
Calderón Hinojosa dijo que a su llegada a la Presidencia en 2006 encontró que el crimen organizado se había “apoderado de muchos pueblos y ciudades” del país, además de que la policía estaba “absolutamente carcomida” por la corrupción o sometida por el crimen organizado mediante la “ley de plata o plomo”.
Además, el ex presidente señaló que las autoridades locales tenían la política de “no meterse con los delincuentes”, lo que facilitó “la captura del Estado”, dijo, para luego asegurar que durante su sexenio fueron incautadas 160 mil armas, de las cuales 85 por ciento fueron compradas legalmente en EE.UU. y logró “una baja constatable” de homicidios de 21 por ciento al final de su administración.
Por otra parte, Calderón Hinojosa llamó a sus simpatizantes a ser “activos y resistentes” ante el Gobierno del actual presidente Andrés Manuel López Obrador, y crear organizaciones para el fortalecimiento de los ciudadanos. Además, los llamó a organizarse y manifestarse mediante marchas y en redes sociales para evitar “el autoritarismo” y no dejar que la democracia en México se ponga “en riesgo”.
El pasado 1 de agosto, López Obrador afirmó que la situación de violencia por la que atraviesa México es consecuencia del fraude electoral de 2006, y acusó al exmandatario Calderón Hinojosa de haber atacado al narcotráfico sin atender las causas.
“Hundieron al país. Si no se hubiera hecho el fraude, no estaría el país como está. El fraude causó mucho daño”, expresó en su conferencia de prensa matutina, al acusar que “impusieron a Calderon y su primera decisión fue declarar la guerra al narco sin tener estrategia”, indicó el actual mandatario nacional.
“Fue pegarle un garrotazo a lo tonto al avispero. Eso desató la violencia que todavía se padece, muertos, desaparecidos, fosas clandestinas por el fraude de 2006”, acusó el político tabasqueño en respuesta a una pregunta sobre si su Gobierno procederá legalmente contra políticos de administraciones anteriores.
López Obrador reiteró que “ni contra ellos [procederemos], no odiamos ni somos rencorosos, además eso no resuelve nada, lo que estamos pensando es punto final y vamos hacia adelante; nosotros actuamos con ética, principios, ideales, para que entre todos llevemos a cabo la Cuarta Transformación”.
“Nada de consigna para afectar a nadie, pero la Fiscalía [General de la República] es autónoma, eso es lo que querían los conservadores, no sé por qué ahora están cambiando de parecer […], ya los procesos los está atendiendo la Fiscalía”, expresó el titular del Poder Ejecutivo Federal.
En respuesta a las declaraciones de López Obrador, el ex presidente Calderón Hinojosa negó ser responsable de la violencia en el país, además de que defendió su decisión de combatir al narcotráfico con las Fuerzas Armadas y afirmó que ganó las elecciones de 2006 de manera limpia.
El tema del fraude “es un complejo que ha acompañado a López Obrador una buena parte de su vida. Gané la elección limpiamente, con margen estrecho pero limpio, y él no ha mostardo una sola evidencia clara a las autoridades ni a la opinión pública de que haya habido fraude”, señaló el ex mandatario nacional.
En entrevista con la cadena Radio Fórmula, Calderón Hinojosa dijo que “si al presidente [López Obrador] le sirve echarme la culpa de todo lo que le pasa, adelante, pero si no, mejor que se dedique a trabajar en resolver los problemas del país y a hacerse responsable de su gobierno”.
-Con información de EFE.