Poco antes del mediodía de este lunes 22 de julio en el estacionamiento de Urgencias del Hospital General de Tijuana (HGT) se reunieron 7 ambulancias de la Cruz Roja, esperando a que les fueran devueltas sus respectivas camillas.
Esto es parte del panorama de crisis que se vive en el hospital, de acuerdo a información proporcionada por los mismos médicos, desde hace dos semanas no ha sido posible programar ninguna cirugía “electiva”, esto es aquellas que no se requieren de urgencia o que pongan en riesgo la vida del paciente por la falta de insumos y medicamentos.
La problemática con las camillas de Cruz Roja se ha mantenido desde hace poco más de un año, sin embargo por temporadas se mejoran los tiempos de devolución de las mismas y la espera para las unidades se disminuye. Hace poco más de una semana, el miércoles 17 de julio, una de las unidades arribó cerca de las 3 de la mañana a dejar a un paciente, pasaron doce horas y la camilla seguía en poder del hospital.
Los doctores comentaron a este Semanario que esta situación es lamentable, pero la “falta de voluntad por parte de las autoridades” es la que ha mantenido esta situación hasta llegar a un punto “insostenible”.
“Estamos peor que nunca”, sentenció el doctor Alberto Reyes, cirujano adscrito al hospital, añadió que para poder cumplir con la atención médica se han visto en la necesidad de entablar una red de apoyo con otros hospitales, con otros colegas que no pertenecen al hospital, incluso poner de su propia bolsa para tener la esencial, como las gasas y el hilo para las suturas, los catéteres para poner los sueros.
Los doctores afirmaron que actualmente el hospital cuenta con un 10 a 12 por ciento de abasto, reconocen que al hacer pública esta situación podrían lograr que las autoridades del sector salud les manden insumos para unos días mantenerse en casi el 50 por ciento del abasto, pero en pocos días volverían a los números rojos, a padecer carencias y poner el riesgo de los cientos de pacientes que acuden a recibir atención médica.
