Carlos Manuel Urzúa Macías renunció este martes a la titularidad de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), cargo que ostentaba desde el 1 de diciembre del 2018, nombrado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
A través de su cuenta de la red social Twitter, el ahora ex funcionario agradeció “la oportunidad de haber servido a México”, y anexó una carta en el cual indicó que “discrepancias en materia económica hubo muchas”, algunas de las cuales porque en la presente administración federal se han tomado decisiones de política pública “sin el suficiente sustento”.
Agradezco la oportunidad de haber podido servir a México. pic.twitter.com/aaa2cIa9uI
— Carlos Urzúa (@CarlosUrzuaSHCP) July 9, 2019
“Estoy convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea éste de derecha o izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco”, señaló Urzúa Macías.
“Aunado a ello, me resultó inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública. Esto fue motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente de conflicto de interés”, indicó el ex funcionario federal, como causas que lo orillaron a renunciar.
Urzúa Macías, de 64 años de edad, nació en Aguascalientes. Es licenciado y maestro en Matemáticas por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) y del Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados (CINVESTAV) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), respectivamente.
También es doctor en economía por la Universidad de Wisconsin, en Madison, Estados Unidos, y miembro de la Academia Mexicana de Ciencias. Se desempeñó como Secretario de Finanzas del Gobierno del Distrito Federal (GDF), de 2000 a 2003, cuando López Obrador fungió como titular del mismo.
ACUSACIONES EN CONTRA DE LA SHCP A CARGO DE URZÚA MACÍAS
Apenas el pasado 5 de julio, Alfonso Ramírez Cuelar, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, pidió a la SHCP “soltar” el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF 2019) aprobado por los legisladores, para así reactivar la economía del país y romper la “atonía” que ha caracterizado al primer semestre en el gasto público.
En entrevistas otorgadas a diversos medios, el diputado del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) indicó que es urgente romper la inercia con la que se está manejado el gasto, ya que esto está generando una debilidad presupuestaria en las dependencias y proyectos de gobierno.
Ramírez Cuellar señaló que la economía requiere un estímulo de forma inmediata y eso sólo se logrará si desde la SHCP y de la Oficina de la Presidencia de la República destinen los recursos que fueron asignados en el PEF 2019, porque sería inaceptable terminar el año con altos niveles de subejercicios.
“Estamos a tiempo y en posibilidades de que el gasto se empiece a soltar, con mayor fluidez, mayor celeridad, que se haga un esfuerzo, un nuevo esfuerzo de concertación con la iniciativa privada para elevar los flujos de inversión y que antes de que concluya el mes de julio, la Secretaría de Hacienda, la Oficina de la Presidencia, encabezadas por Carlos Urzúa [Macías] y Alfonso Romo [Garza], pudieran poner en marcha un proceso que permitiera que el segundo semestre de 2019 fuera un semestre económicamente mejor”, abundó el diputado de Morena.
“Urge en realidad una estrategia clara para el estímulo de la economía nacional. No nos podemos dar el lujo de tener tanto subejercicio, urge. Hay una especie de atonía presupuestaria en muchas dependencias que están con la urgencia de que el gasto se empiece a soltar. Las dependencias también deben hacer un esfuerzo por solicitar y por argumentar las solicitudes a la Secretaria de Hacienda”, precisó.
Antes, el 21 de mayo, Germán Martínez Cázares renunció a su cargo como director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, y acusó en un comunicado que algunos funcionarios de la Secretaría Hacienda y Crédito Público “tienen una injerencia perniciosa” en el IMSS.
Añadió que el presidente López Obrador “proclamó el fin del neoliberalismo, pero en el IMSS algunas injerencias de Hacienda son de esencia neoliberal: ahorro y más ahorro, recortes de personal y más recortes de personal, y un rediseño institucional donde importa más el ‘cargo’ que el ‘encargo’”.
Martínez Cázares denunció que “algunos funcionarios de Hacienda intentan una remodelación cosmética del IMSS, donde por ejemplo, se pretende reformar el Reglamento para colocar funcionarios administrativos en los Estados desde la Secretaría de Hacienda, y así anular a los Delegados que este Consejo Técnico aprobó. Buscan nombrar, en todo el país, una suerte de ‘delegados administrativos estatales’, fuera de este Consejo, para que ellos, en los hechos, administren desde lo local al IMSS”.
“Mientras se discute la remodelación del IMSS, muchos trabajadores siguen sin certeza laboral, otros sin contrato, algunas vacantes aumentan, el rezago en infraestructura es brutal, -en 2019 prácticamente está en 0% el avance de obras y el pago a proveedores-, los contratos y convenios de servicios se rezagan, y algunos están por vencerse sin horizontes de legalidad y eficiencia, las compras de equipamiento paradas, las reclamaciones y litigios aumentan; y si bien el abasto de medicamentos está garantizado, es precario y en algunos lugares pende de un hilo“, decía el documento de 10 cuartillas.
“Ese control del gasto tiene dos consecuencias fatales: una directa para el IMSS: pasillos de espera llenos de personas adoloridas y mal trato o retraso en la atención a pacientes; y un segundo efecto indirecto todavía peor: el fortalecimiento de los servicios de salud privados, que ocasionará mayor ‘gasto de bolsillo’ de las familias cuando sus seres queridos tengan un padecimiento”, abundó Martínez Cázares.