Funcionarios de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en Rosarito, esperan que maestros de la Secundaria General #7 Emiliano Zapata, recientemente amenazados de muerte, colaboren con su declaración.
Manuel Guillén, subprocurador, dice que están dado seguimiento al tema, pero requiere la cooperación de los maestros para avanzar, “estamos llevando a cabo la investigación. Se ha mantenido la comunicación con los directivo del plantel y se está trabajando de manera coordinada con el Sistema Educativo”.
Sin embargo algunos maestros no confían en la instancia procuradora y teman que de declarar, las amenazas se hagan una realidad. Esto a pesar que, de acuerdo a la autoridad, han tomado medidas para garantizar la seguridad de los maestros.
La amenaza fue realizada a los maestros, a quienes pidieron/exigieron la readmisión de unos ocho estudiantes que fueron suspendidos por peleas y drogas detectadas en operativos mochila.
De acuerdo a la delegada del SEE, Norma Ruíz González, éste sería el único plantel en Rosarito que pasa por una amenaza, y debido a la cual los maestros prefirieron suspender actividades escolares por 15 días, en lo que se reforzaba la seguridad de la escuela. “Esta situación se dio al contexto de inseguridad que prevalece en la comunidad alrededor de la escuela”, explicó.
La secundaria se encuentra en la colonia Plan Libertador, una de las de atención prioritaria para la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) y que durante mayo ocupó el tercer lugar de las 10 colonias con mayor índice delictivo de aquel municipio.
Previo a las amenazas, la subdirección del plantel ardió en llamas. Dos semanas después apareció la carta donde amenazaban con “masacrar” a los profesores en la próxima asamblea escolar. Por ello, se instaló vigilancia las 24 horas y se mejoraron las bardas perimetrales, para proteger también a los mil alumnos que todavía no concluyen su ciclo escolar.