A mis 92 años veo con desagrado que, no obstante, en las elecciones de junio el triunfo de Morena -se dice la “Esperanza de México”- fue aplastante, algunas cosas me molestan. Aunque se esperaba que en las siguientes elecciones volviera a ganar Morena, desagrada otra vez que en la campaña a gobernador se gastara tanto dinero en carteleras instaladas en las carreteras de Baja California y dentro de las ciudades, digo yo, exageradamente, y, no obstante, para dar las gracias volvieron a utilizar dichas carteleras, lo que considero un gasto exagerado que no tenía razón de ser, porque para dar las gracias bastaba hacerlo en un periódico o en la televisión.
¿Cuántos pobres en México no tienen qué comer? Para mí eso fue un dispendio, sin tomar en cuenta el gasto innecesario por las condiciones actuales. Ahora tratan de cambiar el periodo de gobierno comprando a los diputados con dinero, violando nuestra Constitución; o sea que no les importa violar nuestras leyes y la votación de los ciudadanos.
La esperanza que teníamos para México, queda tambaleando por estos procederes injustos. Echan a perder lo que consideramos iba a ser un cambio y no lo mismo de lo anterior: corrupción e imposiciones.
Ya está entrando gente corrupta de otras partes, que no deberían aceptar por su comportamiento en sus anteriores partidos.
Atentamente,
Guillermo Domínguez Salazar
69 años al servicio de la comunidad
Ensenada, B.C.