Aunque seguramente dirán en la Cuarta Transformación en Baja California, que pueden cambiar la Ley, por el momento el licenciado Guillermo “Titi” Ruiz Hernández no califica para ocupar la posición de fiscal general del Estado como es el deseo del gobernador electo Jaime Bonilla Valdez. A pesar que en la dinámica de una fiscalía autónoma esa designación recae en el Congreso del Estado, donde por cierto el tema está atorado por intereses personales, partidistas y políticos de los actuales legisladores en la siguiente conformación de la legislatura local, Movimiento Regeneración Nacional y sus aliados tendrán la mayoría calificada con 17 diputados, lo cual, efectivamente, les dará manga ancha para hacer los cambios constitucionales que se les antojen. Pero por lo pronto, considerando los requisitos inscritos en la Ley para ser elegible procurador general de Justicia del Estado, cargo que sería suplido por el del fiscal general del Estado, Ruiz no cumple con uno ellos. De hecho con el requisito II: “Tener cuando menos treinta y cinco años de edad, y no más de sesenta y cinco, al día dela designación”. A saber, el cercano a Bonilla sobrepasa los 65 y casi llega a los 70. El resto de los requerimientos no son problema para el abogado, quien también, de acuerdo a Bonilla, cuenta con la venia del Presidente Andrés Manuel López Obrador para integrarse al gabinete del próximo gobierno en BC.
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