Estados Unidos revertirá el veto que impuso contra la compañía tecnológica Huawei y permitirá que las compañías estadounidenses puedan volver a vender material a la empresa china, según lo confirmó este sábado el presidente Donald Trump, tras su reunión con su homólogo chino, Xi Jinping, en Osaka, Japón, durante la cumbre del G20.
“Hemos mencionado Huawei. Dije que ese tema tendremos que guardarlo hasta el final [de las negociaciones comerciales que ambas naciones han acordado ahora retomar, tras interrumpirlas en mayo]”, indicó el mandatario estadounidense durante una conferencia de prensa al finalizar su participación en la cumbre del G20.
Pero “una de las cosas que permitiré, no obstante, es que vendamos y enviemos a Huawei una gran cantidad de productos que emplean en muchas de las cosas que ellos fabrican. Y he dicho que perfecto, que seguiremos vendiéndoles esos productos”, acotó Trump.
“Estamos hablando de equipamiento que no suponga un gran problema para la seguridad nacional”, indicó el presidente de EE.UU., cuyo Gobierno había incluido a Huawei en una lista negra -Entity List- de empresas a las que considera peligrosas.
Como consecuencia de dicha medida, las empresas estadounidenses no podían, por ley, vender tecnología ni componentes a Huawei. Después del anuncio, Google dio a conocer que dejaría de suministrarle software, mientras que otras compañías siguieron con anuncios similares sobre semiconductores y otros componentes.
Aunque inicialmente la medida debía entrar en vigor de inmediato, la Casa Blanca decidió retrasar su aplicación al 19 de agosto. Las empresas estadounidenses habían pedido tiempo para adaptarse a la pérdida de un cliente con un presupuesto anual para compra de componentes de 70 mil millones de dólares, de los que 11 mil mdd se dedican a la adquisición de productos de EE.UU.
El Gobierno de China respondió con el anuncio de la creación de una lista similar, en la que incluiría a las empresas estadounidenses que dejaran de colaborar con compañías chinas por motivos ajenos al interés estrictamente comercial.
Trump indicó que la decisión de permitir a Huawei que compre en el mercado estadounidense no significa que vaya a retirar a la compañía de la lista negra, sino más bien, es una simple moratoria en su aplicación, que abordará la semana próxima —”lunes o martes”— con los responsables del Departamento de Comercio de EE.UU.
La situación de Huawei en Estados Unidos “hemos acordado dejarla para el final”, abundó Trump. “No vamos a abordarla con el presidente Xi aún”, afirmó el mandatario estadounidense.
Estados Unidos y China acordaron retomar las conversaciones interrumpidas en mayo, cuando Pekín acusaba a Washington de exigirle medidas que se inmiscuían en su soberanía nacional, y el Gobierno de Trump responsabilizaba al de Xi de haber renegado de compromisos para facilitar el acceso de empresas extranjeras a su mercado.
Hasta el momento, no se ha anunciado una fecha para retomar dichas negociaciones. Tampoco se han dado un plazo para concluirlas.
Estados Unidos también ha aceptado no imponer aranceles adicionales sobre productos chinos, como había amenazado Trump antes de la cumbre. A cambio, ha presentado a China una lista de productos agrícolas de los que quiere que país asiático aumente sus compras.
-Con información de El País.
