Mariel Colón, abogada de Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias el Chapo, rechazó ayer domingo las afirmaciones de la oficina del fiscal federal Richard Donoghue, de que el narcotraficante sinaloense podría tratar de escapar del Centro Correccional Metropolitano de Manhattan, donde espera la sentencia que le será dictada para el próximo 25 de junio, enfrentando una posible cadena perpetua.
Durante una presentación judicial, la litigante le pidió a Brian M. Cogan, juez federal de Brooklyn, que permita que su cliente haga ejercicio al aire libre dos horas a la semana, y dijo que el confinamiento solitario de Guzmán Loera, sin exposición a la luz solar o al aire fresco, es “antinatural e inhumano”.
Colón había expresado su preocupación por las condiciones de reclusión de Guzmán Loera, en una carta enviada el 11 de mayo, al juez de distrito de Estados Unidos Brian Cogan.
Los fiscales respondieron el 23 de mayo que la solicitud debía ser denegada porque la única área de ejercicio al aire libre para presos de alto riesgo estaba en el techo, donde el capo sinaloense, de 61 años de edad, podría enviar señales a cómplices o planear un escape.