El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró este lunes que no hace acuerdos “en lo oscurito”, ello tras ser cuestionado sobre acusaciones de que hay un pacto para devolver bienes y cuentas bancarias confiscadas a Elba Esther Gordillo Morales, ex secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
“Nosotros actuamos a partir de principios, tenemos ideales, tenemos autoridad moral porque sabemos que de esa manera se puede tener autoridad política, no somos iguales a los conservadores y a sus voceros, somos distintos, no hacemos nosotros acuerdos en lo oscurito, no nos prestamos a ninguna componenda, no estamos al servicio de ningún grupo de interés creado”, afirmó el mandatario nacional.
“Es un Gobierno [el de López Obrador] nuevo que surge del pueblo y que tiene como propósito acabar con la corrupción, la impunidad, con el influyentismo con todas las lacras de la política, se trata de ir entre todos aunque no lo quieran los conservadores, la transformación de México, la cuarta transformación del país”, indicó.
La Fiscalía General de la República (FGR) le devolvió a Gordillo Morales los bienes que le había confiscado en 2013 -entre ellos 7 cuentas bancarias, 3 inmuebles, un lote de libros, obras de arte y 3 vehículos-, en el marco de la investigación que llevaba en su contra por los delitos de lavado de dinero y delincuencia organizada.
Según el acta de la sentencia, la FGR restituyó a la líderesa magisterial sus siete cuentas bancarias congeladas –cuatro en BBVA Bancomer, dos en Banamex y una en Santander–, así como tres inmuebles: uno ubicado en calle Galileo número 7, en Polanco, otro en el lote 29 del predio Prados de la Montaña del desarrollo inmobiliario Bosques de Santa Fé, en Cuajimlpa, y el tercero en General Riquelme 42, en la alcaldía Gustavo A. Madero.
Asimismo, la Fiscalía también le devolvió a Gordillo Morales tres vehículos: un Chrystler Desoto, modelo de 1936, un Jeep Grand Limite de 2005 y un Ford Mustang modelo 1981; así como libros y sus colecciones de obras de arte.
Según el abogado de Gordillo Morales, citado hoy en el periódico Reforma, “actualmente no existe ningún asunto activo en contra de la maestra ni posibilidad del ejercicio de la acción penal, razón por la cual se trata de un asunto totalmente concluido y, por tanto, la maestra ya no enfrenta ninguna acusación penal”.
El lunes 20 de agosto del 2018, justo al arranque del Ciclo Escolar 2018–2019, Gordillo Morales ofreció una conferencia de prensa, en la que dijo fue víctima de “una persecución política y acoso en su contra”, pero que, sin embargo, recuperó su libertad y la reforma educativa que promulgó Enrique Peña Nieto -al que nunca mencionó por su nombre- “se ha derrumbado”.
La ex secretaria general del SNTE abundó que fue blanco de “acusaciones falsas para hacerme ver culpable de un delito que no cometí […] Soy inocente y doy a conocer a ustedes lo que justifica judicialmente el acuerdo”, dijo, para luego levantar un documento.
Era el expediente 156/2018, que el magistrado Miguel Ángel Aguilar López, del Primer Tribunal Unitario del Primer Circuito en Materia Penal de la Ciudad de México, sobreseyó el pasado 7 de agosto del 2018, tras permanecer 5 años y 6 meses en prisión, acusada de delincuencia organizada y lavado de dinero por mil 978 millones de pesos.
Gordillo Morales fue secretaria general del SNTE del 24 de abril de 1989 hasta el 26 de febrero de 2013. Aunque siempre lo negó, también dirigió de facto el Partido Nueva Alianza (Panal), fundado por ella. Asimismo, fungió como la secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI, del 2002 al 2005, junto a Roberto Madrazo Pintado, quien era el presidente.
Luego contendió por la presidencia nacional de dicho partido, en las elecciones internas celebradas después de que el tabasqueño perdiera en los comicios por la Presidencia de México, en 2006. Tras su derrota, la maestra renunció a su cargo como secretaría general y denunció a Madrazo Pintado de haberse apoderado del partido y de intentar asesinarla.
El 13 de julio de ese año, la Comisión de Justicia Partidaria piista expulsó a Gordillo Morales, tras acusarla de hacer política dentro de un partido diferente al que militaba: el recién constituido partido Nueva Alianza.
Pese a la gravedad de los delitos, en los hechos Gordillo Morales nunca estuvo en una celda, porque fue internada en una habitación de la Torre Médica del Reclusorio Femenil de Tepepan, en la Ciudad de México, para atenderse de sus padecimientos de salud, entre ellos hepatitis C, tener un sólo riñón e hipertensión.
El entonces titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, dijo que la entonces lideresa sindical realizó operaciones de desvío de recursos, que superaban los 2 mil millones de pesos, presuntamente de las cuotas que pagaban los docentes a su organización gremial.
Dichos recursos, señaló el entonces procurador, se emplearon para pagar cirugías, mantenimiento de aeronaves, entrenamiento de pilotos, pagos de tarjetas de crédito y compras en una tienda de artículos de lujo de Estados Unidos.
“De 2008 al 2011 se desviaron sistemáticamente recursos de las cuentas de los trabajadores de la educación, a cuentas de personas físicas que, posteriormente, fueron retiradas mediante cheques de caja y transferencias, triangulando recursos a cuentas de personas físicas y morales nacionales y extranjeras”, indicó Murillo Karam.