Ante la polémica generada por la posible suspensión de apoyos económicos del Gobierno Federal hacia las asociaciones civiles, Marta Elena Beltrán Gudiño, directora de la Ciudad de los Niños, declaró que esto hace indispensable el apoyo entre los mismos organismos de la sociedad civil.
La Ciudad de los Niños fue fundada en 1992 y desde entonces ha funcionado como un albergue que brinda ayuda integral a menores en abandono o en riesgo de vulnerabilidad, también cuentan con la opción de una estancia de medio tiempo para madres trabajadoras.
“Es definitivamente indispensable para poder seguir funcionando, el apoyo entre asociaciones civiles, y para poder seguir brindando los servicios que hasta ahora hemos puesto a disposición de la comunidad más vulnerable”, añadió Beltrán.
Los vínculos y las alianzas con otros organismos, afirmó, ha permitido que la Ciudad de los Niños salga adelante sin importar si cuentan o no con el apoyo constante de cualquier entidad gubernamental.
El pasado sábado 23 de marzo se dio testimonio de la colaboración de esta asociación con el Club Rotario de Tijuana, para el beneficio de 10 menores de edad que requerían de un auxiliar auditivo para mejorar su calidad de vida.
Cuando el pequeño Gadiel cumplió cinco años le detectaron hipoacusia, o sordera parcial, lo que le dificultó el ingreso a preescolar y su madre tuvo que inscribirlo a un Centro de Atención Múltiple (CAM) para que iniciara con su educación básica.
Su madre, Rosalba Soto, compartió que durante tres años estuvo buscando la ayuda necesaria para que su hijo pudiera desarrollarse de una mejor manera y así llegó a la Ciudad de los Niños y conoció el programa de donación de auxiliares auditivos.
Desde el año pasado, según comentó la madre de familia, el menor también recibió por parte de la asociación terapia de lenguaje en donde “les enseñan a comprender lo que nosotros les hablamos y a hablar ellos mismos”.
La directora de Ciudad de los Niños agregó que este programa cumplió su primera década en funcionamiento, en éste profesionistas y expertos en lenguaje han ayudado a más de 500 niños y niñas con discapacidad auditiva.
Por otro parte, detalló que llevan cerca de 24 jornadas, una por año, de donación de auxiliares auditivos en colaboración con las Damas Rotarianas del Club Rotario, menores con discapacidad auditiva reciben en donación –completamente gratis- un aparato que les permita aumentar su capacidad de escucha.
“En ocasiones el menor necesita más de un aparato, uno para cada oído, o una diadema especial. Estos son aparatos muy costosos que las familias de escasos recursos no pueden pagar, pero en conjunto con las Damas Rotarianas podemos ayudarlos a mejorar la calidad de vida de sus niños”, dijo Beltrán.
