La violencia homicida creció en Tijuana con el cambio de Gobierno Federal. Después de tres meses de Despliegue Territorial, la administración de Andrés Manuel López Obrador apenas ha podido lograr que la incidencia mortal se mantenga en los mismos niveles en los que la dejó Enrique Peña Nieto. Las fuerzas federales solo están haciendo acto de presencia, las capturas importantes siguen a cargo de la PEP y la flagrancia es responsabilidad de la Policía Municipal. Los nombres de los cabecillas criminales generadores de violencia permanecen, incluso se sumaron tres operadores a la pugna: Cristian Rodríguez y Rosario Sánchez, del CJNG, y Víctor Bedolla, de Sinaloa
Catorce asesinatos entre las siete de la tarde del miércoles 24 y las siete de la mañana del jueves 25 de abril, ha sido la cifra más alta de ejecuciones contempladas en las estadísticas mortales del mes, que acumula 148 cadáveres en Tijuana. Seis fueron baleados, tres muertos a golpes y torturados, cuatro incinerados y uno desmembrado.
El mismo jueves 25, tras conocerse el aseguramiento de 18 mil plantas de amapola y la captura de dos hombres y una mujer presuntamente involucrados en varios homicidios, a las diez de la mañana, en la central de radio se recibió una amenaza por parte de “El Mencho” entre referencias fálicas: “Vamos a matar a todos los policías si no se calman”.
Esta ola homicida elevó los dígitos a 6.1 muertos por día, y la proyección de terminar el mes con más de 184 muertes dolosas. Muy por encima de la mejoría presumida en los meses de febrero y marzo por el Gobierno Federal, con promedios de cinco asesinatos diarios.
Al cierre de esta edición, Tijuana sumaba 663 ejecuciones en 2019, y 883 asesinatos dolosos en lo que va del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
En este contexto, el Despliegue Territorial Permanente implementado en la ciudad dentro del Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018-2024 en las nueve delegaciones de Tijuana y sus efectos disuasivos por la presencia de los 600 elementos, están siendo insuficientes.
De hecho los retenes, operativos más visibles de esta estrategia, resultan inoperantes de acuerdo a la incidencia. Por ejemplo, “el retén que está a la entrada de la zona dorada de la delegación de Playas no lo han querido quitar, a pesar que las estadísticas de homicidios demuestran que no está donde hace falta. Donde se necesita en esa delegación es en el Soler, Los Laureles, Miramar y Las Flores, pero es una orden que viene de México, y lo mismo sucede en otras zonas”, refirió uno de los investigadores integrados a las Mesas de Pacificación.
“Lo bueno es que los militares están abiertos a las propuestas de acciones que sí den resultados, y los representantes locales del Gobierno Federal están conscientes de que ante los resultados limitados, ya se requiere cambiar la estrategia y acciones adicionales, fue parte de lo que se comentó a mediados de la presente semana, pero aún no se definen”, afirmó.
El número de sujetos capturados en flagrancias y con orden de aprehensión, son otra clara evidencia de lo limitado de los resultados de estos 600 elementos adicionales. Estadísticas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en Tijuana, muestran que en noviembre de 2018, antes de iniciar la administración federal de López Obrador, se capturó a 791 delincuentes en flagrancia y 136 con órdenes de aprehensión; en marzo de 2019, después operativo permanente, las cifras siguieron prácticamente iguales, con 742 criminales flagrantes y 119 con orden de aprehensión.
Adicionalmente, a punto de cumplirse tres meses del despliegue, no se ha registrado actividad pública de la Unidad de Inteligencia Financiera contra las finanzas de los líderes, lava-dólares ni operadores secundarios de los cárteles locales. Tampoco se ha dado luz verde a los operativos de inteligencia de la Policial Federal.
Al punto que la recaptura del 17 de abril de Marco Tulio Carrillo Grande, ex policía municipal señalado e investigado por agentes federales por presuntos nexos con el Cártel de Sinaloa, “identificado como jefe de sicarios, ubicado como segundo al mando” de los hermanos Arzate García y detenido por el delito federal de posesión de armas y un kilo de metanfetamina, debieron realizarla elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP), apenas con apoyo de la División de Inteligencia de la Policía Federal.
MISMOS CÁRTELES, MISMAS ZONAS
Mientras los homicidios revelan un repunte, las acciones del Despliegue Territorial y la anunciada inteligencia tampoco han sido útiles hasta el momento para modificar las áreas de alta incidencia y lograr órdenes de aprehensión en contra de los operadores de los cárteles que están generando esta violencia
En la cifra acumulada, las colonias que concentran las cuotas de muertos siguen siendo Sánchez Taboada y Camino Verde en la delegación Sánchez Taboada; Villas del Prado, Los Valles y Palma Real en Natura; Tres de Octubre, Jardines de la Mesa, Cañón del Sainz, Delicias, Villas del Álamo en Los Pinos; Floridos, El Laurel, Ejido Francisco Villa, Villas del Campo, El Niño y Valle Redondo en Presa Rural; Laureles, Miramar, Las Flores y Soler en Playas; Nueva Tijuana y Las Torres en Centenario; y Buenos Aires Sur en Cerro Colorado.
Las células identificadas de los cárteles De Sinaloa (CDS), Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Arellano Félix (CAF), continúan en la disputa según declaraciones de personas detenidas por narcomenudeo:
En el pleito por La Presa, aparecieron nuevos personajes: María del Rosario Sánchez “La Charo”, enfrentada con su gente a Víctor Manuel Bedolla Torres “Don Vic”, del Cártel de Sinaloa.
En La Presa Rural y Los Pinos, José Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”, de la mafia de Sinaloa, contra Rodolfo López Arellano “El Cabo 30”.
En Natura, los matones de Edgar Alejandro Herrera “El Caimán”, del CJNG, están enfrentados con “Don Vic” (CDS). Hace tres meses su contrario era José Loreto Capoema “El Versi”.
Ahora “El Versi” (CDS) está encargado de pelear la zona de Sánchez Taboada contra Héctor Manuel Morales Guzmán “El Gallero”.
En Otay Centenario se pelean los operadores de René Arzate “La Rana”, del CDS, contra Israel Alejandro Vázquez “El 50” del CJNG y Pablo Edwin Huerta Nuño “El Flakito”, del CAF.
En San Antonio, el pleito por las calles es entre Edgar Morán Zavala “El Turbo”, del CDS, y otro delincuente recientemente identificado como Cristian Rodríguez y el apodo de “El Búho”.
En Zona Centro, donde se estaba enfrentando la gente de “Los Monitos” Toscano Rodríguez, varios de ellos recientemente asesinados, Alberto Ávila Alvarado “El Chacal”, quien representa a esta célula del CAF, pusieron en pausa su pelea con los representantes del CDS: Luis Arturo Jain Peña “El Arcángel” y Francisco Javier Rabadán Gudiño “El Aguacate”, para bloquear juntos el ingreso del CJNG.
Ninguno de los hombres y la mujer antes mencionados, tiene órdenes de aprehensión pendientes por delitos del fuero común o federal.
CONTENCIÓN Y APREHENSIONES QUE HAN IMPACTADO LA INCIDENCIA
Consultadas, autoridades locales informaron que la baja de la incidencia en abril en zonas como Natura, está relacionada directamente con la captura de tres integrantes de una célula de siete homicidas del CDS dedicados a secuestrar, matar y desmembrar gente.
Esa región contemplaba un promedio de veinte asesinatos mensuales, tras la búsqueda y captura de esta célula de matones, la estadística del me en curso bajó a ocho asesinatos dolosos en la zona.
Los aprehendidos fueron Luis Manuel Orozco Alanís “El Tatuado”, Luis Fabián Segura Ortiz “El Bolillo” y Luis Ángel Gurrola Carranza “El Mudo”, quienes junto con otros cuatro sujetos, incluido el cabecilla -en proceso de captura-, fueron relacionados con la muerte violenta de un no identificado el 27 de junio de 2018 en el fraccionamiento Los Valles.
También se les investiga por el asesinato de Jessica Brenda Madrigal Smith “La Güera”, de 30 años, perpetrado el 17 de enero mientras caminaba sobre la calle Valle del René del fraccionamiento Los Valles. Asimismo, el homicidio y desmembramiento de Héctor Alejandro Roussel Herrera en Las Delicias; algunas partes de su cuerpo fueron tiradas detrás de las privadas de Ke Casas el 2 de febrero.
De igual manera, indagan su involucramiento en el asesinato a balazos de Felipe Velázquez Velarde en un expendio de cervezas de Plaza Las Delicias el 12 de marzo. En estos casos hubo testigos o señalamientos.
Otra aprehensión que impactó fue la de David López Jiménez “El Lobo” y/o “El Cabo 20”, operador criminal en Sánchez Taboada primero para el CJNG y en más recientes fechas para el CAF con José Ángel Roque García “El Roque” y Pablo Huerta Nuño “El Flakito”. Lo capturó la PEP en Mexicali por posesión de armas y droga.
La detención del ex policía municipal Marcos Gerardo Carmona Nila por su participación en el homicidio de Ramiro Hernández Martínez “El Mala” en la delegación Sánchez Taboada el 2 de febrero, también fue clasificada como de impacto, en referencia a que estos hombres forman parte de células homicidas muy activas.
LA DANZA DE LOS NÚMEROS EN TORNO AL DESPLIEGUE TERRITORIAL
De acuerdo a estadísticas de la Secretaria de Seguridad Pública del Estado, en el último mes del gobierno de Enrique Peña Nieto, la incidencia de homicidios en Tijuana fue de 6.6 muertos al día. En diciembre, el primer mes de gestión de Andrés Manuel López Obrador, ante la ausencia de definición de la estrategia federal y la cancelación de algunas acciones, la cifra subió a 7.19 ejecuciones diarias.
Caen dos hombres que cuidaban más de tres hectáreas de amapola en Tijuana
El martes 23 de abril, Brayan Ernesto Cazares Quiroga, de 20 años de edad y José Gustavo Astorga Cazares, de 17, fueron detenidos por agentes de la Policía Estatal Preventiva tras custodiar con armas largas un plantío de amapola de aproximadamente tres hectáreas en el Ejido Mesa Redonda, al Este de Tijuana.
Ambos, originarios de Badiraguato, Sinaloa, portaban un arma AR-15, abastecida con dos cargadores con cinco cartuchos útiles calibre 223 cada uno; además de un arma de fuego tipo rifle calibre 22, abastecida con un cargador con cinco cartuchos útiles calibre 22.
En el predio, resguardado por la Fiscalía General de la República, se destruyeron aproximadamente 18 mil plantas de amapola, mientras que los aprehendidos fueron puestos a su disposición.
A partir del 4 de febrero de 2019, con el arranque del Despliegue Territorial Permanente de 600 elementos, la Federación prometió resultados en dos meses. En marzo la estadística había disminuido a 4.8 asesinatos cada 24 horas, sin embargo, en los primeros 25 días de abril, la cifra mortal volvió a ascender: 6.16 muertos diarios. La proyección es terminar el mes con un promedio de 184 asesinatos dolosos, prácticamente 40 muertos más que los 145 cadáveres que se registraron en el segundo mes del año, cuando la estrategia inició su operación.
El segundo delito que contabiliza la Federación en las juntas mañaneras de seguridad y robo de auto, sin embargo, las estadísticas federales dadas a conocer por AMLO el 10 de abril, indican que se están basando en números distintos a los publicados en el portal de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. Durante febrero, cuando inició el Despliegue Territorial, en Tijuana se denunciaron 886 autos robados -31.6 por día- y, conforme al reporte de la Federación, solo fueron 638.
Más allá de la manipulación o errores en las estadísticas, el robo de autos registró una reducción, pero únicamente se regresó a las cifras que se tenían en tiempos de Peña Nieto. En noviembre de 2018, con 665 denuncias, eran 22.1 autos robados al día; en diciembre, con la nueva administración creció a 24.7; en febrero de 2019 detonó a 31. 6 por día y en marzo se contabilizaron 21.5 diarios. Las estadísticas de abril no se han hecho públicas.
El robo a casa habitación pasó de 3.8 denuncias diarias en noviembre, a 4.5 en diciembre de 2018, para regresar al promedio de 3.8 en marzo; en noviembre, el robo a comercio se estimó en 6.9 denuncias por día, en enero de 2019 subió a 8.7 diarios y en marzo se registraron 4.7 denuncias cada 24 horas. Mientras las lesiones dolosas bajaron de 5.7 por día con Peña Nieto, a 4.7 diarios en marzo con López Obrador.
Vinculan a proceso a “El Marlon” del Cártel de Sinaloa
Marco Tulio Carrillo Grande “El Marlon”, de 50 años de edad, fue vinculado a proceso por delitos federales, confirmó la Fiscalía General de la República.
Quien fuera policía municipal de Tijuana por 15 años, fue asegurado por elementos de las policías Estatal Preventiva (PEP) y Federal el 17 de abril en la colonia El Florido de Tijuana, por delitos contra la salud y portación de arma prohibida.
Identificado como jefe de sicarios del Cártel de Sinaloa y como segundo al mando por debajo de Alfonso Arzate García “El Aquiles”, operando en Tijuana y Playas de Rosarito, a “El Marlon” se le aseguró un kilo de metanfetamina; un fusil tipo R-15 abastecido con diez cartuchos calibre .556; una pistola Glock calibre 9 milímetros (ensamblada) abastecida con ocho cartuchos; así como un vehículo sedán Ford Fusión 2009.
El originario de Jala, Nayarit, tiene antecedentes de ingreso penitenciario en 2016 por delincuencia organizada, averiguación previa por abuso de autoridad (segunda en 2007), orden de presentación cumplida (2001), denuncia al 089, mención en narcomanta como lugarteniente de “El Aquiles” (2015); además de fichas en la PEP por aseguramiento de armas (2014) y presentado (2013), visita penitenciaria a Emilia Pimentel Gómez como (concubina) por el delito de posesión de cartucho y acopio de armas (2010) y faltar al respeto a servidor público (2011).
Carrillo Grande es uno de los responsables de la balacera del palenque Póker en Ensenada, ocurrida el 23 de enero de 2016 con saldo de cuatro muertos y 14 heridos, cuando sicarios del Cártel de Sinaloa intentaron asesinar a Gabriel Ayala Fonseca “El Tres Animales”, lugarteniente del Cártel Arellano Félix frente a más de 400 personas.
De acuerdo a datos obtenidos por ZETA, al sicario se le relaciona con varios miembros de Sinaloa, entre ellos los hermanos Arzate García, los de apodo “El Aquiles” y “La Rana”. Su nombre ha figurado en mantas y cartulinas en distintos puntos de la ciudad. Aunque niega cualquier vínculo con células del narcotráfico.