“Nada de que se va o que lo meten 10 meses a la cárcel, le vamos a quitar sus propiedades, vamos a ir sobre sus bienes mal habidos, y va tener que justificar que con su salario de diputado, o ex presidente municipal o de gobernador, le alcanzó para comprar todo eso”, declaró esta mañana Jaime Bonilla Valdez, candidato a la gubernatura por la alianza Juntos Haremos Historia.
De llegar a ganar la gubernatura de Baja California, el candidato de la alianza encabezada por MORENA-Transformemos-PT y PVEM, se comprometió a que solicitará que el actual gobernador del estado, Francisco Vega de Lamadrid, demuestre de dónde salió el recurso para pagar las propiedades con las que cuenta, y de no poder hacerlo, serán recuperadas.
Esto lo mencionó durante su participación con el Grupo Político Tijuana, la mañana de este sábado, en donde también señaló que, la estructura electoral del Partido Acción Nacional, está metida en el gobierno, en donde todos cobran un salario.
Aprovechó para responderle al candidato del PRI, Enrique Acosta Fregoso, sobre los señalamientos de corrupción dentro de Morena.
“Tienen un candidato -Enrique Acosta Fregoso- con el sello de la corrupción, que empieza a hacer señalamientos de corrupción contra nosotros, y no se da cuenta que le esta saliendo sangre de la mordida de lengua que se dio. Es una vergüenza que el Partido Revolucionario Institucional tenga esa representación, por eso mucha gente del PRI, volteo hacia otras partes”, destacó Bonilla Valdez.
Bonilla Valdez se mantiene evasivo sobre el tema de su participación en los tres debates que tendrá el Instituto Estatal Electoral de Baja California (IEEBC), indicando que “aún no lo decide”.
La respuesta de Bonilla Valdez converge con declaraciones en días pasados, en donde ha dicho que, los debates están sobrevalorados, teniendo como antecedente, que en su campaña de 2018 para el cargo de senador, no asistió a ninguno de los debates realizados.
Con respecto al amparo que interpuso sobre la gubernatura de dos años, indicó que fue porque la reforma se dio sin la aprobación de tres de los cinco municipios de Baja California, y que al éstos ampararse, fue que decidió hacer lo propio; añadió que los otros candidatos no buscaron la ampliación porque saben de antemano que perderán.