Pese a que recientemente el Servicio de Administración Tributaria (SAT) publicó una modificación a las reglas para implementar, y extender el plazo para aplicar el IVA al 8%, persiste “el cuello de botella” para poder acceder a los estímulos fiscales de la frontera norte, consideró Pablo César Castañeda, socio de la firma Caza Consultores.
El especialista dijo que hay contribuyentes que ya consideran salirse de esos beneficios fiscales por tener que pagar saldos, derivados de la adquisición de mercancías del interior del país o de importación al 16% y comercializarlas en la franja fronteriza al 8%.
Situación que afecta el flujo de dinero de las empresas, explicó Castañeda, quien apuntó que probablemente las compañías grandes pueden tener la capacidad económica para enfrentarla, ya que pueden contrarrestarla con la devolución del saldo a favor del IVA.
Pero las empresas pequeñas, medianas y emprendedores pueden tener dificultades de recursos al esperar a que sus saldos a favor de IVA sean devueltos.
Aunado a ello, la eliminación de la compensación universal por la Ley de Ingresos 2019, también limita el flujo de efectivo de las empresas.
Recordó que anteriormente la compensación universal permitía utilizar el saldo a favor de IVA para cubrir el ISR propio u otro impuesto federal, de esta manera el empresario no desembolsaba el pago de impuestos, pero ya no se puede efectuar.
En un comunicado, agregó que el decreto para la disminución del IVA contemplaba inicialmente sólo el envío de un aviso, pero posteriormente vinieron las reglas y posturas de la autoridad.
De modo que, mediante ellas se hizo saber que no bastaba con el envío del aviso, sino que también sería necesario esperar una respuesta que podría no ser aprobatoria, a pesar de que las primeras disposiciones no lo establecían.
