Incumpliendo con el Reglamento Interno y de Cabildo, el presidente municipal Juan Manuel Gastélum Buenrostro no ha llamado a sesionar a sus compañeros regidores del Cabildo, y los ediles tampoco han intentado convocar. Durante casi dos meses, las comisiones dictaminadoras también han mantenido su actividad al mínimo. Con alrededor de 40 iniciativas pendientes, los ediles evaden su responsabilidad dictaminadora, mientras se prepararan para participar en las campañas para intentar reelegirse
El 20 de diciembre de 2018 fue la última sesión que registró el Cabildo de Tijuana. Transferencias presupuestales, modificaciones de techos financieros y modificación de metas para cumplir con el programa financiero y de obra de 2018, fueron los puntos principales tratados en aquella sesión extraordinaria.
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Desde entonces, los encargados de gobernar y administrar el Municipio no han deliberado sobre los problemas que afectan a Tijuana y a sus habitantes.
Durante el periodo de inactividad, los transportistas volvieron a tomar las calles para manifestarse en contra del desorden que prevalece en ese sector, y a la fecha, la Comisión de Vialidad y Transporte que preside el panista Arnulfo Guerrero León, continúa sin presentar una propuesta tendiente a regular la actividad del transporte público de Tijuana.
Guerrero, quien también preside la Comisión de Gobernación y Legislación, así como la de Régimen Interno del Cabildo, justificó la ausencia de sesiones que violan el reglamento interno porque no tienen trabajo que hacer en la asamblea.
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Aseguró que todas las iniciativas presentadas por los regidores hasta ese momento seguían -por más de 50 días- en proceso y sin dictaminar. “Si no se tienen dictámenes solventados técnica y administrativamente, no hay temas para tratar en la asamblea”, dijo.
Sin embargo, los números evidencian el rezago y pasividad de los ediles, porque de alrededor de cien iniciativas presentadas por los quince regidores que conforman el XXII Ayuntamiento de Tijuana, alrededor del 60 por ciento no se han turnado al pleno, y el porcentaje restante sigue “en proceso”.
Temas como la reforma al Reglamento de Tránsito, la regulación del comercio ambulante, la creación de un mecanismo financiero para atender damnificados, iniciativas relacionadas con el servicio de alumbrado público, la independencia de la Dirección de Bomberos o el control de las ausencias y el trabajo del cuerpo edilicio.
En ese contexto, el regidor Manuel Rodríguez Monárrez acusó a Juan Manuel Gastélum Buenrostro de desatender las sesiones y abocarse a su precampaña para lograr reelegirse como alcalde, en lugar de administrar y atender los asuntos prioritarios de Tijuana. Situación rechazada por “El Patas” quien evadió hacer declaraciones respecto a sus aspiraciones de reelegirse, y aseguró “no estoy en campaña”.
De las sesiones de Cabildo no admitió responsabilidad y aclaró estar sujeto a lo que dictaminen los regidores.
LA IMPOSICIÓN DE “EL PATAS”
En 26 meses de gobierno del XXII Ayuntamiento, el Cabildo de Tijuana se ha reunido en 34 ocasiones, tres en sesión solemne.
De las 31 asambleas restantes, sólo dos han sido para celebrar sesión ordinaria, esto es, que los integrantes tengan oportunidad de presentar en forma libre sus propuestas, sin que los temas a tratar se limiten a lo establecido en el orden del día.
Monica Juliana Vega Aguirre, Regidor
Pero incluso en una de las dos sesiones ordinarias, Gastélum “impuso su voluntad por encima de los integrantes de su bancada”, señaló Manuel Rodríguez Monárrez.
Recordó que en la sesión ordinaria celebrada el 20 de octubre de 2017, su propuesta de declarar a Tijuana municipio en Alerta de Género por los recurrentes asesinatos de mujeres, fue avalada por la mayoría de los integrantes del Cabildo, “pero el mismo alcalde instó a sus regidores a cambiar el sentido de su voto, por lo que habiendo votado a favor en la primera ronda, vergonzosamente se vieron obligados a recular en una ilegal segunda ronda, porque no tendría que haber dos emisiones de votos”.
De acuerdo al reglamento de Cabildo, “el Ayuntamiento sesionará en forma ordinaria las veces que sean necesarias por mes, conforme a la convocatoria que expida el Presidente Municipal”, en tanto que “podrán celebrarse sesiones extraordinarias de Cabildo cuando sea necesario, conforme a la convocatoria que expida el Presidente Municipal o de la mayoría calificada de sus miembros”.
Sin embargo, para los ediles de oposición Mónica Vega, Manuel Rodríguez, Roberto Quijano y Jesús Ortiz Ampudia, con una bancada panista manejada por el alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro, no hay forma de lograr una mayoría para que sean los regidores quienes convoquen a sesionar, menos aún para decidir qué temas serán tratados por el pleno.
Según Rodríguez, el alcalde “tiene secuestrado al Cabildo, convoca cuando quiere y en el orden del día de las sesiones extraordinarias se tratan los temas que él impone”.
COMISIONES CON POCA ACTIVIDAD
La productividad de puntos de acuerdo o iniciativas presentadas por los quince regidores que conforman el XXII Ayuntamiento de Tijuana, particularmente de los azules, no ha sido mucha.
En 26 meses, alrededor de cien propuestas han sido turnadas por los regidores, de las cuales un 70% son iniciativas desarrolladas por ediles de oposición.
A excepción de Marco Antonio Romero Arizpe, cuya única propuesta presentada sí fue turnada y aprobada por el Cabildo -relativa a la aplicación de multas a quienes invadan carriles en la Línea Internacional-, los regidores de oposición de las fracciones de Transformemos, Morena PRI, y el independiente Roberto Quijano Sosa, no han sido favorecidos.
Arnulfo Guerrero León, Regidor
Sólo han visto amontonarse en las comisiones dictaminadoras sus iniciativas sin tener una respuesta. Básicamente, la Comisión de Gobernación y Legislación, presidida por Arnulfo Guerrero, no ha emitido los dictámenes.
A pesar del cúmulo de pendientes, esa Comisión no sesionaba desde diciembre.
Después del señalamiento público vertido por Manuel Rodríguez por la inactividad del Cabildo, Guerrero León convocó a los integrantes de la Comisión de Gobernación y Legislación a realizar cuatro sesiones de trabajo en un solo día, el 12 de febrero.
Ahí Mónica Vega planteó: “Exhortaría al presidente de la Comisión de Gobernación y Legislación a que le metiéramos acelerador a las propuestas para poder dictaminar”.
“La próxima semana lo hacemos”, le respondió Arnulfo Guerrero.
En tanto, la Comisión de Hacienda que preside Elvia Rangel, también aspirante a reelegirse, ha bajado notoriamente su ritmo de trabajo. De un promedio mensual de cuatro sesiones, durante el periodo de inactividad del Cabildo sólo ha sesionado en una ocasión.
El resto de la veintena de comisiones en las que se divide la labor del Cabildo de Tijuana se mantiene al mínimo, una sesión por mes.
LOS PENDIENTES DEL CABILDO
Roberto Quijano indicó que de 13 proyectos presentados para ser discutidos en el Cabildo, sólo uno ha sido turnado y aprobado. Entre sus puntos de acuerdo pendientes de discusión se encuentra el relativo a la creación del Reglamento de Participación Ciudadana para la realización de un plebiscito para que los ciudadanos opinen sobre el costo de las tarifas de transporte y sobre la solución a la problemática del servicio de alumbrado público, presentado a finales de febrero de 2018.
Rodríguez Monárrez ha presentado 17 propuestas, de las cuales dos han sido discutidas en el Cabildo. Separar la Dirección de Bomberos de la Secretaría de Seguridad Pública para que tenga independencia administrativa; y el proyecto de reforma del Reglamento de Protección Civil, con el objetivo de conformar un mecanismo financiero para la atención a damnificados, entregado desde mayo de 2018, tampoco ha sido turnado al pleno del Cabildo, se mantienen sin ser subidas al pleno.
Juan Manuel Gastélum
De 23 propuestas presentadas, Vega, edil con mayor productividad, ha logrado que 17 iniciativas le hayan sido aprobadas, contra una que le fue rechazada, precisamente la de calendarizar las sesiones de Cabildo.
En espera de dictamen se encuentran cinco de sus planteamientos, como el instalar una comisión edilicia para analizar las condiciones en que laboran los bomberos de base y de confianza, así como reformas a diversas ordenanzas para controlar las ausencias de los integrantes del Ayuntamiento de Tijuana.
Arnulfo Guerrero rechazó que las propuestas de los regidores de oposición se “congelen” por instrucción del alcalde, “es más bien por falta de sustento técnico y administrativo, no están bien integradas sus propuestas, que no es lo mismo a que estemos en contra.
“No sólo ellos -los regidores de oposición- tienen propuestas pendientes de aprobación, también los de mi fracción”, lo cual atribuye a deficiencia en la redacción y a la falta de consenso en su Comisión para ser turnadas al Cabildo.
De los ediles azules están pendientes de discusión la reforma al reglamento que regula el comercio ambulante en sus diferentes modalidades, presentado a la Secretaría de Gobierno el 20 de marzo 2018, y las modificaciones al Reglamento de Tránsito y Control Vehicular, entregado el 23 de julio del mismo año por el regidor Rogelio Palomera.
LEOPOLDO GUERRERO VIOLA REGLAMENTO
El 16 de enero de 2019, el secretario de Gobierno Municipal, Leopoldo Guerrero Díaz, recibió la iniciativa ciudadana Tijuana Libre de Pirotecnia, con la indicación de Conciencia y Acción Ciudadana, AC -organismo autor de la propuesta- que fuera turnada a la Comisión del Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Salud.
De acuerdo al Reglamento Interno y de Cabildo, el secretario está obligado a canalizar cada iniciativa a la Comisión del Cabildo que competa, lo solicite o no el proponente.
No fue el caso de esta iniciativa, la cual Guerrero envió a la Comisión de Protección Civil que preside el panista Rogelio Palomera Hernández, cuando corresponde a la Comisión del Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Salud,, dictaminar respecto a los proyectos de reglamentos, discusiones normativas y de observancia general en esa materia.
Manuel Rodríguez Monráz, Regidor
En franca violación al reglamento, “no sé si es por omisión o por ignorancia de él mismo que envía los temas a dictaminar a lo que su criterio considera. Debería dar una leída al reglamento”, expuso Mónica Vega, quien preside la Comisión ignorada por Guerrero Díaz.
Al respecto, el funcionario anotó que todas las iniciativas se reciben y se turnan a Cabildo para que la Comisión pertinente revise su factibilidad, la ajuste en términos de Ley y la suba al pleno.
DESBANDADA DE EDILES
En un año de elecciones como 2019, en el que por única ocasión se permitirá la reelección, el ausentismo de los ediles aspirantes a candidatos es evidente en las oficinas de regidores.
Aunque aseguran estar ocupados en asuntos relativos a sus comisiones, lo cierto es que el proceso electoral resulta un distractor, particularmente para quienes participarán en la contienda, reconoció el regidor Arnulfo Guerrero León, quien buscará reelegirse como edil.
En la sesión de celebrada el 8 de noviembre de 2018, Eligio Valencia López solicitó licencia para abandonar su silla en el Cabildo de Tijuana y ocupar la delegación de Infonavit en Baja California, sin que a la fecha su suplente, Miguel Pérez Torres, haya rendido protesta para entrar en funciones.
A casi dos meses de no reunirse, nueve de los 17 integrantes que conforman el cuerpo colegiado del Ayuntamiento de Tijuana se encuentran a punto de abandonar la administración municipal, entre ellos el propio alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro y seis regidores panistas (Arnulfo Guerrero, Myrna González, Elvia Rangel, Karina del Real, Rogelio Palomera y Luis Pérez).
A la desbandada temporal del Cabildo se suma Mónica Vega, regidora de Transformemos, quien indicó que también irá por la reelección; y la priista Julieta Aguilera, quien espera ser postulada a una candidatura por su partido. Mientras que el morenista Manuel Rodríguez aceptó haber recibido una invitación para incorporarse a la delegación de la Secretaría de Relaciones Exteriores en Baja California, la cual, aseguró, aceptaría hasta concluir su periodo como regidor.
