El 16 de enero un joven fue capturado por residentes del fraccionamiento Valle de las Palmas, en Tijuana, tras ser señalado como el presunto responsable de asaltar a una mujer; los vecinos lo golpearon, desnudaron y posteriormente lo sujetaron a un poste de luz con cinta adhesiva, al frente le dejaron una cartulina con una advertencia: “Esto le va a pasar al que se agarre robando. Atte. Todos los vecinos”.
La imagen se difundió a través de las redes sociales, a unas horas que se hiciera público el caso de un grupo de conductores del servicio Uber que persiguieron y aseguraron a un presunto asaltante, luego de ubicarlo a bordo de un vehículo que robó a uno de ellos.
“Entendemos la necesidad de justicia de la gente, pero el problema es que es tan grande la ciudad que es difícil llegar a todos”, expresó Genaro De la Torre Quintanar, presidente del Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Tijuana.
Explicó que a través del Comité Ciudadano se establece una vinculación con la policía y los grupos de vecinos vigilantes, para que fluya la información de las zonas y las personas que cometen delitos contra la ciudadanía y sea la propia autoridad la que haga las detenciones de manera legal.
“Con el Nuevo Sistema de Justicia Penal muchos delincuentes entran en una especie de puerta giratoria, más tarda la policía en detenerlos cuando ya están de vuelta en las calles. Esto desmotiva, no solo a la ciudadanía, también a los propios policías”, manifestó.
Recomendó a los ciudadanos a no perder la confianza en las autoridades y mantener firmes las vías de la denuncia, pero en caso de estar en un arresto ciudadano evitar llegar a la violencia, porque esto puede llevar a incurrir en un delito.
Por su parte el subprocurador en Tijuana de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Jorge Álvarez, coincidió en que los ciudadanos deben abstenerse de “tomar justicia por propia mano” y denunciar cuando son víctimas de un delito.
Señaló que si los ciudadanos detectan en la colonia a las personas que cometen delitos, deben acudir a la autoridad para que se establezcan como objetivos y se les pueda detener correctamente.
“Si el ciudadano comete el delito de lesiones, que en ocasiones puede derivar en lesiones muy graves o en un homicidio, puede traerle complicaciones legales. Por eso les recomendamos la denuncia”, puntualizó.