Marco Antonio Sotomayor Amezcua, titular de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM), aseguró que pese a las amenazas que la Policía Municipal ha recibido en los últimos días a través de mantas e incluso por medio de la frecuencia de radio, la corporación no dejará de realizar su trabajo.
“No podemos permitir que nadie, ningún grupo delictivo, ninguna persona, nos amenace y que esa amenaza provoque no actuemos para poder llevar a cabo nuestras atribuciones. Independientemente de que seamos o no amenazados, seguiremos haciendo al trabajo que nos corresponde, al que estamos obligados por ley”, señaló en conferencia de prensa esta mañana.
El jueves 3 de enero por la noche, los oficiales Omar Araujo y Fidencio Figueroa fueron atacados a balazos mientras comían en un restaurante de comida china ubicado en la colonia Sánchez Taboada, ambos perdieron la vida.
Sobre las declaraciones del alcalde respecto a que los policías pueden hacer uso de la fuerza letal cuando su vida se encuentre en riesgo, el secretario de Seguridad Pública comentó que para ello, existe un protocolo.
“Lo que no queremos es que por temor a represalias o una consecuencia jurídica, los policías no defiendan su vida o al de los ciudadanos. Pueden hacer uso legítimo de la fuerza cuando sea necesario”, detalló.
Sotomayor Amezcua explicó que la Policía Municipal sospecha que el atentado contra los oficiales, quienes se encontraban comiendo en el interior del restaurante, haya sido una represalia por dos detenciones de alto perfil que se realizaron en diciembre.
En una de ellas, el 25 de diciembre, policías municipales detuvieron a tres sujetos con dos armas largas calibre .223 después de que disparan e intentaran asesinar a un hombre en un motel de la colonia La Joya.
Después de ello, policías municipales escucharon por la frecuencia de radio, una amenaza de muerte si no dejaban libres a los tres sujetos detenidos, quienes fueron presentados ante un juez y vinculados a proceso por el delito de homicidio en grado de tentativa.
Respecto a las circunstancias en el incremento de homicidios en la ciudad y que ha cobrado la vida de varios policías en los últimos años, el funcionario municipal reiteró “lo que vemos es esta combinación entre rivalidades entre grupos antagónicos, en pugnas al interior de estos grupos delictivos, pero también la problemática de las armas… esta ciudad está inundada de armas de fuego. Ayer fueron 6 armas decomisadas, son un peligro para todos los tijuanenses, pero sobre todo para los policías”.