Como el burro que tocó la flauta, Carlo Bonfante Olache, uno de los colaboradores del gobernador Francisco Vega de Lamadrid más señalados de corrupción, negociaciones extraoficiales, presiones a constructores y aprovechado de las becas Conacyt, tuvo la suerte política que cuando fue presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación en Mexicali, conoció en Ciudad de México a la empresaria y entonces dirigente nacional de ese organismo, Yeidckol Polevnsky Gurwitz. Por aquellos años ni la consideraba, ni la apoyaba. Caso contrario, comentan sus contemporáneos, la denostaba por su calidad de mujer “pretendiendo dirigir una organización nacional”. Pero solícito entonces, como muchos agremiados, se apegó a “su presidenta” mientras lo fue. Para su buena fortuna, Yeidckol ahora es la dirigente nacional del que en el futuro cercano será el partido en el poder, Movimiento Regeneración Nacional, además, una de las cercanas al Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador. En ese entendido, ha sido “nombrado” el enlace extraoficial de Vega con la líder de Morena. Lo que intentan es que, de ganar los morenistas la elección de 2019, no los investiguen, no los señalen, así llanamente. Lo que buscan los panistas de “Kiko” Vega es establecer un pacto de impunidad con el nuevo partido en el poder. En la foto se aprecia a Bonfante del lado derecho de Polevnsky, mientras a su izquierda está el abogado Guillermo “Titi” Ruíz, quien también representa al gobernador en algunas cuestiones en las que sirve de enlace para “arreglar” problemas judiciales, pues presume tener al Tribunal Superior de Justicia del Estado y a casi todos los jueces, a su favor. Ahora sí que Yeidckol cayó en las garras del gobierno panista señalado por ser uno de los más corruptos: el que encabeza Francisco Vega, el ya llamado “Duarte de BC”. Resta esperar a que los de Morena sean gobierno para ver si hubo o no, pacto de impunidad.