“Yo no soy abogada para defender a nadie, yo creo que si ha dicho cosas, si ha declarado cosas –el alcalde Juan Manuel Gastélum Buenrostro-, si el entorno de las declaraciones han sido fallidas, pues creo que se pueden revisar”, advirtió Maricarmen Flores a un día de asumir la Dirección de Comunicación Social del XXII Ayuntamiento de Tijuana.
A punto de concluir el segundo año de su trienio, el presidente municipal la invitó a colaborar para “apoyar en comunicación social, reforzar esta área e imprimir mi experiencia”.
Con 34 años de experiencia en medios de comunicación, ésta es la primera vez que ocupa un cargo público, el cual dijo aceptó imponiéndose como único límite el respeto; “hay que tener respeto, si te hacen una invitación debe partir de la confianza”.
En entrevista para ZETA ponderó que su objetivo como vocera oficial del municipio “es hacer periodismo desde otra visión: la de gobierno”, premisa que “implica una excelente redacción, si queremos comunicar se tiene que cambiar la redacción”.
Sin aún realizar una evaluación del área que dirige desde la mañana del miércoles 26 de septiembre, adelantó que va a dejar fluir la dinámica de trabajo que dejó su antecesor, Moisés Márquez, pero “voy a imponer mi estilo, que es: orden, planeación, cumplimiento de metas, buena redacción, ortografía, trabajo en conjunto, respeto al trabajo que hacen y lealtad”.
No habló de fallas en el área, pero sí de huecos que han evitado conectar las acciones del municipio con la comunidad, “hay mucho trabajo el que se está haciendo, el que llegue a la comunidad es una parte en donde creo que hay un huequito. Esa va a ser mi tarea, decirle a la gente lo que sí se está haciendo en favor de esta ciudad. La conexión con los medios y los ciudadanos es la parte importante por la que considero me invitaron a colaborar”, subrayó.
Calificó su relación con los medios de comunicación como buena “no tengo ningún problema con nadie, nunca he tenido problemas con nadie, eso no significa que sea monedita de oro obviamente, pero si tú te das cuenta, desde el nombramiento, la recepción fue buena. Se habla de mi trabajo, profesionalismo, carácter, pero no se habla de guerra ni más allá. Desde este lado tienes que asumir una postura diferente, hablar con los directivos y reporteros, bajo el respeto. Siempre he respetado a las personas y lo que pido para mí es respecto”.
También garantizó fluidez en la entrega de información requerida por los periodistas, evitando que se centralice, “de nada me servirá estar en el área de Comunicación si tu reportaje va a estar incompleto y de todos modos va a ser una crítica porque no te dieron la información que tú requerías para equilibrar, comparar y hacer tu investigación”.
Maricarmen se describió como una persona “muy divertida” y “comprometida con la comunidad”; de su activismo social enumeró su participación en la creación de la alberca del Instituto Municipal del Deporte en Tijuana (Imdet), el Patronato Zócalo 11 de Julio, como fundadora del proyecto del Hospital de Las Californias, la Ciudad de Los Niños. Además, es mediadora certificada por la Organización de Naciones Unidas (ONU), entre otras causas. “Preparada creo que estoy y vinculada con la comunidad más”.
“Tengo que ser congruente con lo que pienso y hago”, agregó al asegurar que no utilizará ni vehículo ni celular oficial. Luego concluyó: “he construido 34 años de mi vida periodística para heredarles un buen apellido a mis hijas. Eso no lo voy a echar a perder aquí, vine a construir y fortalecer lo que soy y lo que he construido, sé que es un enorme reto, pero también sé que tengo la capacidad y también sé hacer equipo”.